Buy
Bookshop
Las legumbres y los frutos secos. Una alternativa para comer ...
AnonymousUser
Index
Las legumbres y los frutos secos. Una alternativa para comer sano
(1)
(2)
(3)
(4)
Introducción
¿Legumbres o leguminosas?
PRIMERA PARTE LAS LEGUMBRES
Interés nutricional
Energía: un aporte moderado
Glúcidos: los verdaderos glúcidos lentos
Proteínas: casi perfectas
Lípidos: prácticamente ausentes
Vitaminas: paso al grupo B
Minerales: una concentración excepcional
Fibras: variadas y eficaces
Sustancias antinutricionales: ¡no dramaticemos!
Las legumbres en la alimentación: hacia el equilibrio alimentario
Producción y tecnología
Un cultivo simple y natural
Presentaciones comerciales variadas
Conservación: no la prolongue indefinidamente
Utilización
La cocción, etapa indispensable
¿Cómo digerir mejor las legumbres?
Las legumbres y los distintos regímenes
Régimen hipocalórico: adelgazar comiendo legumbres
Régimen bajo en colesterol: vegetales que disminuyen el colesterol
Colitis y gastritis: reaprender a consumir legumbres
Diabetes: las legumbres, aliadas del equilibrio glucémico
Estreñimiento: un lugar privilegiado para las leguminosas
Régimen sin sal
Régimen de la gota o hiperuricémico: una aproximación vegetariana
Deportistas: legumbres sí, pero no en cualquier momento
Niños y adolescentes: sólo para los mayores
Mujeres embarazadas y en periodo de lactancia: aprender a tolerarlas
Vegetarianos: las leguminosas, el verdadero pilar de una alimentación vegetariana
Cantidades y frecuencias aconsejadas
Las combinaciones nutricionales
Cereales y derivados: una complementariedad perfecta
Productos lácteos: llenar el depósito de calcio
Carnes: sacar mayor provecho del hierro de las legumbres
Pescados y huevos: atreverse a ser originales
Verduras: un clásico culinario
Las diferentes legumbres
Garbanzos
Guisantes secos
Habas
Judías
Lentejas
Soja
SEGUNDA PARTE LA FRUTA SECA
¿A qué llamamos fruta seca?
Interés nutricional
Energía: alimentos concentrados
Glúcidos: ¿lentos o rápidos?
Proteínas y lípidos: prácticamente inexistentes
Vitaminas: una concentración selectiva
Minerales: una densidad fuera de lo común
Fibras: suaves y eficaces
La fruta seca en la alimentación: un complemento que no debe despreciarse
Tecnología: del sol al calor de los hornos
Aditivos: compruebe las etiquetas
Conservación: limítela al máximo
Compra: el sabor como mejor referencia
Utilización: ¡viva la simplicidad!
La fruta seca y los distintos regímenes
Régimen hipocalórico: ¿por qué prohibirla?
Régimen de las enfermedades cardiovasculares: todo depende de su índice sanguíneo
Colitis y gastritis: compruebe su tolerancia
Diabetes: glúcidos que deben contabilizarse en la ración diaria
Régimen sin sal: consumir casi sin limitaciones
Estreñimiento: fibras y sorbitol para un efecto garantizado
Deportistas: minerales reequilibrantes
Niños y adolescentes: una golosina... ¡aconsejada por los dietistas!
Mujeres embarazadas y en periodo de lactancia: una forma sencilla de completar el aporte mineral
Personas mayores: el único consejo es comer más
Vegetarianos: un buen complemento de minerales
Cantidades y frecuencias aconsejadas
Las combinaciones nutricionales
Cereales y sus derivados: un complemento mineral de los cereales blancos
Productos lácteos: la ventaja del calcio
Carnes y pescados: puesto de honor
Frutas y verduras: llenar el depósito de vitaminas
Las diferentes frutas secas
Albaricoques
Ciruelas pasas
Dátiles
Higos
Pasas
Plátanos
TERCERA PARTE LOS FRUTOS SECOS U OLEAGINOSOS
Los oleaginosos: vegetales especiales
Interés nutricional
Energía: alimentos particularmente ricos
Lípidos: ¡vivan las «buenas» grasas!
Proteínas: un factor que no debe despreciarse
Glúcidos: un papel muy secundario
Vitaminas: una paleta muy variada
Minerales: una concentración particularmente elevada
Fibras: ideales para el tránsito intestinal
Los oleaginosos en la alimentación: un lugar por reconquistar
Cultivo y tecnología
La simplicidad en el menú
Presentación comercial y aditivos
Conservación
Utilización
Ingredientes que quedan bien en todas partes
Alergias: una tolerancia que debe controlarse
Los oleaginosos y los distintos regímenes
Régimen hipocalórico: ¡a pequeñas dosis!
Enfermedades cardiovasculares: ¡sobre todo, no prohibirlos!
Régimen sin sal: saber escoger los oleaginosos
Colitis y gastritis: deben evitarse los oleaginosos
Diabetes: una buena protección vascular
Estreñimiento: una prevención muy eficaz
Deportistas: una buena recarga mineral
Niños y adolescentes: a pequeñas dosis
Mujeres embarazadas y en periodo de lactancia: golosinas equilibrantes
Vegetarianos: complementos insustituibles
Cantidades y frecuencias aconsejadas
Las combinaciones nutricionales
Cereales y sus derivados: minerales complementarios
Productos lácteos: un suplemento de calcio
Carnes y pescados: un mayor equilibrio lipídico
Frutas y verduras: perfiles diferentes pero complementarios
Los distintos oleaginosos
Almendras
Anacardos (salados)
Avellanas
Cacahuetes
Girasol
Nuez
Nuez pacana
Piñones
Pistachos (tostados y salados)
Sésamo
CUARTA PARTE RECETAS Y MENÚS
Recetas y menús: las legumbres
La preparación básica de las legumbres
Ensaladas
Potajes y sopas
Entrantes calientes y terrinas
Platos principales
Recetas y menús: las frutas secas y los oleaginosos
Platos dulces
Índice de preparados y recetas
Las legumbres
Las frutas secas y los oleaginosos
Las frutas secas y los oleaginosos (1)
Notas a pie de página
In this book:
Content of the Book
My notes
My highlights
Settings
Font:
- Original Font -
Arial
Courier
Georgia
Palatino
Sans Forgetica
Tahoma
Times New Roman
Verdana
Text size:
Aa
Aa
Reset text size
Background color:
Aa
Aa
Aa
Aa
Interface language:
English (US)
English (UK)
Español
Català
Bookmarks
Highlights
Notes
Facebook
Twitter
LinkedIn
Dictionary
Wikipedia
1
Las legumbres y los frutos secos. Una alternativa para comer sano
·