Capítulo 1

Procesos y fases de los conflictos en el ámbito comunitario

Contenido

1. Introducción

2. Caracterización de los conflictos en el entramado comunitario

3. Definición y tipos de conflictos habituales

4. Resumen

1. Introducción

En las sociedades actuales, se producen unos cambios, a veces a gran velocidad, que implican una inestabilidad de tal manera que afectan a todos sus habitantes. El área asociativa de los municipios constituye un papel clave en la construcción de la cultura de paz y no violencia, por su conocimiento de los conflictos cotidianos y la repercusión social que estos producen.

Por tanto, esta inestabilidad puede en muchos casos ser el origen de los conflictos en el ámbito comunitario, por lo que la intervención social debe ser integral, es decir, que actúe sobre todas las personas que lo componen, y su finalidad debe ser la de dar respuesta a los problemas vecinales y comunales que actualmente representan el día a día de la ciudadanía.

La gestión de estos conflictos comunitarios debe tener como finalidad que los miembros que la componen vivan en un ambiente de paz y justicia social, garantizando una respuesta institucional a este tipo de conflictos e involucrando a aquellos miembros y/o instituciones que lo pueden hacer posible, es decir, a los agentes comunitarios que intervienen en ella. Para ello, existen diversos programas, entre los que se encuentra la mediación comunitaria, enfocados al fomento de la paz y estableciendo como ámbitos de aplicación la convivencia ciudadana, las libertades individuales y colectivas y la promoción del diálogo, así como la solución pacífica de los conflictos. Estos proyectos comunitarios se han propuesto como meta implementar un modelo pacífico basado en resolver a través del diálogo y el acuerdo los conflictos entre las personas implicadas y a la vez tener un rol esencial en cuanto a la prevención y al abordaje de futuros conflictos.

2. Caracterización de los conflictos en el entramado comunitario

El conflicto puede ser considerado como uno de los temas fundamentales en las ciencias sociales, la importancia de este se encuentra precisamente en su potencial desestabilizador o transformador, ya que el conflicto está íntimamente relacionado con el cambio.

A menudo la idea de conflicto se asocia al desorden o caos en contraposición al orden, y la visión ideal de las comunidades sociales se asocian al orden social, como consecuencia se tiene la idea generalizada de que cuando se presenta un conflicto se quiebra el orden social, emergiendo situaciones de crisis.

Se entiende, por tanto, que el orden social es el conjunto de procesos que estructuran y hacen estable una comunidad y por otro lado, se entenderá el desorden como aquellos procesos que desestructuran y desestabilizan las comunidades.

Estos son los principales motivos por los que históricamente el conflicto ha tenido un sentido negativo. En la actualidad, existen otras teorías que ven el conflicto como una posibilidad de cambio, permitiendo resolver situaciones de forma más innovadora, entiendo el conflicto como elemento de transformación social.

En las sociedades, las personas, tanto desde su individualidad como en grupo, tienen el objetivo de satisfacer sus propios intereses, el problema surge cuando estos intereses quedan satisfechos en favor de una de las partes, quedando afectados los intereses de la otra, produciéndose así unos desequilibrios que hay que solventar a fin de lograr una situación que sea estable y duradera en el tiempo.

Con objeto de poder definirlo, es necesario tener en cuenta que el conflicto ha de ser reconocido por las partes, para que estas puedan definir sus intereses, así como poder involucrarse en la búsqueda de opciones que puedan satisfacer sus necesidades.

Según Marinés Suárez: “El conflicto surge cuando existe una diferencia entre dos partes, pero ha de ser una diferencia acompañada de hostilidad”.

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Como se ha visto anteriormente, la idea del conflicto está directamente relacionada con la existencia de intereses opuestos y el conflicto comunitario concretamente se produce entre personas o grupos con distintas pertenencias a culturas, grupos, etc., y en los que dicha pertenencia juega un papel relevante en la percepción y valoración del otro. Por tanto, es necesario entender el conflicto comunitario partiendo del conocimiento del tipo de situación social en la que se produce.

Roger Fisher (28 mayo 1922-25 agosto 2012, Profesor Emérito de la Universidad de Harvard, especialista en negociación de conflictos) sostiene que:

Un elemento clave para comprender por qué suceden las cosas es saber por qué las personas toman decisiones del modo que lo hacen. De ahí la importancia de analizar un conflicto, pues de lo contrario no se dispone de información necesaria para su solución. Para ello, debemos conocer a los protagonistas del conflicto, su cultura para entenderlos mejor, los paradigmas que prevalecen, las causas que lo originaron, los problemas de comunicación subyacentes, las emociones, las percepciones de las partes, los valores y principios, las formas de reaccionar, la influencia de los factores externos, y sobre todo, las posiciones, intereses y necesidades de los protagonistas.

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Para llegar al acuerdo, cada parte del conflicto debe legitimar a la otra parte. Este cambio se produce cuando ambas aprenden a ponerse en la piel del otro (© Fotografía: Kev-shine, vía web-CC BY 2.0)

En un conflicto, las partes se sienten legitimadas cuando llegan a comprender la situación y las metas de cada uno. De la misma forma, se sienten revalorizadas cuando pueden ver las distintas alternativas que se les presentan y la capacidad que tienen en la toma de decisiones. Por tanto, el hecho de que cada parte pueda reconocer a la otra parte es un proceso necesario para obtener una resolución de los conflictos que vaya más allá del simple acuerdo entre ambas. Este es el cambio que se produce en cada parte cuando deja de pensar exclusivamente en ella misma para darle importancia a los intereses y necesidades de la otra parte.

2.1. Partes del conflicto

Para poder detectar un conflicto, hay que apoyarse en una herramienta como es la observación. Esta observación se puede realizar de dos maneras, de forma directa, que permite al investigador ponerse en contacto personalmente con el hecho o fenómeno materia de investigación, o de forma indirecta, que consiste en que el investigador conoce los datos que le interesan a través de observaciones realizadas anteriormente por otra/s persona/s a través de libros, grabaciones, informes, revistas, etc.

Para observar los acontecimientos que se dan en el conflicto, es necesario detectar las causas que se pueden originar del mismo y que están ligadas a tres factores según S. Robbins.

Este los clasifica como sigue:

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Jares (2004) entiende por conflicto: “aquel proceso de incompatibilidad entre personas, grupos o estructuras sociales, mediante el cual se afirman o perciben (diferencia entre conflicto real y falso conflicto) intereses, valores y/o aspiraciones contrarias. Dos o más personas o grupos perciben o tienen posiciones, valores, intereses, aspiraciones, necesidades o deseos contrapuestos”.

Siguiendo el estudio anterior del conflicto, este clasifica las partes del mismo de la siguiente manera, destacando que todos los conflictos tienen unos componentes que se agrupan en torno a tres elementos: Persona- Proceso- Problema, que están interrelacionados entre sí y que sirven de guía para su comprensión. Esto es lo que se conoce por las tres P.

Estos aspectos del conflicto han de ser estudiados teniendo en cuenta a las personas participantes, en cómo abordar el proceso de comunicación que se ha establecido entre ellas y, por último, el conflicto que surge en este proceso en el que interactúan.

A continuación, se van a analizar las características de estos componentes del conflicto.

Personas: características relativas a la persona como protagonista del conflicto

Definir quiénes son:

  1. Distinguir cuáles son los protagonistas principales de los secundarios.
  2. El poder está en el conflicto.
  3. Las percepciones del problema.
  4. Las emociones y los sentimientos.
  5. Las posiciones de cada parte.
  6. Los intereses y las necesidades.
  7. Los valores y los principios.

Definir el poder de los distintos actores que intervienen:

  1. Conocer el poder de cada persona o actor: social, económico, moral, de información, de recursos.
  2. Analizar el grado de poder de cada parte: los desequilibrios, la dependencia o interdependencia de las partes que pertenecen al conflicto.

Proceso: características relativas al proceso

Descripción del desarrollo del proceso:

  1. El conflicto es algo dinámico y pasa por distintas etapas, unas más activas y otras más tranquilas.
  2. La comunicación entre las partes suele ser la causa principal del conflicto: falta de comunicación, alianzas, coaliciones, distorsiones, generalizaciones, etc.
  3. Estilos de enfrentamiento al conflicto: creación de un mapa del conflicto con la finalidad de poder organizar la posterior planificación de las estrategias.

Problema: características relativas al problema

Tipos de conflicto:

  1. Conflictos de relación/comunicación/percepción (por ejemplo malos entendidos).
  2. Conflictos de intereses/necesidades (por ejemplo distintos roles).
  3. Conflictos por preferencias, valores, creencias (por ejemplo religión, cultura, etc.).

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Los elementos del conflicto (personas, proceso, problema) están interrelacionados.

En el ámbito comunitario, las situaciones que se presentan pueden ser tan variadas que cada persona, dentro de la misma comunidad y según sus distintas identidades y experiencias, interpreta la realidad de una determinada forma. Es por lo que, en ocasiones, no es sencillo determinar en qué situaciones conflictivas el conflicto comunitario es significativo. De este hecho, hay que destacar que existen distintas variables que interactúan, por lo que es necesario realizar un análisis de las distintas causas del conflicto.

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Ejemplo

Conflictos de origen interpersonal, como son los enfrentamientos entre diferentes roles de vecinos; un problema de comunicación (malos entendidos); un conflicto debido a la confrontación de intereses individuales o un conflicto que surge en la convivencia entre sistemas de creencias que se perciben como incompatibles (diferentes creencias religiosas).

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Aplicación práctica

Eva colabora en la asociación de vecinos de su barrio, en la que tiene la responsabilidad de un taller de danza. El grupo de alumnos tiene muy buen ambiente, excepto Ana y Leo, que llevan una relación que está poniendo en peligro el buen ritmo del grupo que ha existido hasta el momento.

Desde que Ana entrara en el grupo hace dos meses, a Leo se le ha notado que no le cae bien desde el primer día que la conoció. En algunas ocasiones, han tenido que colaborar como pareja de baile. Ana es dominicana.

En alguna ocasión, Leo ha hecho comentarios despectivos hacia las personas de color.

Se va a realizar un concurso de baile de salsa y ellos son los mejores bailarines, por lo que van a tener que ensayar mucho juntos, para que todo salga bien.

El concurso será en dos semanas y los dos están muy cualificados e involucrados en los preparativos, pero antes se debe resolver el conflicto que existe entre ellos, para que el resultado del baile sea un éxito.

Analice las tres P que componen el conflicto:

  1. Personas participantes.
  2. Problema. Causa del problema existente.
  3. Proceso. Escalada del conflicto. Fase en la que se encuentran.

SOLUCIÓN

Personas participantes. Ana, Leo y profesora de baile.

Cada parte tiene una percepción distinta del problema, por tanto cada una dará una versión distinta de los hechos.

Problema. Existe un conflicto estructural, porque la profesora de baile toma la decisión de quién va a bailar. En segundo lugar, existe un conflicto de prejuicio hacia las personas de otros países, que debe ser trabajado con Leo, para seguir avanzando hacia una desescalada del conflicto.

Proceso. Parece que el conflicto puede ser elevado de Leo hacia Ana, por lo que la persona responsable debe trabajar conjuntamente con ambos para que ello no ocurra (organizar el baile, coordinar, etc.).

Para entender un conflicto, las personas deben conocer en primer lugar quiénes están implicados en él, qué nivel de implicación mantienen y el papel que juega cada una de ellas, así como la interdependencia que existe entre ellas. Esto permite detectar cuál es la magnitud del problema.

La estructura de los conflictos es relativamente simple y está conformada por tres elementos fundamentales: personas, procesos y problemas. Cualquiera de ellos por sí solo, o en su combinación, pueden dar causa a un conflicto y en cualquier caso siempre se encontrarán en el desarrollo y resultado de una disputa.

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Dichos elementos se relacionan en una serie de fases generales que se pueden establecer para los conflictos, estas fases se clasifican como las siguientes:

  1. Fase 1. Actitudes y creencias: el ciclo de todo conflicto empieza en cada persona, debido a las actitudes, juicios previos y creencias que tiene cada individuo, y que se vuelca en la idea que se tiene sobre el propio conflicto. Dichas actitudes y creencias surgen a partir de una gran diversidad de fuentes, desde mensajes recibidos en la infancia sobre conflictos, a modelos de conductas de los progenitores o cuidadores en los conflictos.
  2. Fase 2. Conflicto: se trata del momento en el que sucede el conflicto, elemento que es inherente y consustancial a todas las relaciones sociales, es un elemento universal.
  3. Fase 3. Respuesta ante el conflicto: momento en el que cada persona actúa, se trata de la reacción que cada uno tiene al conflicto, dicha respuesta está determinada por el sistema de creencias, valores y actitudes que se tienen hacia el conflicto, de esta manera las reacciones pueden ser por ejemplo: gritar, intentar dialogar, o simplemente abandonar la situación de conflicto.
  4. Fase 4. Resultado: la respuesta que cada persona da ante el conflicto lleva siempre al mismo resultado, la consecuencia.

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De este ciclo de conflicto se puede desprender el hecho de que en la mayoría de la ocasiones se refuercen los patrones de conducta, ya que el sistema de creencias y actitudes llevarán siempre al mismo resultado o consecuencias. Por lo que será necesario modificar los propios sistemas de creencias para evitar la perpetuación de los mismos resultados en los conflictos.

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Nota

Tal y como menciona Howard Ross: “La cultura del conflicto abarca aquello por lo que la gente lucha dentro de una sociedad, los rivales contra quienes luchan y los resultados de las contiendas”.

2.2. Análisis de las distintas causas del conflicto

En el análisis de las causas relativas al conflicto, es necesario tener en cuenta unos elementos importantes que caracterizan a las personas, al proceso y al problema y que se desarrollan a continuación.

Elementos relativos a la persona como protagonista del conflicto

En primer lugar, es necesario distinguir entre los protagonistas principales y los secundarios:

  1. Los intereses: son los beneficios que se desean obtener a través del conflicto y que, normalmente, aparecen ocultos bajo las posiciones.
  2. Las necesidades: para resolver el conflicto, las necesidades de sus protagonistas deberán quedar resueltas en su totalidad o parte de ellas de forma satisfactoria. El hecho de que las necesidades no queden satisfechas puede ocasionar frustración, ira, miedo, etc.
  3. La percepción: para intentar comprender el conflicto, es fundamental entender cuál es la percepción que cada persona tiene de este y de las otras partes implicadas y, en ocasiones, la que tiene de sí mismo o de sí misma.
  4. Los valores: es importante que las personas en conflicto conozcan los valores que están en disputa, para así conseguir un acercamiento entre ellas.
  5. El pensamiento dialéctico: este se apoya en una conversación basada en la lógica en la que se muestran los problemas y las contradicciones y puede ser una herramienta muy válida para la compresión de estos, ayudando a ver el conflicto de forma útil, ya que permite el cambio hacia una nueva situación.
  6. Las actitudes: la actitud que se suele observar en un conflicto comporta el binomio ganar-perder. Por tanto, el objetivo es que las partes mantengan una actitud ante el conflicto de consenso, es decir, que les permita obtener resultados satisfactorios para ambas basadas en el binomio ganar-ganar.

Elementos relativos al proceso

El proceso hace referencia a la manera en la que el conflicto se desarrolla y las personas tratan de resolverlo, ya sea de forma negativa o positiva. Pero, fundamentalmente, se refiere al modo en que se toman las decisiones y los sentimientos sobre ello. Con frecuencia, en la dinámica del conflicto se da lo que se conoce como conflicto latente y que, en ocasiones, surge por un hecho determinado que hace que se vea con claridad. Por tanto, es necesario tener en cuenta las cuestiones que pueden estar presentes en el conflicto relativas a la relación y a la comunicación entre las partes que van a condicionar de manera determinante la posible transformación positiva de un conflicto. En todo proceso, es necesario analizar los factores que se analizan a continuación.

La comunicación

La forma en la que se comunican las partes es también un dato muy importante en el proceso del conflicto. Si el conflicto no es entre iguales, probablemente los códigos utilizados alejen y dificulten la resolución de un conflicto (por ejemplo: relación ente profesores y alumnos).

A menudo, en la comunicación se producen, además, una serie de distorsiones producto de la mala información, de rumores, de estereotipos, de prejuicios, que hay que tener en cuenta y que en el entorno comunitario pueden dificultar la resolución de conflictos.

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Nota

La comunicación proactiva se establece como aquella forma de comunicación que es efectiva para gestionar los conflictos potenciales en las organizaciones y/o comunidades.

Cuando se habla de comunicación proactiva se hace referencia a aquel tipo de comunicación donde la persona toma activamente el control y decide qué hacer en cada momento anticipándose a los acontecimientos.

El comportamiento

Cada persona responde de manera distinta ante el conflicto. De ello se pueden destacar cinco maneras distintas de reaccionar ante él:

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Competir

  1. Ocurre cuando se es asertivo pero no hay cooperación.
  2. Cada quien busca su propio interés a expensas del otro.
  3. Se utiliza cualquier forma de poder para ganar ante la otra parte.
  4. Es apropiado cuando se necesita una acción muy rápida, por ejemplo en una emergencia.

Acomodarse

  1. Se tiene disposición a la cooperación, pero no se hace de forma asertiva.
  2. Se tiene disposición a querer satisfacer las necesidades de la otra parte, a pesar de que las suyas propias no queden satisfechas.
  3. Se adapta a la perspectiva de los demás e incluso puede obedecer a ciertas órdenes en contra de su propia voluntad.

Evitar

  1. Se deja de ser asertivo, es decir, que se no afrontan los problemas de forma positiva.
  2. Las personas pertenecientes al conflicto se apoyan en las aspiraciones de los demás.
  3. No se reconoce la existencia del conflicto, posponiéndolo para un mejor momento, o simplemente se esconde.

Convenir

  1. Se trata de buscar un punto intermedio que las satisfaga de forma equitativa ante el conflicto.
  2. Se utiliza esta estrategia cuando el objetivo es fortalecer o construir una nueva relación y se está dispuesto a hacer un sacrificio para ello.
  3. Es apropiado cuando se necesita una solución rápida.

Mediar/cooperar

  1. Se desea encontrar el mejor resultado posible.
  2. Se trata de profundizar en el conflicto para encontrar las alternativas necesarias para satisfacer sus necesidades.
  3. El conflicto es visto de forma natural.
  4. Se trata de conseguir un resultado que mantenga la relación en el tiempo.
  5. Este método es utilizado cuando las relaciones interpersonales son importantes.

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La mediación como forma alternativa para resolver los conflictos.

Elementos relativos al problema

Es muy importante buscar las distintas formas de poder objetivar los datos que cada parte aporta a la hora de definir el conflicto.

Por un lado, es importante diferenciar la relación entre las partes y, por otro, la propia realidad del conflicto.

De hecho, en muchos casos, la relación suele tener más peso que cualquier otro resultado planteado sobre un problema concreto.

Existen alternativas de resolución de conflictos que no encuentran soluciones al problema, pero sí consiguen que se restablezca la relación entre las partes, como puede ser la mediación, que se desarrollará más adelante.

Por otra parte, existen situaciones en que la relación entre las partes suele ser la propia realidad del conflicto, encontrando en ella la verdadera causa del mismo.

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Sabía que

Cuando la solución del conflicto se alcanza mediante la dominación o cuando se fuerza la solución entre adversarios con igual poder, esta solución probablemente dure poco tiempo y el conflicto reaparecerá en el futuro.

Por el contrario, el compromiso y la colaboración son los métodos más positivos y los que probablemente lleven a soluciones duraderas en el tiempo, manteniendo la capacidad de las partes para mantener su relación.

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Nota

El conflicto tiene unas funciones propias en la dinámica social.

En base a esta afirmación, se puede deducir que la cultura del conflicto tiene que ver con las normas, conductas, hábitos e instituciones específicas de cada sociedad, relacionadas con la conflictividad. El impacto de la cultura del conflicto aparece a muchos niveles.

Así pues, se concluye manifestando que, en cada cultura y en términos generales, los individuos tienen puntos muy semejantes en cuanto a la interpretación del mundo social, al modo en que reaccionan ante determinadas situaciones y de cómo la elaboración por los actores de la realidad social proporciona una base para la acción siguiente.

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Actividades

1. De su propio entorno, elija dos personas. Una que se lleve bien con usted (relación positiva) y otra ”no tanto” (relación negativa). Después de un breve análisis, describa las percepciones que tiene sobre cada una de ellas e intente evaluar si alguna de sus percepciones puede estar distorsionada, es decir, que se aleje de la realidad por alguna causa, como falta de información, un prejuicio, etc.

2. Describa cuáles son los métodos que permiten a las partes mantener una relación más duradera en el tiempo.

3. Definición y tipos de conflictos habituales

A continuación, se describe qué se entiende por conflicto y la tipología más habitual de los conflictos que pueden darse en el ámbito comunitario.

3.1. Definición

Muchas son las definiciones que se han dado a lo largo de la historia del conflicto, en la mayoría de las ocasiones estas provienen desde el campo de la sociología y filosofía, atendiendo al concepto de conflicto social y en ocasiones a la lucha de clases.

Así, algunas definiciones de conflicto son:

  1. Lorenzo (2001). El conflicto social es un proceso de interacción contenciosa entre actores sociales que comparten orientaciones cognitivas, movilizados con diversos grados de organización y que actúan colectivamente de acuerdo con expectativas de mejora, defensa de la situación preexistente o proponiendo un contraproyecto.
  2. Silva García (1996). Una situación de divergencia social, es decir, una relación contradictoria (disputa) que sostienen personas o grupos sociales separados al poseer intereses y/o valores diferentes.
  3. Dahrendorf (1993) y Vold (1967). El conflicto surgirá como manifestación cuando se intente desplazar a otro grupo social de la posesión o el acceso a bienes, recursos, derechos, valores o posiciones escasas o apreciadas.

Siguiendo las líneas teóricas del conflicto se puede llegar a las conclusiones de Cascón (2010), quien bajo una visión sociológica del conflicto plantea tres perspectivas sobre cómo se puede asumir la idea de conflicto:

  1. La primera línea parte desde el estructuralismo que entiende el conflicto como consecuencia directa del sistema y la estructura social.
  2. La segunda línea se plantea desde la perspectiva funcionalista, donde se plantea el conflicto como consecuencia de la búsqueda del equilibrio social.
  3. La tercera línea se basa en las teorías del conflicto planteadas por Karl Marx, que se considera el ideólogo de las teorías del conflicto, que giran en torno a la lucha de clases sociales por la posición en los distintos niveles socioeconómicos.

Tras esta breve introducción histórica sobre el recorrido de las definiciones sobre los diferentes planteamientos de la teoría del conflicto a nivel social, se pondrá el centro en una caracterización del conflicto a nivel comunitario, para lo que se seguirán las premisas de Lorenzo 2001, que enmarca los conflictos comunitarios como:

“Movimientos protagonizados por grupos no necesariamente homogéneos desde un punto de vista socioeconómico, dado que a menudo suponen cortes verticales en la estructura social. Lo que les une es su pertenencia a un determinado colectivo (una comunidad local, regional o nacional; una religión, una ideología política, una raza, etc.) con la suficiente cohesión como para actuar colectivamente y que suelen mostrarse capaces de generar marcos subculturales muy específicos, con frecuencia agresivos.”

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Nota

El conflicto comunitario, siempre denota una interacción social, en tanto que las posiciones o sentimientos conllevan a actuar. Esta inclinación no conduce obligatoriamente al conflicto, sino que este depende del nivel y tipo de legitimidad que poseen el poder y los sistemas establecidos.

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“Los conflictos implican luchas entre dos o más personas acerca de los valores, la competencia por el estatus y los recursos“ (Lewis Coser: Continuities in the study of Social Conflict, 1967).

Tipos de conflictos

Al igual que en el caso de las definiciones de conflicto, muchos son los diferentes autores que han establecido una tipología para los mismos, por ejemplo el caso de Alzate Sáez De Heredia et al., (2013), que proponen la existencia de 4 tipos de conflictos que se interrelacionan:

  1. Conflicto personal: agrupa aquellos tipos de conflicto que se producen por problemas concretos, que ocurren entre individuos o grupos, pero que no son la causa del conflicto.
  2. Conflicto relacional: son aquellos tipos de conflictos que suceden por patrones de interacción y por la percepción y/o sentimientos que se tiene hacia los demás.
  3. Conflicto estructural: conflictos cuyas causas son debidas a los procedimientos y reglas de la organización social particular que la cultura refleja.
  4. Conflictos del sistema social o cultural: se trata de conflictos que van más allá de las relaciones personales y/ o sociales, ya que están basados en sistemas que están institucionalizados.

A continuación, a modo de resumen, se establecen diversas tipologías de conflictos en base a sus causas, sus categorías principales, sus principales actores o sus motivaciones.

En función de las causas, se establece la siguiente tipología de conflictos:

  1. Conflictos intrapersonales. Surgen cuando las necesidades de la persona/organización chocan con las de otra y se reflejan en el conflicto de intereses y/o de roles entre las partes.
  2. Conflictos intragrupales. Son los conflictos que surgen entre las personas que pertenecen al mismo grupo.
  3. Conflictos interpersonales. Son los conflictos que surgen entre dos personas, afectando profundamente a sus emociones.
  4. Conflictos intergrupales. Son los conflictos que surgen entre dos o más grupos de personas, causando graves problemas entre ellos.

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Como categorías principales del conflicto:

  1. Conflicto de rol múltiple. Surge cuando el líder de un grupo tiene que elegir entre la lealtad de su grupo y otro exterior.
  2. Escasos recursos. La cantidad limitada de recursos personales y materiales provoca la aparición de conflictos dentro de una organización.
  3. Valores y prioridades diferentes. La importancia relativa a los valores básicos modifica o altera las posiciones de las personas pertenecientes a un mismo grupo.
  4. Diferencias de percepción de un problema. Los distintos puntos de vista sobre un mismo problema conllevan la aparición del conflicto en muchas ocasiones.

Otra clasificación puede ser:

  1. Los conflictos colectivos. Se producen cuando aparece por un lado un elemento subjetivo (la persona o el grupo se ven afectados por el conflicto) y un elemento objetivo (es el interés que se ejerce a través del grupo).
  2. Los conflictos plurales. Tienen un elemento subjetivo, pero que afecta de forma individualizada.
  3. El conflicto individual. Es el que afecta a un interés de carácter individual en una determinada relación jurídica.

Dependiendo de cómo sean los motivos del conflicto, se clasifican de la siguiente forma:

  1. Conflictos de relación/percepción/comunicación. Son el resultado de unas fuertes emociones negativas o estereotipos y percepciones erróneas. La comunicación se fundamenta en situaciones a veces irreales y por un comportamiento negativo.
  2. Conflictos de intereses/necesidades. Son provocados por el carácter competitivo, percibido.
  3. Conflictos por preferencias, valores o creencias. Cuando estos ocurren, no necesariamente aparece el conflicto entre las partes. Este surge cuando se intenta imponer a la fuerza, sin admitir o respetar la existencia de valores distintos.

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Ejemplo

Puede ser el conflicto vecinal generado en un determinado barrio por la apertura de un Centro de Rehabilitación de Adicciones, el origen del conflicto estaría situado en la creencia interiorizada o estereotipo de los vecinos sobre la imagen de atracción al barrio de personas con drogodependencia, vinculados a estereotipos de producción de suciedad, inseguridad ciudadana, etc.

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Actividades

3. Describa la tipología de los conflictos, según las causas que los originan.

4. ¿Cómo se llaman los conflictos provocados por intensas emociones?

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Nota

La cultura del conflicto tiene que ver con las normas, conductas, hábitos e instituciones específicas de cada sociedad, relacionadas con la conflictividad. El impacto de la cultura del conflicto aparece a muchos niveles.

3.2. Identificación de los componentes del conflicto en el ámbito comunitario

Partiendo de que el conflicto es inevitable como se ha visto anteriormente, hay que destacar que: “El conflicto no es un peligro, sino una oportunidad, porque contiene una función social positiva que permite el desarrollo de los intercambios” (Amorós, 2000).

Por tanto, el conflicto debe ser entendido como el resultado de un conjunto de posiciones opuestas que, en un momento específico, entran en contacto entre sí, dando lugar a posturas de lucha por alcanzar unos intereses que pueden estar o no contrapuestos. En el ámbito de la comunidad, los conflictos sirven para avanzar hacia el cambio, permitiendo al mismo tiempo el avance y la evolución de la misma. En la mediación comunitaria, el conflicto debe tener su base en la legitimación y reconocimiento de las distintas opciones que tienen las partes a poder actuar y decidir desde el respeto de la legalidad y libertad de los demás.

Características del conflicto comunitario

En la comunidad, las personas se encuentran en un ambiente determinado y, por tanto, utilizan unos mecanismos de adaptación e integración. “La adaptación se refiere al acondicionamiento que hace el ser humano a su entorno, mientras que la integración, es lo contrario, el ser humano modifica el ambiente en función de sus necesidades”.

En la comunidad, se pueden encontrar estas características del conflicto:

Desigualdad de poder implica

- Actitudes dominantes y/o de discriminación.

- Dominio de la comunicación impuesto por la parte dominante.

Estereotipos y/o prejuicios hacia otras culturas

- Actitudes de discriminación y/o racismo aprendidas por la influencia mayor o menor de los factores de socialización (familia, amigos, sociedad, medios de comunicación).

Cohabitación de diferentes culturas en un mismo espacio y dificultades en los procesos de comunicación debido a

- Al uso de distintas lenguas.

- A las discrepancias respecto a creencias, valores, tradiciones, etc.

Sensación de amenaza de las personas pertenecientes a otras culturas

- La convivencia de grupos con necesidades comunes, unida al desconocimiento mutuo, puede hacer que se cree una relación de competencia por satisfacer esas necesidades, más que de cooperación entre iguales.

Ejemplos de conflictos en el ámbito comunitario

Para una mayor comprensión de los conflictos comunitarios, se pueden seguir estos ejemplos:

Relación individuo-individuo

- Una persona no habla con otra por el color de su piel.

- Unos vecinos se atribuyen características negativas por su pertenencia cultural.

Relación individuo-grupo

- Una asociación de vecinos tiene unos estereotipos acerca de las mujeres extranjeras del barrio.

- Un grupo de madres no permite que una madre extranjera participe en el regalo de la maestra.

Relación individuo-institución

- Unos niños de un centro escolar tienen problemas de adaptación debido al absentismo escolar y el centro lo atribuye a la procedencia extranjera.

- Una alumna de determinada religión no quiere llevar determinada vestimenta a su centro de estudios.

Relación grupo-grupo

- Un grupo de alumnos españoles impide que otros grupos de niños extranjeros participen en el baile del colegio.

- Un grupo de padres extranjeros protesta en el centro escolar porque sus hijos participan en las actividades religiosas ajenas a sus creencias.

Relación grupo-institución

- En un instituto, la administración ha contratado un profesor de una minoría religiosa provocando un malestar frente al resto de padres.

Relación institución-institución

- Surgen conflictos entre el instituto del barrio y una asociación de minoría étnica.

Respuestas a los conflictos

Las distintas respuestas que se le dan a los conflictos comunitarios van a depender fundamentalmente de distintos factores, tales como factores culturales; la similitud de nuevas experiencias conflictivas con otras que ya se han dado con anterioridad; la capacidad de aprendizaje que pueda tener la persona en conflicto; la capacidad o habilidad que se tiene para resolver el conflicto y el contexto o situación en que se da dicho conflicto.

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Actividades

5. Un ejemplo de conflicto comunitario puede ser el que en un establecimiento público no se permita la entrada de una mujer árabe cubriendo su pelo con un velo. ¿A qué tipo de relación se refiere?

6. ¿Qué estrategia de resolución de conflictos está usando una persona que niega que exista ninguno conflicto?

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Aplicación práctica

Identifique las características del conflicto: Diana y Elsa comparten un despacho. Diana tiene alergia y debe trabajar con la calefacción, mientras que a Elsa le molesta mucho y prefiere abrir las ventanas para que entre el aire fresco. El conflicto entre ellas es constante, aunque Diana (recién incorporada) tiene más carácter que Elsa e incluso ha traído un informe médico para que la respalde ante su jefe. Este la apoya, aunque antes no le molestaba trabajar con Elsa (que es más sumisa).

  1. Analice los factores que originan el conflicto (falta de comunicación, acusaciones, distorsiones, etc.).
  2. Defina el poder de las personas en conflicto.
  3. ¿De qué tipo de situación se trata, según los actores que intervienen en el conflicto (persona-persona, grupo-persona, etc.)?

SOLUCIÓN

La primera causa del conflicto es la falta de comunicación que existe entre las partes, además de una diferencia de poder, puesto que Diana se encuentra legitimada por su jefe.

El tipo de poder que ejerce Diana sobre Elsa es de tipo moral.

La situación a que se refiere es persona-persona, mostrándose una falta de adaptación de Diana a las normas que se seguían antes de su llegada.

3.3. Identificación de los ciclos del conflicto

A la hora de investigar los ciclos del conflicto, la mayoría de los resultados coinciden en que este se desarrolla en varias etapas, dónde las tensiones se van incrementando o disminuyendo en forma de escalera, dónde cada peldaño se corresponde con un grado más de tensión, el cual es precedido por un periodo de interiorización.

Según Rubin (1993), se podría describir como una obra de teatro que se desarrolla en tres actos: “En el primer acto, el conflicto escala. En el segundo acto, el conflicto llega a su punto máximo de expresión, se produce un estancamiento y el conflicto no asciende más. En el tercer acto, se dan movimientos hacia el acuerdo y las partes empiezan a intentar buscar soluciones”.

Hay que tener en cuenta que este ciclo no se cierra siempre, por lo que a veces el conflicto se soluciona antes de que empeore, otras no pasa al punto de estancamiento y, en otras ocasiones, el conflicto se estabiliza por el dominio de una de las partes o por el abandono o, simplemente, porque adoptan una postura de inactividad a la espera de que sea solucionado más adelante.

La dinámica del conflicto puede ser:

  1. Intensificación o escalada. Poniendo el símil de la escalera, estos primeros peldaños se definen por pérdidas de confianza, disminución de la comunicación y desconfianza hacia la otra persona. A estos niveles les sucederán otros que modifican negativamente la imagen propia o de la otra persona, la desconfianza manifiesta, el desarrollo de actitudes negativas o de expresión de enfado hasta terminar en el aumento de la angustia. Cada proceso de escalada puede ser ligeramente diferente en unas personas u otras, pero acostumbran a ser graduales e imperceptibles en sus inicios.
  2. Estancamiento. Este es un punto en el que el conflicto llega al máximo de su extensión. Es difícil que las cosas vayan a peor. Las partes solo pueden permanecer donde están o mejorar. Ambas partes se encuentran entre la decisión de derrotar a la otra persona o el reconocimiento de que puede ser posible e incluso deseable intentar conseguir sus objetivos a través de la colaboración. Esto no significa que las partes se gusten, pero comienzan a aceptarse mutuamente, por primera vez, como compañeras y aliadas más que como personas rivales. Pueden ser cuatro las razones que produzcan el estancamiento del conflicto: el fracaso de las fórmulas de competición, el agotamiento de los recursos, la pérdida de apoyo social y la inaceptabilidad de los costes.
  3. Desescalada. Cuando las dos partes son conscientes de que el conflicto ha alcanzado un límite intolerable y que es necesario que todo termine. La fórmula para seguir avanzando es que se fomente la comunicación entre las partes, para conseguir que se reduzcan los prejuicios, estereotipos y así permitir que las partes puedan expresar sus propuestas y acciones de entendimiento.

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A lo largo de una situación conflictiva, se pueden observar algunas respuestas que se dan al mismo y que intervienen en la intensidad y el desarrollo de la misma. Existen respuestas y situaciones que pueden mantener y/o potenciar el conflicto, favoreciendo su escalada, pero también existen elementos que pueden ayudar y guiar en una desescalada del mismo. Estas situaciones se dan de la manera que se describe a continuación.

Respuestas y situaciones que pueden mantener y/o potenciar el conflicto:

  1. Cuando un tercero participa, apoyando solo a una de las partes.
  2. Cuando uno de los implicados se siente con poder sobre el otro y este se siente amenazado.
  3. Cuando las partes deciden poner fin a la relación o, en el caso de haberla iniciado, se han producido unas consecuencias negativas que impiden que esta continúe.
  4. Cuando no existen evidencias claras que sustenten el conflicto.
  5. Cuando existe una falta de comunicación entre las partes.

Elementos que pueden ayudar y guiar a la desescalada del conflicto:

  1. Expresión de las emociones y la comunicación de los deseos, pensamientos y sentimientos.
  2. Relación horizontal en la comunicación, en la que la relación de poder por una de las partes desaparece.
  3. Cooperación de las partes para resolver la situación y poder conocer las necesidades de cada una.
  4. La intervención de un tercero neutral e imparcial experto en habilidades sociales favorece el diálogo, permitiendo que las necesidades e intereses sean puestos de manifiesto.

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Nota

Para poner en práctica lo planteado anteriormente, es necesario controlar las formas de comunicarse, como pueden ser por ejemplo el poder mejorar y evitar las descalificaciones y los comentarios destructivos, para así poder avanzar hacia posturas que permitan recobrar la confianza, lo que permitirá a su vez hacer una profundización en la relación entre las partes.

En la práctica, si se realiza un análisis de las condiciones y formas de comunicación que son utilizadas, como por ejemplo poder tener un autocontrol en cuanto a las respuestas destructivas ante un conflicto, esto permitirá recobrar la confianza de cada parte, lo que permitirá a su vez poder continuar y profundizar en la relación, evitando así la ruptura definitiva o al menos permitiendo una desescalada del conflicto.

A la hora de relacionarse, se puede hacer una distinción entre las diferentes clases de relaciones existentes de los miembros de una comunidad. Con la siguiente práctica, se realizará un análisis de los distintos estilos de respuesta que se dan a los diferentes conflictos que se pueden presentar.

Aplicación práctica sobre los estilos de respuesta y los elementos que favorecen la escalada y/o desescalada del conflicto

En esta actividad, a partir de una situación dada, se van a realizar las siguientes tareas, para analizar cómo se responde ante el conflicto:

  1. En un bloque de viviendas una de las familias acaba de adoptar a un cachorro de labrador durante las vacaciones familiares, mientras el perro ha estado acompañando en casa no ha habido problemas, no obstante cuando llega septiembre y los niños se van por las mañanas al colegio y los padres a trabajar el cachorro se queda varias horas solo en casa, y empieza a ladrar y aullar desconsoladamente.
  2. El piso comparte la pared del salón con una pareja de vecinos mayores, que pasan en casa toda la mañana, a los que le llegan directamente los aullidos del perro durante todo el día. Por la mañana se despiertan con los ladridos del perro en cuanto se queda solo, y pasan horas escuchando como ladra. Cansados de esta situación han llamado en varias ocasiones la atención de la familia, pero su respuesta siempre ha sido que no pueden hacer nada para evitarlo, incluso han llamado varias veces a la policía, con el consecuente enfado de la familia de la casa donde vive el perro.
  3. En última instancia la pareja de personas mayores ha dado quejas a la comunidad vecinal, que a optado por contactar con una mediadora comunitaria.

1. Identificar los estilos de respuesta a los conflictos que las personas implicadas utilizan y razonar su elección analizando las respuestas concretas.

  1. Familia dueña del perro.
  2. Pareja de vecinos mayores.
  3. Comunidad de vecinos.

2. Identificar los elementos que pueden favorecer la escalada o desescalada del conflicto.

  1. La policía se ha presenciado en varias ocasiones en el trabajo de los padres para notificar la situación de su perro y comunicarles la queja que sus vecinos estaban interponiendo. Con lo que han tenido que abandonar el centro de trabajo, en medio de las miradas de sus compañeros, para ir a casa a tranquilar al perro.
  2. La comunidad de vecinos ha intentado sentar a ambas partes en conflicto en varias ocasiones, y entienden que deben darle respuesta a través del diálogo y la comunicación, por lo que han llamado a una mediadora comunitaria, y han realizado varias reuniones.
  3. En una de las reuniones mantenidas las personas mayores quieren que sus vecinos se “deshagan” del perro para que no les moleste más, a lo que la mediadora recuerda que el animal es parte de la familia y no pueden simplemente abandonarlo.

Solución

En este caso la misión de la mediadora será habilitar los canales de comunicación que se han roto tras las denuncias y quejas de los vecinos. Ya que estas familias han vivido varios años compartiendo espacios y no han presentado problemas anteriormente de convivencia.

Diferentes estilos de respuesta de las personas implicadas:

  1. Familia propietaria del perro: la respuesta es de rechazo a las quejas de los vecinos, se sienten molestos tras las denuncias y la aparición de la policía en el conflicto, además no ven posibilidad de realizar ningún cambio que haga que el perro deje de ladrar y molestar a sus vecinos.
  2. Pareja de personas mayores: han intentado que el problema se solucione de forma inmediata, y les ha faltado habilidades en la comunicación, acudiendo antes a la denuncia policial que a tratar el conflicto de forma razonada con sus vecinos.
  3. Comunidad de vecinos: han tomado la determinación del diálogo, han apostado por la mediación comunitaria, y se han implicado en el problema instando a las partes a reunirse.

Los factores de escalada del conflicto son:

  1. Las llamadas a la policía por parte de la pareja de mayores, así como la indicación de que deben “deshacerse” del perro, tratando al animal como un objeto y sin respetar que es miembro de la unidad familiar de sus vecinos.
  2. Por parte de la familia propietaria del perro el negarse a hacer nada, o buscar una solución al problema de los ladridos.

Los factores de desescalada:

En este caso la actitud de la comunidad de vecinos poniendo el caso en manos de una mediadora comunitaria, y facilitando las reuniones entre las partes en conflicto.

4. Resumen

Como se ha visto, cualquier grupo humano amplio o reducido conocerá conflictos en su entorno o con otros grupos. El conflicto es una constante a la condición humana, es permanente y está presente en el ámbito de grupos reducidos (pareja, familia, personas), grupos medios (grupos socioprofesionales, clases sociales, grupos étnicos, etc.), grupos amplios (grupos religiosos transnacionales, nacionales).

Debido a estas diferencias individuales, en los casos en que dos o más personas comparten un mismo espacio y tiempo; en la medida que persiguen unos objetivos diferentes y además están sujetas a la competencia por los recursos económicos o por el reconocimiento, los desajustes estarán presentes en el comportamiento humano.

Las distintas formas que pueden darse a la hora de resolver un conflicto están estrechamente ligadas a los resultados que se dan al final de la situación conflictiva. Por tanto, la forma adecuada de manejar el conflicto genera un bienestar emocional y motiva al individuo, permitiéndole una armonía general en las demás áreas de su vida.

Debido a las individualidades, las relaciones que se producen entre las personas tienen unas características únicas, como son los sentimientos, emociones y pensamientos compartidos (miedo, ansiedad, alegría, sorpresa, etc.).

El hecho de insistir en la semejanzas, más que en las diferencias, es un recurso que puede ayudar a la hora de resolver los conflictos y a reconocer la importancia de los elementos valiosos que pueden aportar los demás miembros participantes en el grupo.

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Ejercicios de repaso y autoevaluación

1. Las tres P del conflicto se refieren a

  1. … Persona, como participante directa del conflicto, Proceso, como causa del conflicto, y Problema, como la fase dónde se encuentra el conflicto.
  2. … Persona, como toda aquella que conoce el conflicto, Proceso, como el desarrollo del conflicto, y Problema, como las consecuencias derivadas del mismo.
  3. Las opciones a y b son correctas.
  4. Todas las opciones son incorrectas.

2. De las siguientes afirmaciones, diga cuál es verdadera o falsa.

  1. En función de las causas del conflicto, estos pueden ser intergrupales, intrapersonales, intragrupales e interpersonales.
    1. Verdadero
    2. Falso
  2. Los conflictos por preferencias, valores o creencias, son los provocados por diferentes criterios de evaluación de las ideas o del comportamiento, por metas valiosas intrínsecamente excluyentes o bien por diferentes modos de vida, de ideología y de religión.
    1. Verdadero
    2. Falso
  3. La conducta del conflicto tiene que ver con las normas, conductas, hábitos e instituciones específicas de cada sociedad, relacionadas con la conflictividad.
    1. Verdadero
    2. Falso

3. Para definir algunas de las características de las personas que intervienen en el conflicto, es necesario conocer

  1. … las posiciones.
  2. … las emociones y sentimientos, los intereses y necesidades.
  3. … los actores principales y los secundarios que intervienen en el conflicto.
  4. Todas las opciones son correctas.

4. Busque en la siguiente sopa de letras qué define la postura de la persona ante el conflicto.

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5. Complete la siguiente oración.

El conflicto es una situación que sucede entre, al menos, ______ y se caracteriza por ______ y que ambas partes evalúan de forma ______, frecuentemente a estas percepciones les siguen una serie de ______ y ______ que intentan prevalecer unas sobre otras.

6. ¿Defina qué significa mediar?

7. Con respecto al problema

  1. … se dan situaciones en que la causa suele ser la propia realidad del conflicto.
  2. … la relación entre las partes suele ser más importante que el conflicto en sí.
  3. … a veces, no se puede resolver el problema, pero sí se puede conseguir restablecer la comunicación entre las partes.
  4. Todas las opciones son correctas.

8. Desde la mediación comunitaria, el conflicto

  1. … se basa en el reconocimiento y la legitimación de las partes.
  2. … los intereses y necesidades de las partes entran en contradicción entre sí.
  3. … solo es necesario legitimar a la parte que solicita la mediación.
  4. Las opciones a y b son correctas.

9. ¿Cuáles son los componentes de la escalada del conflicto?

10. Algunas de las respuestas a los conflictos van a depender de

  1. … la similitud de experiencias conflictivas similares a otras anteriores.
  2. … la capacidad de aprendizaje que tenga la persona en conflicto.
  3. … los factores culturales.
  4. Todas las opciones son correctas.