Capítulo 1

Autonomía en la alimentación del ACNEE

Contenido

1. Introducción

2. Características del ACNEE a tener en cuenta en la actividad del comedor escolar: nivel de dependencia

3. Acciones a desempeñar: lavado de manos, colocación de baberos u otras

4. Mobiliario y materiales a utilizar: características

5. Análisis de programas de autonomía y hábitos en la alimentación

6. Resumen

1. Introducción

La alimentación, como otros factores que inciden en la vida de los seres humanos, influye de forma determinante en la salud del individuo. Los estados de salud y bienestar general, dependen en buena medida de la alimentación que los sujetos mantienen a lo largo de su vida.

Por ello, la dieta de los escolares debe proporcionar las calorías suficientes que les permitan un desarrollo psicofísico adecuado en relación a sus características individuales.

Así, dentro de la jornada escolar se pueden aprovechar las horas de comer como momentos plenamente educativos que busquen la adquisición de autonomía en la realización de actividades habituales básicas de salud e higiene. Sin olvidar proporcionar al alumnado pautas sobre los hábitos de consumo y vida saludable.

Por otro lado, a lo largo del capítulo se definirá qué se entiende por Alumnado con Necesidades Educativas Especiales (ACNEE) y sus características propias. Asimismo se tendrán en cuenta las condiciones desfavorables que se encuentran en la actividad del comedor y qué recursos y apoyos se deben buscar para una mayor equidad.

Por último se analizarán los programas de autonomía y hábitos en la alimentación tratando que este se convierta en un instrumento docente útil para mejorar la salud y calidad de vida del ACNEE.

2. Características del ACNEE a tener en cuenta en la actividad del comedor escolar: nivel de dependencia

En la vida cotidiana son muchas las conductas que el ser humano debe desempeñar, teniendo todas ellas como denominador común la independencia y autonomía del individuo en relación con otras personas.

No se debe separar la escuela y la vida. El aprendizaje tiene que estar íntimamente unido a la existencia de cada individuo en concreto, a su cotidianeidad y su experiencia diaria. Más aún si se habla de ACNEE (Alumnado con Necesidades Educativas Especiales), cuya necesidad primordial será la independencia y autonomía para llegar a conseguir la integración social (que es uno de los grandes fines de la educación).

La enseñanza de habilidades básicas y hábitos de autonomía, dentro de las cuales estaría la alimentación, persigue un doble objetivo:

  1. Potenciar al máximo las posibilidades del sujeto facilitándole a corto plazo el desenvolvimiento en el contexto escolar y familiar.
  2. Posibilitar, a más largo plazo, su desarrollo en el medio social e integración activa y participativa en el mismo.

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Definición

ACNEE (Alumnado con Necesidades Educativas Especiales)

Aquel que requiera, por un periodo de su escolarización o a lo largo de toda ella, determinados apoyos y atenciones educativas específicas derivadas de discapacidad o trastornos graves de conducta.

No es un reto fácil, sobre todo si se tiene en cuenta que el comedor escolar, como contexto educativo, trata de poner en juego todos los elementos organizativos (materiales, espacios, agrupamientos, horarios, infraestructuras, coordinación de profesionales, estrategias, etc.) en aras de cubrir las necesidades que presenta el alumnado.

Por otro lado, también decir que el ACNEE como cualquier otro niño en edad escolar, presenta las condiciones ideales para el asentamiento y adquisición de dichos hábitos y actitudes alimenticias que favorecerán su calidad de vida como persona adulta gracias a:

  1. Capacidad de conducta imitativa.
  2. Posibilidad de relacionar estos contenidos con su actividad natural. El juego como medio de aprendizaje.
  3. Su curiosidad e interés hacia los objetos, espacios y situaciones.
  4. Su admiración por el mundo adulto, que hará que desee comportarse como ellos, tomándoles en este caso como ejemplo.

Estas capacidades junto con la casuística particular de cada uno de los/as alumnos/as serán las que se tendrán en cuenta para dar una respuesta que se ajuste a las necesidades y al nivel de dependencia para actuar como elemento corrector de las posibles desigualdades que pudieran surgir en el contexto del comedor escolar.

2.1. Características del ACNEE

Más concretamente, cuando se habla de características propias o casuística particular de cada uno de los ACNEE en el contexto del comedor escolar se hace referencia a las que se describen a continuación.

Desplazamientos

Se observa de forma concreta cómo el/la alumno/a se desplaza. Esto posibilita la detección de cuáles van a ser sus necesidades para poder actuar de forma autónoma por el comedor escolar y qué modificaciones o cambios serán necesarios para eliminar las barreras arquitectónicas y trabas para lograr así la adaptación del contexto al escolar y los requerimientos especiales que este necesite.

Así se hará necesario conocer:

  1. Si utiliza silla de ruedas: tipo (si es autopropulsada, neurológica, manual, etc.).
  2. Si tiene autonomía de desplazamiento por el interior del centro o por los patios y si precisa ayuda de andador, bastones, paralelas, etc.
  3. Si utiliza otros medios: triciclo adaptado, reptador con ruedas, etc.

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Actividades

1. Busque información sobre la normativa vigente que regula los comedores escolares y analícela.

2. Indique qué posibles barreras arquitectónicas y obstáculos cree que se pueden encontrar en un comedor escolar.

Manipulación

A través del conocimiento de esta característica se podrá realizar la previsión del tipo de materiales que van a poder utilizar (bandeja, tenedor, cuchara, etc.), qué adaptaciones se tendrán que realizar sobre los mismos para favorecer su utilización y qué materiales alternativos se introducirán para facilitar el aprendizaje de determinadas destrezas (beber agua, llevarse el tenedor a la boca, etc.). Por ello se deberá comprobar si:

  1. El alumno tiene uso funcional de las manos y en qué medida afecta su discapacidad a los miembros superiores.
  2. Qué mano utiliza preferentemente o si utiliza la no dominante como apoyo.
  3. Puede coger un objeto y soltarlo, desplazar objetos por la mesa mediante el arrastre, señalar.
  4. Tiene intencionalidad manipulativa.

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Comunicación

Se debe prever cómo se llevará a cabo la interrelación y comunicación con su grupo de iguales y con los monitores de apoyo que le asisten.

En ocasiones será necesario introducir sistemas alternativos y aumentativos de comunicación (SAAC) e incorporar el uso de ayudas técnicas en el desenvolvimiento normal del comedor.

Es importante en este sentido planificar el soporte para que tanto los especialistas de apoyo en el comedor, como el propio alumnado conozcan y domine las técnicas y los recursos materiales que se van introduciendo.

Más concretamente y con respecto a este ámbito (no se debe olvidar que por norma general el comedor es bastante ruidoso) se debe considerar:

  1. Si tiene lenguaje oral y en qué grado es inteligible.
  2. Si utiliza algún sistema aumentativo o alternativo de comunicación.
  3. Si emplea algún sistema codificado para manifestar la negación y la afirmación.
  4. Cuáles son los gestos más usuales y su significado.
  5. Si ha recibido tratamiento de logopedia o de maestro de audición y lenguaje.

Deglución

Los problemas de deglución se encuentran en alguna de las actividades específicas del proceso normal de deglución, tales como la actividad lingual, labial, dental o paladar. Las dificultades pueden oscilar desde una incapacidad total para tragar, hasta la tos o el ahogo cuando los alimentos o líquidos entran a la tráquea, situación conocida como aspiración.

Con el fin de superar estas dificultades se planteará un tratamiento que deberá enfocarse en la búsqueda, adaptación y adecuación de métodos y técnicas que permitan restablecer o compensar las deficiencias existentes (principalmente en alimentación e hidratación). Algunos ejemplos son dar comida pasada, utilizar una pajita, etc.

Algunas características son:

  1. Hipotonía en labial, falta de sellado de los labios, e incluso babear.
  2. Puede haber fonemas que no se produzcan de forma adecuada.
  3. Hipotonía lingual: la lengua está en posición de reposo y suele salir hacia afuera.
  4. Al cerrar la boca las arcadas no unen bien.
  5. Suelen respirar por la boca, por lo que se trabaja la respiración nasal.

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Sedestación o posición de sentado

Se debe prever qué modificaciones deberán establecerse sobre la mesa y la silla de comedor para posibilitarles un control de su postura en sedestación que les aporte seguridad y comodidad, reduzca sus movimientos incontrolados y potencie y motive el desempeño de determinadas destrezas de forma correcta. Así para ello se tendrán en cuenta:

  1. El grado de control del tronco.
  2. Posibles desviaciones de columna.
  3. Adaptaciones del mobiliario de uso común para el escolar.

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Capacidades cognitivas

Las capacidades cognitivas son aquellas que se refieren a lo relacionado con el procesamiento de la información, esto es:

  1. Atención: mecanismo de control de la elección del estímulo.
  2. Percepción: conducta mediante la que se toma conciencia de la realidad.
  3. Memoria: capacidad para almacenar y reproducir información obtenida como respuesta a estímulos específicos.
  4. Resolución de problemas: habilidades para solventar conflictos básicos.
  5. Comprensión: entender las ideas principales.
  6. Establecimientos de analogías: búsqueda de una semejanza con algo ya aprendido o conocido.

Estas son fundamentales ya que de ellas dependerá la forma de aprender cualquier habilidad o destreza relacionada con la autonomía en los hábitos básicos de alimentación.

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Sabía que

El informe Warnock señaló tres prioridades como ejes que mejorarían cualitativamente la atención al ACNEE:

  1. Formación y perfeccionamiento del profesorado.
  2. Atención educativa temprana (prevención de futuras dificultades).
  3. Educación para los jóvenes con NEE.

Otros aspectos

Es conveniente conocer la existencia de:

  1. Crisis convulsivas: es importante para los equipos de apoyo en comedor estar familiarizados con estos procesos, conocer la medicación que los alumnos tienen prescrita y en qué medida puede afectar a su actividad alimentaria, reconocer los signos de alerta, y sobre todo es necesario desmitificar el proceso, abordando con serenidad las crisis y actuando de forma precisa en cada momento.
  2. Control esfinterial: no es lo mismo que un alumno/a no controle estas necesidades básicas por presentar retraso madurativo que por tener serias dificultades motóricas, por padecer problemas urológicos, o tener secuelas de una paraplejia. Será necesario analizar la situación y programar la consecución del control esfinterial para que el escolar sea autónomo en estos menesteres, introducir variables que le posibiliten comunicar cuándo quiere hacer sus necesidades, o bien programar actividades previas y posteriores al momento del almuerzo, posibilitándole el entrenamiento en el cambio de pañales de forma autónoma, el autosondaje, la reducción de olores, etc.
  3. Alergias o patologías alimentarias: son una reacción inmunológica como respuesta a la exposición a un alimento o a un componente de un alimento. La mejor manera de tratar las alergias es con la eliminación de la dieta de los alimentos que la causan y para ello es necesario que tanto el alumno/a como el equipo de monitores o educadores del comedor los conozcan y sepan cuál puede ser la reacción ante una posible ingesta.

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Actividades

3. Determine qué diferencia hay entre una alergia y una patología alimentaria.

4. Realice un mapa conceptual de las capacidades cognitivas más representativas.

2.2. Nivel de dependencia

Cuando la limitación en la actividad de la vida cotidiana de una persona alcanza un nivel en el que el individuo ya no es capaz de realizarla por sí mismo, se considera a la persona dependiente. Esto indica que necesita a terceras personas como apoyo.

Los educadores o especialistas de apoyo en el comedor escolar han de ser profesionales comprometidos con el desarrollo personal y social del ACNEE, teniendo siempre un conocimiento de primera mano de las carencias personales y sociales de las personas dependientes a las que dedican una atención especial. Desentenderse de las cuestiones relacionadas con la autonomía del alumnado con limitaciones de cualquier tipo es dejar de lado los derechos fundamentales de las personas afectando a su calidad de vida.

El conocimiento del nivel de dependencia del alumnado facilitará información acerca de qué apoyos necesita.

Este nivel o grado de dependencia viene determinado por la Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las Personas en Situación de Dependencia, que en su artículo 26 establece:

1. La situación de dependencia se clasificará en los siguientes grados:

  1. Grado I: Dependencia Moderada. Cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria al menos una vez al día, o tiene necesidades de apoyo intermitente o limitado para su autonomía personal.
  2. Grado II: Dependencia Severa. Cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria dos o tres veces al día, pero no quiere el apoyo permanente de un cuidador o tiene necesidades de apoyo extenso para su autonomía personal.
  3. Grado III: Gran Dependencia. Cuando la persona necesita ayuda para realizar varias actividades básicas de la vida diaria varias veces al día y, por su pérdida total de autonomía física, mental, intelectual o sensorial necesita el apoyo indispensable y continuo de otra persona o tiene necesidades de apoyo generalizado para su autonomía personal.

Esta información, centrada de nuevo en el ámbito escolar, vendrá recogida en el dictamen de escolarización del ACNEE tal y como dice la Orden de 19 de septiembre de 2002 por la que se regula la realización de la evaluación psicopedagógica y el dictamen de escolarización:

El dictamen de escolarización es un informe fundamentado en la evaluación psicopedagógica en el que se determinan las necesidades educativas especiales y se concretan la propuesta de modalidad de escolarización y la propuesta de las ayudas, los apoyos y las adaptaciones que cada alumno o alumna requiera. El dictamen de escolarización será elaborado por el equipo de orientación educativa de la zona, dependiente de la Consejería de Educación y Ciencia, que corresponda al centro educativo donde esté escolarizado el alumno/a.

Estos datos sobre las capacidades y necesidades individuales del ACNEE que estén relacionadas con los hábitos de alimentación y autonomía se tomarán como referencia para la confección de programas, entre otros los de aprendizaje de hábitos de autonomía e higiene personal elaborados por el equipo interdisciplinar del centro educativo.

Son en los programas de adquisición de hábitos de alimentación y autonomía personal donde los educadores o especialistas de apoyo en el comedor han de basar todas sus actuaciones, siguiendo los protocolos que ahí se describen y en coordinación con el resto de profesionales y la familia del ACNEE.

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Aplicación práctica

Es el comienzo de curso, la coordinadora del equipo de monitores de apoyo en el comedor le comenta a Virginia (monitora encargada de ACNEE) que hay un niño nuevo con parálisis cerebral al que tiene que asistir. ¿Cómo puede Virginia recoger más información sobre las necesidades y capacidades individuales del alumno?

SOLUCIÓN

Virginia deberá obtener más información a través de:

  1. El equipo multidisciplinar que atiende al alumno en concreto durante a jornada escolar y/o en su caso al tutor de referencia.
  2. El equipo directivo del centro para que le indique las pautas que desde el equipo de orientación educativa se le prescriben.
  3. A los padres si tiene ocasión de verlos en el momento de la recogida. Podrá preguntarles cómo actúan ellos en casa en el momento de las comidas.
  4. Y fundamentalmente al dictamen de escolarización personal y al programa de adquisición de hábitos de alimentación y autonomía personal que tiene el ACNEE, donde además de recoger las necesidades y capacidades del alumno se indicarán los recursos tanto materiales como personales que la administración educativa ha de proporcionarle.

Nota: la comunicación de la información que se establece con los/las profesionales correspondientes y con las familias del ACNEE ha de seguir los protocolos previstos en el programa de autonomía y hábitos en la alimentación para garantizar la coordinación de los mismos.

3. Acciones a desempeñar: lavado de manos, colocación de baberos u otras

Los monitores de apoyo en el comedor deben ser conscientes de la importancia y valor de su trabajo, ya que este es primordial para los/as niños/as. Durante las dos o tres horas del tiempo del mediodía los monitores han de ser un referente para ellos, ya que la manera en que actúan repercute sobre los niños. Por tanto deben conseguir que esta influencia sea siempre positiva.

Para ello se han de tener en cuenta algunos aspectos importantes a la hora de desempeñar correctamente el trabajo:

  1. Tener una actitud positiva y cercana al ACNEE.
  2. Ser dialogantes, respetuosos y cariñosos.
  3. Actuar con criterios firmes y tener seguridad en sí mismos.
  4. Ser autónomos y poder solucionar las dificultades que puedan surgir.
  5. Estar atentos a las necesidades del alumnado.
  6. Mantener un trato cordial y respetuoso con el personal del centro y familiares.

El comedor no es solo el lugar donde se va a comer. Este ha de ser un espacio educativo donde se aprende a comer de manera correcta y adecuada.

Teniendo en cuenta todo lo anteriormente mencionado se podría decir que el equipo de educadores o especialistas de apoyo al ACNEE deberá seguir las pautas de actuación de los programas de aprendizaje de hábitos de autonomía e higiene personal elaboradas por el equipo interdisciplinar del centro educativo.

Estas pautas de actuación estarán delimitadas por una serie de hábitos y rutinas cotidianas que deben ser tomadas como puntos de referencia para planificar la intervención educativa, ya que estas rutinas les permiten al ACNEE prevenir y anticiparse a situaciones, así como orientarse en el tiempo y en el espacio, al tiempo que refuerzan hábitos que generalmente les acompañan.

Estas acciones se podrán clasificar según el momento de actuación.

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Actividades

5. Explique el significado de comedor como espacio educativo. Razone su respuesta.

6. Si los monitores de apoyo han de ser un referente, ¿cómo cree que debe ser su higiene personal?

3.1. Momentos de actuación por parte del especialista de apoyo en el comedor

Se pueden dividir en tres momentos claves: antes de comer, durante la comida y después de comer.

Antes y después de comer

En el momento anterior al almuerzo como en el inmediatamente posterior se han de llevar a cabo las siguientes acciones:

  1. Supervisar el lavado de manos para asegurar que todo el ACNEE lo ha realizado siguiendo las pautas del programa de aprendizaje de hábitos de autonomía e higiene personal.
  2. El lavado de manos se realiza a aquel ACNEE que no puede hacerlo de manera autónoma, explicándole el procedimiento a seguir para favorecer su autonomía.
  3. Acompañar al baño y ayudarle si fuese necesario a cambiarse el pañal.
  4. Proporcionar ayuda en la colocación de baberos o batas al ACNEE que lo utilice, anticipándole a la actividad de la comida para que interiorice los aprendizajes relacionados con las rutinas diarias y adquiera hábitos de higiene.
  5. Fomentar la autonomía del alumnado ofreciéndole ayuda cuando sea necesario en cuanto a los desplazamientos por el centro.
  6. Supervisar la distribución de los menús teniendo en cuenta aquellos con dietas especiales, ya sean puntuales o no.
  7. Tratar que el alumnado tenga un comportamiento adecuado en el patio. No permitir conductas que no sean respetuosas.
  8. Controlar que tanto la entrada como la salida del comedor se realice de manera ordenada, por grupos, sin correr, ni saltar.
  9. Facilitar la comunicación entre iguales para potenciar la socialización del ACNEE siguiendo las pautas de los programas de autonomía social.
  10. Procurarles un sito adecuado y adaptado a sus posibilidades para guardar sus pertenencias de forma ordenada.
  11. Motivar al ACNEE a asumir responsabilidades a la hora de poner la mesa y recogerla.

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Durante la comida

Por otro lado, durante el almuerzo se han de llevar a cabo las siguientes actuaciones:

  1. Orientar e insistir en el correcto manejo de los cubiertos, así como del cuidado de todos los útiles de la comida (vasos, cubiertos, servilleta, etc.).
  2. Prestar un mayor apoyo a los escolares que así lo requieran e incluso administrar los alimentos, indicándole siempre al ACNEE los alimentos que se van a ingerir para que los identifique y colabore en la medida de sus posibilidades.
  3. Asegurarse de que los alimentos se toman de forma ordenada (primer plato, segundo plato y postre) y la cantidad suficiente de cada plato.
  4. Procurar que el ACNEE esté bien sentado para un correcto control postural mientras come.
  5. Fomentar que los escolares permanezcan sentados durante la comida y si requieren de atención que la soliciten de una manera educada.
  6. Aplicar programas de adquisición de hábitos de alimentación y autonomía.
  7. Desarrollar un espíritu crítico para saber qué se debe comer.
  8. Potenciar habilidades sociales y de comunicación, así como el buen comportamiento y normas de convivencia establecidas en el momento de comer.
  9. Habituar en la medida de lo posible al ACNEE a nuevas texturas y sabores.

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Actividades

7. Elabore un mural con pictogramas en el que se desgrane cada paso del lavado de manos.

8. ¿Qué normas de comportamiento y de convivencia cree que son fundamentales en el contexto del comedor escolar?

4. Mobiliario y materiales a utilizar: características

Los primeros problemas que surgen en muchos casos de integración es la eliminación de barreras arquitectónicas. Los espacios educativos del centro han de poder permitir al alumnado integrado la plena libertad de movimiento, utilizando una distribución flexible del espacio y del mobiliario en diferentes áreas y actividades.

En el Título IV de la LOE referido a los centros docentes, en su artículo 112, se hace referencia a los medios materiales y humanos donde se dice que:

Corresponde a las Administraciones educativas dotar a los centros públicos de los medios materiales y humanos necesarios para ofrecer una educación de calidad y garantizar la igualdad de oportunidades en la educación.

Dicha asignación quedará condicionada a la rendición de cuentas y justificación de la adecuada utilización de dichos recursos.

Posteriormente en el artículo 122 modificado por la Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre (LOMLOE) se trata de manera más específica el tema de los recursos señalando en el punto 2 que:

Las Administraciones educativas podrán asignar mayores dotaciones de recursos a determinados centros públicos o privados concertados en razón de los proyectos que así lo requieran o en atención a las condiciones de especial necesidad de la población que escolarizan.

Dicha asignación quedará condicionada a la rendición de cuentas y justificación de la adecuada utilización de dichos recursos.

Teniendo en cuenta esta normativa se podría decir que el equipamiento ha de entenderse como un elemento de apoyo al buen funcionamiento de un centro educativo, por lo que se tendrá en cuenta:

  1. El propio edificio.
  2. El alumnado que será el usuario del mobiliario y a quien se destina el material.
  3. La organización interna del centro escolar.

Los edificios y su equipamiento deben caracterizarse por la adaptabilidad y la flexibilidad.

Entendiendo estas como:

  1. La adaptabilidad es la propiedad de un edificio para admitir cambios en sus infraestructuras, desplazamientos de la edificación, eliminación o adición de elementos constructivos, etc.
  2. La flexibilidad hace referencia a la cualidad de una estructura que permite la variación de servicios y dependencias, es decir, cambios en la distribución interior de las edificaciones.

Por tanto se puede decir que a la hora de construir el edificio escolar se ha de tener en cuenta variables como la ubicación, orientación, estructura, distribución de los espacios, condiciones acústicas, iluminación, ventilación y sistemas de calefacción y aire acondicionado.

Pero sin olvidar que se ha de edificar de la forma más adaptada posible para todo tipo de discapacidad, construyendo así por ejemplo:

  1. Rampas: que deberán tener la longitud, pendiente y forma adecuadas en correspondencia a los escalones que debe salvar.
  2. Ascensor: la botonera debe estar en la zona de alcance, con botones en escritura braille y tener un contraste adecuado con el fondo. También se debe considerar si la cabina del ascensor tiene capacidad suficiente para el especialista de apoyo que acompañe al ACNEE en ese momento determinado.
  3. Salva-escaleras con plataforma: son dispositivos que tienen una plataforma abatible sujeta a uno o más raíles y que siguen la forma y el ángulo de la escalera.
  4. Para el alumnado con ceguera o discapacidad visual las diferencias de nivel deben estar marcadas por diferencias de colores y texturas.
  5. Poner puntos de luz en los sitios claves para controlar los posibles deslumbramientos.
  6. Los escolares con discapacidad intelectual pueden precisar que la información se muestre con pictogramas que estén situados a una altura adecuada y poner especial atención en la seguridad.
  7. Utilizar suelos no deslizantes.
  8. Etc.

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Salva-escaleras con plataforma

Una vez que se tiene el centro educativo adaptado y el ACNEE puede acceder y desplazarse por él, independientemente de las ayudas técnicas que utilice, la cuestión esencial a resolver es cómo va a permanecer este alumnado en el comedor escolar. Por tanto, ahora se describe qué mobiliario y qué materiales se van a utilizar.

4.1. Mobiliario del comedor escolar

El mobiliario del comedor escolar podría considerarse como aquellos muebles que requiere un/una alumno/a para la alimentación en el contexto del comedor, considerando las características individuales propias del ACNEE (altura, control postural, etc.) de forma que permita su atención y concentración para realizar la actividad de la forma más autónoma posible y fomentando establecer relaciones sociales satisfactorias, tanto con los iguales como con los educadores.

Cuando se hace referencia al mobiliario del comedor se puede decir que por norma general la mayoría de los centros cuentan con:

  1. Mesas grandes con suficiente espacio para todo el alumnado.
  2. Sillas para todo el alumnado.
  3. Estanterías para la colocación de cubiertos, vasos, bandejas, jarras, servilletas, etc.
  4. Percheros y/o taquillas para que el alumnado guarde de manera ordenada sus pertenencias.
  5. Mesa caliente de distribución de comida.
  6. Nevera.
  7. Etc.

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Mobiliario del comedor escolar

Este mobiliario será susceptible a posibles adaptaciones dependiendo de las necesidades del ACNEE. Las adaptaciones más comunes serán las que se realicen en cuanto, a:

  1. Altura de perchas, armarios, estantes, etc.
  2. Distribuir físicamente los espacios de manera que se faciliten los desplazamientos y giros en la silla de ruedas, andadores, etc.
  3. Señalizar la puerta con un pictograma que haga alusión a la actividad del comedor.
  4. Ubicar estratégicamente al ACNEE cerca de la ventana para que tenga más luz natural en un sitio al que pueda acceder con facilidad, y que fomente la interacción y comunicación con el resto del alumnado.
  5. Que pueda salir a repetir algún plato y dirigirse a la mesa caliente de distribución de alimentos de forma autónoma.

Pero estas adaptaciones pueden no siempre resultar suficientes y se han de proponer otras de mayor envergadura para atender las necesidades de cada alumno/a en particular. No sirven modelos estándar. Hay que estudiar cada caso de forma individual y probar diferentes adaptaciones.

El diseño y la decisión de las adaptaciones a realizar serán interprofesionales. Conviene recabar toda la información posible por parte de las familias, del profesorado, y cómo no, del propio interesado, ya que quien más sabe sobre su discapacidad es quien la padece. Son los ACNEE quienes en muchas ocasiones informarán si están cómodos, seguros, etc.

Estos ajustes deben ser prácticos y sencillos ya que no siempre lo más sofisticado resulta más útil, sino que por el contrario puede empeorar la actitud que adopta la persona con discapacidad hacia el recurso y aumentar el coste del producto.

Algunas de las adaptaciones específicas que supone la modificación del diseño en cuanto al mobiliario del comedor podrían ser:

  1. La altura de la mesa para permitir el apoyo de los antebrazos sin realizar posturas forzadas de columna y hombros. Para ello se considerará:
    1. Si la persona es usuaria de silla de ruedas. La altura de la mesa y de la mesa caliente de distribución del alimento debe ser suficiente para aproximarse introduciendo los reposabrazos debajo.
    2. Si se puede proporcionar al alumnado mesas que tengan una superficie con un tapete antideslizante.
  2. Modificar el asiento, ya que este debe procurar los controles posturales necesarios. Para ello se podrá usar:
    1. Asiento con altura y profundidad que permitan apoyar correctamente los pies en el suelo.
    2. Reposabrazos adecuados para ayudar a mantener el equilibrio del tronco.
    3. Anchura y profundidad de asiento y respaldo que se corresponda con las características antropométricas de la persona.
  3. El tamaño de las puertas no solo ha de tener en cuenta la anchura que tiene el andador o silla de ruedas, sino la que se necesita para que el ACNEE y su educador puedan acceder al comedor al desplazarse.
  4. Manillas adecuadas para las puertas en vez de pomos si hay problemas de destreza.
  5. El color de las puertas y manillas contrastado con el fondo para una mayor percepción de estas.
  6. Que en las estanterías en vez de puertas se tengan cajones o gavetas para facilitar el alcance de los objetos del interior.
  7. Colocar barras o pasamanos a la altura y en la posición adecuada ayudará a que una persona con dificultad para los desplazamientos camine de forma más cómoda y segura.
  8. Usar carritos para el traslado de los utensilios y la comida de la mesa caliente de distribución de comida a la mesa del comedor.
  9. Bordes y esquinas de las superficies (muebles, asientos, estantes, etc.) redondeados, sin partes salientes o cortantes y fáciles de limpiar.
  10. Etc.

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Aplicación práctica

Fernando es un ACNEE con parálisis cerebral que acude al comedor escolar. Se detecta que tiene dificultad para el lavado de manos. En el dictamen de escolarización se recoge que tiene una parálisis cerebral de tipo espástica de intensidad severa con notables problemas manipulativos. No tiene otros trastornos asociados, por lo que la comprensión del entorno es buena. ¿Qué adaptaciones de mobiliario cree que necesita?

SOLUCIÓN

En primer lugar es necesario que el lavabo que utilice Fernando sea adecuado en cuanto a altura y profundidad considerando si tiene o no tiene pie.

  1. Cuando el aseo no pueda realizarse de pie por falta de equilibrio, fatiga, contraindicaciones, etc., el lavabo deberá tener suficiente altura libre inferior para facilitar el acercamiento frontal sentado. Los lavabos muy hondos dificultan el acercamiento.
  2. Existen también lavabos regulables en altura que permiten ajustarlos de forma individualizada a las dimensiones de los usuarios y a las de las personas con las que conviven.

En segundo lugar, en cuanto a la utilización del jabón, la dificultad principal está en la sujeción de la pastilla de jabón con las manos húmedas. Para facilitar esta tarea se podría utilizar:

  1. Dispensadores de jabón por infrarrojos que se accionan al situar las manos bajo la salida de jabón. Pueden ser portátiles o de pared.
  2. Dispensadores de jabón por palanca que también pueden ser portátiles o de pared.

Y para concluir la actividad de lavado de manos se tiene que considerar que el secado de manos requiere sujetar la toalla y efectuar el secado. Para facilitar esta acción se podría:

  1. Situar la toalla junto al lavabo.
  2. Utilizar secamanos eléctrico de aire con pulsador o automático.

4.2. Materiales del comedor escolar

La organización de los materiales en el comedor debe facilitar la autonomía e independencia de los niños y niñas, evitando en la medida de lo posible la dependencia de la persona adulta.

Se encontrarán en lugares accesibles para el ACNEE de manera que puedan ser percibidos y utilizados por ellos de forma autónoma, con eficacia, seguridad y comodidad.

Se colocarán ordenadamente y de forma que permita saber su ubicación y facilite su colocación posterior, favoreciendo la creación de hábitos de orden.

Para ello, el especialista de apoyo en el comedor deberá hacer una planificada y cuidada disposición de los materiales y así facilitar la utilización de los mismos teniendo en cuenta las siguientes premisas:

  1. La accesibilidad. Hay que colocar los materiales de forma que los/as niños/as puedan alcanzarlos, manejarlos o llevarlos a otro lugar. Se situarán más próximos aquellos que hayan de ser utilizados cotidianamente y se evitará que estén apilados.
  2. La visibilidad. La claridad visual y el fácil acceso permiten que el ACNEE retome y coloque de nuevo los materiales con la misma facilidad con que los tomó, de modo que permanezcan ordenados y disponible para su uso.
  3. Que estén bien clasificados para favorecer la autonomía. Los criterios que se adopten para clasificarlos han de ser de fácil comprensión por parte del ACNEE. Además esta clasificación facilita el control y el estado del material y mejora la ordenación y distribución de acciones.
  4. El etiquetado debe permitir que todo el material vuelva al lugar correspondiente después de su uso. Este se realizará mediante pictogramas que puedan ser aumentados en función de las necesidades visuales del ACNEE.
  5. La distribución en las distintas zonas de trabajo en que serán utilizados deberá permitir mayor autonomía a los ACNEE y un mejor aprovechamiento de los materiales con las mínimas interferencias.

En todos los ámbitos en los que se utilicen materiales de apoyo adaptados estos deben ser:

  1. Necesarios y eficaces.
  2. No deberán restringir las capacidades del usuario.
  3. No estarán contraindicados.
  4. Serán de fácil obtención con una buena relación calidad–precio.
  5. Serán de fácil manejo, bien por el usuario, bien por el especialista de apoyo (aunque en muchos casos sea necesario un profesional que le enseñe a utilizarlos adecuadamente).
  6. Por supuesto, el usuario debe participar en esta elección.

Por tanto, el educador o especialista de apoyo en el comedor deberá analizar, cuestionar y vigilar que los materiales y objetos que se le ofrezcan al modificaciones que sean aconsejables en cada momento.

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No se debe olvidar que los productos de apoyo comprenden una amplia variedad de material que va desde, por ejemplo, utensilios simples como el engrosamiento del mango de un cubierto, al más sofisticado sistema de acceso al ordenador, y por tanto, si uno de ellos no es el más adecuado para un tipo de necesidad concreta siempre habrá otro que se adecúe mejor a su casuística personal.

Las modificaciones o adaptaciones más comunes del material a utilizar por el ACNEE en el comedor son:

  1. En cuanto a platos y bandejas:
    1. Platos hondos que contienen mejor los alimentos.
    2. Colocar la comida siempre en la misma disposición y explicarla.
    3. Utilizar platos con rebordes o con bordes verticales.
    4. Calzaplatos para colocarlos debajo del plato e inclinarlo.
    5. Platos con el fondo inclinado.
    6. Tapetes antideslizantes bajo los platos.
  2. En cuanto a los cubiertos:
    1. Cubiertos que tengan función de cortar y pinchar (cuchillo basculante, tenedor y hoja circular cortante, tenedor con cuchillo, etc.).
    2. Tenedores en los que uno de sus bordes esté afilado.
    3. Cuchillos en forma de balancín con el mango perpendicular a la hoja.
    4. Cubiertos con el mango de diferente grosor, peso, forma, angulación, longitud, para diestros o zurdos, etc.
    5. De cucharas blandas de silicona, de plástico, metálicas recubiertas de material blando.
    6. De sujeción palmar (donde se introduce el mango del cubierto).
    7. Etc.
  3. En cuanto a los vasos:
    1. Existen vasos con una o dos asas.
    2. Con tapa con pico o con un agujero para pajitas.
    3. Con escotadura para la nariz o pico.
    4. Vasos antiderrame con pipeta que controla el flujo de líquido.
    5. Pajitas con sistemas antiretorno.
    6. Pajitas con doblez.

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Actividades

9. Dibuje un croquis del comedor escolar indicando las zonas que son susceptibles de modificaciones en cuanto a su mobiliario.

10. Busque información sobre qué se especifica en las leyes educativas acerca de los materiales y analícelas.

4.3. Características generales del mobiliario y materiales a utilizar en el comedor

Una vez conocidas las adaptaciones que se precisan en el comedor escolar en lo que respecta a mobiliario y materiales se deberá considerar cuáles han de ser sus características generales.

El mobiliario y los materiales del comedor son similares al de las aulas en cuanto a sus particularidades y se ha de tener en cuenta que:

  1. Deben ser adecuados a la medida de uso del ACNEE (de su estatura, de su manejo, su adaptabilidad, etc.).
  2. Tienen que estar hechos de materiales de buena calidad.
  3. No será conveniente recargar los espacios, ya que puede entorpecer la movilidad.
  4. Las superficies han de ser lavables y resistentes.
  5. Han de fomentar la autonomía reduciendo la presencia, ayuda y dirección del adulto.
  6. Será siempre preferible optar por aquellos muebles de tipo abierto de forma que los materiales que contengan sean fácilmente visibles y accesibles.
  7. Deben estar colocados estratégicamente por los distintos espacios de uso cotidiano para que se encuentre todo lo que les haga falta a su alcance.

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Nota

Los recursos materiales son el soporte requerido para facilitar una adecuada atención al ACNEE. Desde la Administración se impulsará la elaboración de materiales, dinamizando el empleo de los mismos así como del equipamiento técnico específico.

5. Análisis de programas de autonomía y hábitos en la alimentación

El modelo de programas se presenta como una forma de intervención eficaz para hacer efectivos dos de los principios de la acción educativa:

  1. Prevención o proactividad.
  2. Intervención social y educativa.

Un programa de intervención puede definirse como la acción colectiva del equipo interdisciplinar, junto con otros miembros de la comunidad educativa, para el diseño, implementación y evaluación de un plan destinado a la consecución de unos objetivos concretos en un medio socioeducativo en el que previamente se han determinado y priorizado las necesidades de intervención.

Entre las características generales de la intervención mediante programas educativos se puede resaltar que:

  1. Permite la consecución de objetivos globales de desarrollo del alumnado.
  2. Favorece la integración e intervención en las experiencias cotidianas de aprendizaje.
  3. Facilita la participación de todos los agentes educativos con funciones claramente delimitadas.
  4. Mejora la relación de la escuela con su entorno.
  5. Garantiza su calidad y adaptación a las verdaderas necesidades a partir de la evaluación de los efectos y resultados obtenidos.
  6. Atiende las necesidades de formación de los propios ejecutores de la intervención.

La intervención por programas es la actuación que mejores resultados puede proporcionar al sistema educativo, pues asume los principios de prevención, desarrollo e intervención social, y le da un carácter educativo y social a la vez que implica a diferentes agentes educativos y de la comunidad.

Las potencialidades del modelo de programas suponen:

  1. Un reconocimiento legal. Debe garantizar a todo el alumnado la igualdad de oportunidades y la inclusión educativa.
  2. Las acciones parten de un carácter preventivo y deben tener un carácter anticipatorio.
  3. Garantiza el trabajo en equipo en el que cada uno de los miembros implicados realiza aportaciones desde su cualificación y perspectiva profesional.
  4. El sentido cooperativo y complementario del programa, pues se implican y participan tutores/as, profesorado de apoyo, familias y alumnado (rebasando incluso el marco escolar).
  5. Su contribución a la dinamización pedagógica, a la innovación educativa y a la mejora de la calidad de la enseñanza.
  6. Facilita la especialización en un ámbito de trabajo como puede ser la autonomía personal y hábitos de alimentación, permitiendo así la respuesta más ajustada a las necesidades de los centros y sus componentes.

Estos programas han de venir recogidos en el Proyecto Educativo de Centro tal y como se establece en el artículo 121 de la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, dicho artículo queda modificado por la Ley Orgánica 3/2020 de 29 de diciembre, de la siguiente manera:

1. El proyecto educativo del centro recogerá los valores, los fines y las prioridades de actuación, incorporará la concreción de los currículos establecidos por la Administración educativa, que corresponde fijar y aprobar al Claustro, e impulsará y desarrollará los principios, objetivos y metodologías propios de un aprendizaje competencia orientado al ejercicio de una ciudadanía activa. Asimismo, incluirá un tratamiento transversal de la educación en valores, del desarrollo sostenible, de la igualdad entre mujeres y hombres, de la igualdad de trato y no discriminación y de la prevención de la violencia contra las niñas y las mujeres, del acoso y del ciberacoso escolar, así como la cultura de paz y los derechos humanos.

2. Dicho proyecto estará enmarcado en unas líneas estrategias y tendrá en cuenta las características del entorno social, económico, natural y cultural del alumnado del centro, así como las relaciones con agentes educativos, sociales, económicos y culturales del entorno. el proyecto recogerá, al menos, la forma de atención a la diversidad del alumnado, medidas relativas a la acción tutorial, los planes de convivencia y de lectura y deberá respetar los principios de no discriminación y de inclusión educativa como valores fundamentales, así como los principios y objetivos recogidos en esta Ley y en la Ley Orgánica 8/1985/, de 3 de julio, Reguladora del Derecho a la Educación, especificando medidas académicas que se adoptaran para favorecer y formar en igualdad particularmente de mujeres y hombres.

5.1. Diseño, ejecución y evaluación: protocolos de actuación

Con la implantación de un programa de autonomía y hábitos en la alimentación se espera una mejoría en las condiciones y la calidad de vida de los ACNEE involucrados en el programa.

De esta manera el proyecto o diseño del programa se transforma en una “apuesta”, una hipótesis de intervención en el comedor escolar y en el hogar para producir una mayor autonomía en el alumnado, que es el objetivo.

Se puede decir entonces que hay una lectura previa sobre la realidad y en base a ella se han de planificar unas actuaciones (diseño) que posteriormente se han de ejecutar y evaluar para ver el resultado que se espera, provocando así un cambio hacia una situación mejor.

Así y de manera más específica se mostrará cada una de esas fases.

Diseño

El diseño de un programa no deja de ser un proyecto en el que se expone el conjunto de actuaciones que se pretenden desarrollar, determinando unos objetivos que sirvan para dar respuesta a unas finalidades (necesidades identificadas) mediante procedimientos y actuaciones concretas, relacionando acciones de las que se responsabilicen determinados agentes implicados para las cuales se determinan criterios de evaluación.

Además, en el diseño del programa se plantearán los materiales específicos de apoyo para el desarrollo del mismo. Posteriormente se someterá a continua evaluación, obedeciendo a la necesidad de evitar un mal funcionamiento de su ejecución mediante actuaciones aisladas y puntuales.

Es por eso por lo que se dice que un programa debe ser un proceso dinámico abierto, continuo e interdisciplinar capaz de articular actuaciones, contenidos y metodologías en función de los objetivos y agentes implicados.

Concretamente, para la elaboración de un programa de autonomía y enseñanza de habilidades básicas (dentro de las cuales se podría incorporar la alimentación) hay que concretar varios aspectos derivados directamente de aquellos a los se dirige el programa y de los objetivos que se persiguen.

Por tanto se debe preguntar: ¿quiénes serán los destinatarios del programa? En este caso será un alumno o grupo de alumnos que tienen unas necesidades de atención mayores debido a sus limitaciones personales derivadas de una discapacidad o trastorno grave de conducta, y cuya dependencia y autonomía vendrá definida en los dictámenes de escolarización.

Desde el programa se pretenderá trabajar habilidades básicas para la alimentación y autonomía tratando de alcanzar las siguientes finalidades generales:

  1. Optimizar el mayor número de logros.
  2. Conseguir el máximo nivel de satisfacción y bienestar físico y psíquico.
  3. Alcanzar mayores posibilidades de integración social y participación activa y real en la comunidad.

Más específicamente, el programa de autonomía y hábitos en la alimentación puede pretender los siguientes objetivos:

  1. Ofrecer al alumnado las adaptaciones que necesita, tanto por sus necesidades específicas, como por las características y demandas del entorno del comedor y los patios donde se llevará a cabo el programa.
  2. Brindarle una atención individualizada adecuada a sus características psicoevolutivas y nivel de desarrollo madurativo.
  3. Asegurar la continuidad del programa atendiendo a la coherencia de actuación entre las distintas personas participantes en el proceso de la autonomía en cuanto a la alimentación (padres, madres y equipo interdisciplinar principalmente).
  4. Enseñar y desarrollar en el alumnado todos aquellos conocimientos, habilidades y actitudes que le van a permitir dar cumplida respuesta a las demandas que se le exigen en la sociedad en la que se encuentra inmerso y donde se desenvuelve durante las distintas etapas de su desarrollo.

Estos objetivos propuestos son muy generales y se deberán modificar y clasificar en función de las necesidades del ACNEE.

Una vez propuestas las necesidades de los destinatarios y los objetivos se deberán planificar cuáles serán las áreas de intervención y las pautas de actuación, siendo estas las que se precisen para que el ACNEE actúe de manera independiente en el entorno donde se desarrollará el programa: el comedor escolar y el patio. Además se tendrá en cuenta la planificación y utilización de los recursos personales y materiales.

Estas áreas están referidas a la autonomía personal, al área motriz (principalmente con la consecución de la marcha autónoma y en la manipulación de los cubiertos), a la autonomía social y al área cognitiva (para conseguir las habilidades y actitudes básicas).

La puesta en marcha de las actuaciones se llevará a cabo siguiendo unos protocolos planificados con anterioridad en el programa donde se especifican las fases a seguir, así como los responsables en cada una de estas fases.

Finalmente se diseñará una evaluación del programa en el que se valoren tanto los procesos como los resultados a través de los criterios de evaluación, y para los que se recogerá información a través de distintos instrumentos de evaluación como pueden ser los registros anecdóticos o la propia observación.

Con esta evaluación, además de valorar las actuaciones desarrolladas, se incluirán propuestas de mejora para, si es necesario, redefinir objetivos.

En resumen se puede decir que el diseño de un programa de autonomía y hábitos de alimentación, al igual que cualquier otro programa, debe prever como mínimo los siguientes puntos:

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Ejecución

Cuando se habla de la ejecución del programa se hace referencia a la pregunta: ¿cómo actuar? Para darle respuesta cabe decir que en los programas de autonomía y hábito en la alimentación, por su marcado carácter práctico, se empleará un método de enseñanza activo y participativo en el que en momentos determinados se proporcionará la ayuda necesaria utilizando la táctica del “desenvolvimiento marcha atrás”, ofreciendo cada vez menos apoyo al alumnado hasta que llegue a realizarlo de manera totalmente autónoma.

Habrá que regirse por el principio de flexibilidad puesto que será susceptible a cambios o modificaciones que retroalimenten el proceso cuando sea necesario.

El papel que ocupen los profesionales en el desarrollo de este tipo de programas y la coordinación que exista entre ellos debe ser fundamental y requerirá de aunar métodos, estrategias y recursos para que la ejecución del programa se lleve a cabo de manera adecuada y así poder alcanzar los objetivos propuestos.

Además, el equipo interdisciplinar (o los distintos profesionales) se deberá encargar de registrar los progresos o incidencias para fomentar la adquisición de hábitos de alimentación por parte del ACNEE y promover su autonomía en un ambiente de comprensión, tolerancia, constancia y motivación.

Es decir, la idea será la de evitar las respuestas negativas o reacciones represivas que provoquen en el alumnado sentimiento de vergüenza y que pueda conducir a un serio retroceso en su aprendizaje.

Evaluación

La evaluación no deja de ser una actividad valorativa a partir de criterios y referencias preespecificados en el diseño del programa y que se realiza a través de una recogida sistemática de información mediante los instrumentos de evaluación para la mejora continua de la enseñanza.

Es la última etapa del ciclo de diseño y de realización de un plan o programa que consiste en la emisión de un juicio tras la recogida de la información suficiente.

Se debe hacer notar el carácter de herramienta al servicio de los objetivos educativos exigiéndole a la evaluación que sea continua y formativa, razón por la que permite extraer el máximo potencial de mejora a esta función educativa.

Pero, ¿qué aspectos se deben tener en cuenta a la hora de evaluar un programa?

  1. ¿Qué se va a evaluar? Se deberán evaluar tanto los procesos como los resultados, es decir, el cómo se han llevado a cabo las actuaciones y el aprendizaje del alumnado.
  2. ¿Cuándo se va a evaluar? La evaluación es un proceso permanente por lo que se realizará:
    1. Evaluación inicial: donde se detectarán las necesidades y capacidades del ACNEE.
    2. Evaluación continua o procesual: donde se irán valorando si, tal y como se preveía, las actuaciones están siendo las adecuadas.
    3. Evaluación final: donde se analizará en profundidad todo el programa para luego realizar un informe o memoria que deberá adjuntarse en el documento de memoria final de curso del centro escolar.
  3. ¿Quiénes evaluarán? En la evaluación participarán todos los agentes implicados en el programa, es decir, todos los especialistas que formen parte del equipo interdisciplinar, los familiares e incluso el ACNEE, ya que ellos mismos han de ser los protagonistas principales de su propio aprendizaje.
  4. ¿Cómo se evaluará? Con procedimientos e instrumentos de recogida de información previamente diseñados en el programa.
  5. ¿Para qué se evaluará? Para conocer con certeza si se han cumplido los objetivos propuestos con la finalidad de proponer mejoras y reformular los objetivos si fuese necesario.

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Actividades

11. Indique qué significa que la evaluación sea una actividad valorativa.

Por último, pero tal vez lo más importante en tanto que representa una cuestión de principio, a la evaluación se le atribuyen tres características derivadas de todo lo anterior que le dan especial alcance. La evaluación es:

  1. Integral: la evaluación además de abarcar la realidad educativa entera lo debe hacer de modo armónico y al servicio de una gran meta común: la mejora de la persona.
  2. Integrada: es una consecuencia de la anterior. La evaluación es un elemento más, junto al resto, y por ello en necesaria armonía con todos los componentes y al servicio de esa finalidad. Nunca debe quedar relegada a una actividad añadida o extrínseca.
  3. Integradora: da a la evaluación una dimensión activa y dinámica, debiendo proporcionar respuestas de mejora en un sistema integralmente concebido y organizado.

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Protocolos de actuación

Un protocolo de actuación podría definirse como un conjunto de estándares, normas y formatos para el intercambio de datos que asegura la uniformidad de las distintas actuaciones de un programa.

Es una herramienta útil y consensuada por parte de todos los agentes implicados en un programa para poder llevar a cabo de forma coordinada y eficaz las actuaciones a desempeñar con los destinatarios.

La puesta en marcha de estrategias de colaboración, de distribución de roles, de reparto de funciones y otras a las que conduce el abordaje conjunto de una tarea constituyen un sistema interaccional de trabajo cooperativo.

Es por ello que podría decirse que a la hora de confeccionar o ejecutar los protocolos de actuación se han de cumplir los siguientes objetivos:

  1. Promover comunicaciones funcionales entre todos los participantes del programa.
  2. Abordar los problemas en términos sistémicos y globales.
  3. Debe dar respuestas claras con respecto a problemas e informar de posibles alternativas.
  4. Facilita la intervención de todos los agentes educativos con funciones claramente delimitadas.
  5. Garantiza la eficacia y armonía a las verdaderas necesidades a partir de la evaluación de los efectos y resultados obtenidos.
  6. No debe fomentar las conductas competitivas entre el equipo interdisciplinar.

5.2. Documentos de trabajo: registros

Realizar un apropiado seguimiento de esta labor ayuda a determinar lo posibles fallos o desajustes que se estén produciendo en las diferentes actuaciones sin tener que esperar a realizar una valoración final para su reformulación, por lo que se puede decir que da la oportunidad de corregir las acciones en el momento de forma procesual y continua.

Por otro lado, también muestra aquellos procesos que tienen lugar de forma adecuada y las posibles mejoras a las que pueden ser sometidos.

Como todo elemento del proceso de formación, el seguimiento formativo es susceptible de ser planificado, ya que no debe ser algo que se realice de forma arbitraria, sino que debe estar pensado y planteado desde antes que comience la acción de formación.

Resumiendo lo comentado anteriormente se puede decir que las finalidades del seguimiento formativo son:

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Manual del formador ocupacional, Ruíz Gil (2002)

El seguimiento del plan o programa de formación permitirá tener información actualizada sobre cómo se está ejecutando.

Son varias las técnicas que se pueden utilizar para llevar a cabo un adecuado seguimiento del programa recabando y analizando los datos necesarios para ello.

Los instrumentos variarán dependiendo del tipo de información que se necesite al respecto. Entre las técnicas e instrumentos se destacan:

  1. Cuestionarios de satisfacción
  2. Observación sistemática
  3. Reuniones formales e informales
  4. Formularios de evaluación
  5. Registros
  6. Etc.

Registros

Es una breve descripción de un suceso, incidente, hecho significativo o comportamiento del alumno observado que de algún modo sea importante para los fines de la evaluación.

Por lo tanto, es un conjunto de notas o diario que describe un aspecto importante y que contiene fundamentalmente datos de la situación observada, una descripción y un comentario.

En él se describe una corta historia de un incidente, intentando que esta sea lo más objetiva posible, sin usar términos que pudiesen evidenciar prejuicios.

Las características de estos registros son las siguientes:

  1. Consiste en narrar un suceso del alumno a evaluar. No está previamente preparado, sino que es eventual.
  2. Este registro se realiza en la mayoría de los casos de forma individual.
  3. Se basa en una observación no sistematizada: el especialista de apoyo educativo en el comedor no planifica ni el momento en el cual va a realizar la observación ni qué es lo que va a observar. El hecho registrado ocurre de forma espontánea, tomando en consideración el patrón conductual habitual en el escolar.
  4. Se realiza en cualquier momento durante la permanencia del niño en el comedor escolar.
  5. El observador cuenta las actuaciones de importancia para que la información registrada pueda ser utilizada de forma correcta.
  6. Pretende dar explicaciones sobre las causas por las que se produjo dicha conducta y relacionarla con otros hechos ocurridos en el momento previo. Estas explicaciones son de gran relevancia para la valoración del niño, pero se han de intentar anotar de manera aislada al hecho en sí, ya que de lo contrario podría distorsionar los hechos objetivos.
  7. No tiene relación con la planificación de actividades: en él se plantean observaciones no estructuradas, con lo que se convierte en un valioso instrumento cuando se trabaja un programa centrado en el ACNEE.
  8. Se utiliza básicamente (aunque no en forma exclusiva) para registrar conductas ya sean positivas o negativas.

Respecto a qué conceptos debe integrar un registro anecdótico, estos se describen a continuación:

  1. La fecha.
  2. La hora.
  3. Datos del alumno.
  4. Contexto de la observación.
  5. Descripción de lo observado.
  6. Interpretación de lo observado.

Otra de las cuestiones es cómo se debe realizar correctamente un registro anecdótico. Se recomienda:

  1. Ser lo más objetivo posible.
  2. Registrar únicamente aquellos episodios o comportamientos que resulten claves para la consecución de un correcto seguimiento.
  3. No dejar que transcurra mucho tiempo entre la incidencia y la redacción del registro, ya que pueden olvidarse detalles importantes.
  4. Debe ser comprensible, resumido y exacto.
  5. No sacar resultados apoyados en los datos de una sola observación. Se han de reunir varias anécdotas de un mismo alumno. Una anécdota aislada tiene muy poca trascendencia.

Finalmente, en cuanto a las ventajas de la utilización de los registros podrían enumerarse las siguientes:

  1. Permite el registro de comportamientos importantes que sirven para el análisis y comprensión de los logros o necesidades del ACNEE.
  2. Posibilita el seguimiento de conductas acerca del desarrollo de ciertos objetivos (muchos de los cuales no se prestan a una medición).
  3. El especialista de apoyo en el comedor escolar puede observar con detenimiento a un solo alumno y utilizar la información obtenida como complemento de los datos cuantitativos proporcionados por otros profesionales.
  4. Además de la descripción exhaustiva del ACNEE observado dentro de un contexto natural, el registro posibilita entender y orientar mejor.
  5. Las anécdotas proporcionadas por varios agentes educativos pueden ser recogidas y resumidas por el tutor/a y así podrán ser equiparadas con el fin de proyectar más luz a la resolución de los problemas que puedan surgir durante el programa.

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Aplicación práctica

Marta, como especialista de apoyo en el comedor, colabora en el programa de autonomía y hábitos de alimentación y una de sus principales funciones es la de preparar registros anecdóticos con el fin de realizar un posterior análisis de todos ellos y hacer el seguimiento del programa.

Para ello ha decidido confeccionar una plantilla que le sirva de modelo a la hora de recoger la información de la manera más objetiva posible. ¿Cómo cree que debería de ser esa plantilla? Elabore una como ejemplo.

SOLUCIÓN

Un ejemplo de plantilla podría ser el siguiente:

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6. Resumen

Cuando se habla de ACNEE se ha de tener en cuenta que siempre se trata de dar respuesta a una necesidad primordial. Esta no es otra que aspirar a tener una independencia y autonomía tal, que le permita alcanzar una integración social en el contexto en el que está inmerso.

Así pues, un programa de autonomía y hábitos de alimentación ha de basarse en dos premisas fundamentales:

  1. Potenciar al máximo las posibilidades del escolar facilitándole el desenvolvimiento en el contexto escolar y familiar.
  2. Posibilitar a largo plazo su desarrollo en el medio social e integración activa y participativa en el mismo.

Concretamente, antes de diseñar un programa se han de detectar las necesidades y capacidades personales del ACNEE en cuanto a desplazamientos, manipulación, comunicación, deglución, sedestación, control esfinterial, crisis convulsivas, alergias, medicación, etc.

En cuanto al diseño del programa se ha de procurar que al menos contenga los siguientes apartados:

  1. Identificación de necesidades y destinatarios.
  2. Objetivos.
  3. Áreas de actuación o contenidos.
  4. Pautas y protocolos de actuación o metodología.
  5. Recursos de apoyo al programa.
  6. Evaluación.

Todo ello en aras de que su posterior puesta en macha (ejecución) y evaluación sean un éxito y consigan producir el cambio mediante la estructuración de retroalimentaciones positivas entre todos los agentes que participan en el programa.

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Ejercicios de repaso y autoevaluación

1. Complete los espacios libres de la siguiente frase:

Según la LOE (Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre) se entiende por ACNEE (Alumnado con Necesidades Educativas ___________) a aquel que requiera, por un periodo de su ____________ o a lo largo de toda ella, determinados _________ y atenciones educativas específicas derivadas de una ___________ o de ____________ __________ __ ______________.

2. La enseñanza de habilidades básicas y hábitos de autonomía, dentro de las cuales estaría la alimentación, ¿qué objetivo persigue?

  1. Potenciar al máximo las posibilidades del sujeto y posibilitar su desarrollo en el medio.
  2. Facilitar a corto plazo el desenvolvimiento en el contexto escolar.
  3. La integración en el medio y la satisfacción personal.

3. Indique si las siguientes frases son verdaderas o falsas.

  1. Se debe prever cómo se llevará a cabo la interrelación y la comunicación del ACNEE con su grupo de iguales y con los monitores de apoyo que le asisten.
  2. A través del conocimiento de la manipulación que posee el ACNEE se podrá realizar la previsión del tipo de materiales que van a poder utilizar: bandejas, tenedor, cuchara, etc.
  3. El alumnado con dificultades en la deglución suele respirar por la nariz.
  4. Las capacidades cognitivas son aquellas que se refieren a lo relacionado con el procesamiento del lenguaje.

4. ¿Qué son las alergias alimentarias?

5. Relacione los siguientes elementos:

  1. Grado I.
  2. Grado II.
  3. Grado III.

6. Las rutinas permiten al ACNEE

  1. … prevenir y anticiparse a situaciones.
  2. … orientarse en el tiempo y en el espacio.
  3. … reforzar hábitos que generalmente acompañan a la actividad del comedor.
  4. Todas las opciones son correctas.

7. ¿Deben los profesionales de apoyo en el comedor asegurarse de que el ACNEE tome todo tipo de alimentos y que coman una cantidad suficiente de cada plato? ¿Cómo?

8. Los edificios y su equipamiento deben caracterizarse por la adaptabilidad y la flexibilidad. Defina estos dos conceptos.

9. ¿Cuál es el mobiliario del comedor escolar de referencia?

10. Termine la siguiente frase:

“Para el diseño y la toma de decisión de las adaptaciones a realizar conviene recabar toda la información posible por parte de…”.

11. El especialista de apoyo en el comedor deberá hacer una planificada y cuidada disposición de los materiales y así facilitar la utilización de los mismos teniendo en cuenta

  1. … accesibilidad, flexibilidad, etiquetado, clasificación y distribución.
  2. … adaptabilidad y etiquetado.
  3. … etiquetado, distribución y clasificación.
  4. … accesibilidad, visibilidad, clasificación, etiquetado y distribución.

12. Escriba al menos cinco materiales adaptados que se suelen utilizar en el comedor por el ACNEE.

13. ¿Qué es un programa de intervención?

14. ¿Qué puntos debe prever como mínimo un programa de autonomía y hábitos en la alimentación?

15. Complete los espacios libres de la siguiente frase:

“Un protocolo de actuación podría definirse como un __________________ __ _______________, ________ _ _____________ para el intercambio de datos que asegura la uniformidad de las distintas actuaciones de un ________________”.