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Si un hombre empieza con certezas, terminará con dudas; pero si se conforma con empezar con dudas, terminará con certezas. Francis Bacon |
Los intentos de cambiar las opiniones de los demás son tan antiguos como la humanidad. A lo largo de los años, el fenómeno de la persuasión ha ido cobrando importancia. Uno de los primeros libros sobre el tema, publicado en 1922, se tituló Self-mastery through Conscious Autosuggestion («Cómo recuperar la confianza en sí mismo con la autosugestión»), de Emile Coué. Otro de tema similar fue Suggestion and Autosuggestion («Sugestión y autosugestión») de Charles Baudouin. De hecho, uno de los libros más vendidos del mundo (más de seis millones de ejemplares) es How to Win Friends and Influence People («Cómo hacer amigos e influir en los demás»), escrito por Dale Carnegie en 1938.
Por tanto, la persuasión no es un tema nuevo. No obstante, la mayoría de la gente no considera que sea una parte importante de su trabajo. Se cree que son habilidades que se enseñan a los vendedores y que no tienen nada que ver con su vida privada. Suele pensarse que la comunicación tiene una finalidad eminentemente informativa y no persuasiva. Nada más lejos de la verdad: todos nosotros intentamos cada día cambiar las opiniones de los demás. La información comunicativa siempre parte del propósito de que el receptor acepte y crea lo que el emisor dice. Un médico amigo mío admite sin ambages que dice sólo lo que la gente desea escuchar. Por ejemplo: explica a los pacientes que se ha comprobado que fumar es nocivo para su salud, pero no les dice que su padre, de ochenta años, fuma desde siempre cuarenta cigarrillos diarios. Y es que pocas veces se dan detalles si no es para reforzar nuestra persuasión, lo que equivale a omitir algunos hechos. Por todo ello, una posible definición del fenómeno podría ser la siguiente:
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Influencia Proporcionar la información adecuada a otra persona para producir un cambio. |
Los cambios efectuados pueden afectar a las creencias, la actitud, el pensamiento, los sentimientos o la conducta de otra persona. Queramos admitirlo o no, estamos inmersos en el proceso de persuasión. Sin embargo, es preciso aclarar que persuadir no es manipular. Las técnicas encubiertas del mundo de la publicidad, los lavados de cerebro militares o la propaganda política han contribuido a desacreditar las técnicas de persuasión. Y, sin embargo, es evidente que se recurre a las técnicas de persuasión con propósitos manipuladores. Un boxeador sabe cómo lograr el éxito en el ring mediante unas técnicas concretas, pero si las emplea fuera, lo más probable es que sea multado o acabe en prisión.
Todo depende de uno mismo: es preciso saber la causa y la finalidad de las técnicas de persuasión. Si deseamos influir en los demás de manera recta y responsable y buscamos el provecho común, entonces no importa si la llamamos influencia, convencimiento o persuasión. Podemos estar tranquilos.
Este libro ha sido concebido como un método o un manual para desarrollar las dotes de persuasión y no un estudio académico sobre el fenómeno en sí. Existen diversas soluciones para resolver problemas e inquietudes, pero no existe un método infalible. Cada cual debe examinar sus propias inquietudes específicas y desarrollarlas con las habilidades, las estrategias y las técnicas explicadas.
Cada vez más, el éxito en nuestra vida se mide a través de la habilidad para influir en los demás. Hoy en día todos tenemos que conocer ciertas técnicas persuasivas. Una buena oportunidad surge siempre de forma inesperada. Las nuevas políticas de empleo y el aumento de trabajadores autónomos nos obligan a desarrollar nuestras dotes para abrirnos paso. Recientemente, la Asociación Americana de Dirección realizó una encuesta a 2.800 ejecutivos. Preguntaron cuál es el requisito principal para obtener el éxito laboral. Esta fue la respuesta:
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Persuadir a los demás del valor de la propia persona y de las propias ideas garantiza el éxito de una negociación. |
¿Con qué frecuencia sentimos la necesidad de influir en los demás? ¿Una vez al mes? ¿Dos veces a la semana? Lo más probable es que, como la mayoría de la gente, necesitemos hacerlo en diversas ocasiones al día. Influenciar a otras personas es bastante sencillo si usted está en una posición de autoridad o tiene poder sobre otros, pero, ¿qué sucede si no posee ninguna autoridad o carece del poder para controlar los pensamientos o las acciones de otros? Los vendedores son muy habilidosos en estos casos. Puede ser que usted no haya tenido una formación en técnicas de venta ni tampoco sea un vendedor modelo, pero seguro que conoce a una persona que tampoco lo es pero que tiene una gran facilidad de comunicación.
Muchas personas son influyentes de manera casi instintiva. Otras, en cambio, simplemente tienen suerte. Sin una formación adecuada o sin ser especialmente persuasiva, una persona puede sentirse frustrada. Se siente ignorada, se desanima y pierde buenas oportunidades. El resultado es que se da por vencida o permanece ignorada por su jefe, colegas, amigos o compañeros.
No hay que desesperarse. Los secretos de la persuasión pueden aprenderse y emplearse con éxito fácilmente, incluso si se está en una posición subordinada. En poco tiempo todos los problemas desaparecerán.
Este libro está dirigido a todos aquellos que desean destacar en un medio competitivo, promocionarse, convencer al jefe, a su familia, a sus amigos y ganar clientes. En el trabajo o en sociedad usted recuperará su confianza y aumentarán las oportunidades de prosperar. Lo más importante es que, quizá por primera vez en su vida, se dará cuenta de que la influencia no está necesariamente ligada a la autoridad. Con una actitud activa y entusiasta también usted puede tomar las riendas de su vida.
A lo largo de estas páginas, aprenderá a influir en una persona o en un grupo reducido (de cuatro personas como máximo) y a llegar, paso a paso, a conseguir el mayor éxito posible.
Seguramente, usted conocerá alguno de los métodos y las técnicas que aquí se enseñan. Estoy seguro de que encontrará muchos consejos e indicaciones nuevos o ya olvidados. Basta con conocerlos y aplicarlos a su debido tiempo para influir en los demás con mayor eficacia y más fácilmente.
Como ya hemos visto, el termino influencia posee un significado distinto para cada persona. Muchas veces suele depender de la persona y del método que se está empleando. El diccionario define el arte de la influencia como «poder, valimiento, autoridad de una persona para con otra u otras o para intervenir en un negocio», lo cual abarca el arte de persuadir, convencer, negociar e incluso de vender. La palabra clave es autoridad. Cada cual debe averiguar de qué manera intenta influir en los demás. Probablemente esto dependerá del lugar (en casa, o en el trabajo), del momento (espontáneamente o con mucha antelación y planificación previa) y del modo (cara a cara, por teléfono, en una reunión, en una exposición, por escrito).
¿Cuál de estas áreas de influencia le interesa particularmente y cuáles son sus objetivos típicos? Pregúntese usted mismo cuál de estos se adapta a su estilo personal:
√ ayudar a los demás a solucionar sus problemas;
√ influir en una decisión;
√ persuadir a otras personas para que hagan aquello que usted desea;
√ convencer a la gente del interés de sus sugerencias;
√ vender sus ideas y sus propuestas a otras personas;
√ cambiar la opinión del interlocutor o hacer que llegue a una conclusión prefijada;
√ comprometerse a un cambio;
√ conseguir que alguien decida;
√ hacer planteamientos convincentes;
√ dirigir un proyecto;
√ influir en grupos de gran responsabilidad;
√ convencer a clientes;
√ influir en un resultado;
√ mejorar la imagen;
√ ganar aceptación;
√ negociar con éxito;
√ conseguir el cumplimiento de los compromisos;
√ vender algo;
√ intercambiar puntos de vista;
√ modificar actitudes;
√ dirigir actuaciones;
√ cambiar opiniones;
√ cambiar de objetivos;
√ mejorar el rendimiento;
√ dirigir un proceso;
√ dirigir una relación;
√ mejorar la influencia social;
√ conseguir una cita con posibles clientes;
√ hacer que ideas nuevas sean aceptadas por gente con experiencia;
√ influir en grupos o reuniones;
√ escribir propuestas convincentes;
√ conciliar diferentes puntos de vista;
√ influir a otros por teléfono.
Si tuviera que definirse como una persona influyente, ¿qué palabras utilizaría? Sea honesto, pues la autovaloración es el primer paso hacia el perfeccionamiento personal (o sea valiente y pida a alguien conocido que responda por usted).
• ¿Cuáles son sus virtudes?
• ¿Cuales son sus puntos débiles?
• ¿Qué le gustaría oír de sus habilidades de persuasión?
• ¿Qué tipo de persona influyente desea ser?
Muestre este autoanálisis a un amigo o a una persona que conozca su estilo y su manera de ser. ¿Le ve de la misma manera?
Cuando intente persuadir a alguien, desarrolle al máximo sus capacidades.
Comencemos a preparar un plan para reducir o eliminar sus puntos débiles.
A continuación presentamos los objetivos principales de toda persuasión. Utilice los siguientes apartados para evaluar cuál es su nivel de confianza para conseguir sus objetivos.
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PUNTUACIÓN |
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5 |
Confianza completa. |
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4 |
Mucha confianza. |
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3 |
Confianza. |
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2 |
Poca confianza. |
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1 |
Ninguna confianza. |
En virtud de la puntuación anterior, imagine una situación en la que usted debe convencer a alguien y responda a las siguientes cuestiones:
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Quiero aclarar mis objetivos (Capítulo 1). |
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□ |
Quiero descubrir qué valores y qué opiniones tiene la otra persona (Capítulo 2). |
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□ |
Deseo conocer las necesidades de los demás (Capítulo 3). |
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□ |
Quiero mostrar cómo mis ideas pueden ser útiles (Capítulo 4). |
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□ |
Quiero ser capaz de compenetrarme con otras personas (Capítulo 5). |
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□ |
Quiero comprender mejor la comunicación no verbal (Capítulo 6). |
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□ |
Quiero ser capaz de tratar con personas diferentes (Capítulo 7). |
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Quiero utilizar diversos estilos de persuasión (Capítulo 8). |
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□ |
Quiero vencer cualquier objeción a mis propuestas (Capítulo 9). |
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□ |
Quiero estar seguro de que se toman decisiones a mi favor (Capítulo 10). |
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□ |
Quiero aumentar mi influencia en las reuniones (Capítulo 11). |
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□ |
Quiero convencer a la gente por teléfono (Capítulo 12). |
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□ |
Quiero mejorar mi habilidad para influir en informes, propuestas y cartas (Capítulo 13). |
Una vez haya calculado su puntuación, cotéjela con la tabla siguiente:
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13 |
Ninguna confianza. |
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26 |
Poca confianza. |
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39 |
Confianza. |
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52 |
Mucha confianza. |
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65 |
Confianza completa. |
Fíjese bien ahora en las cuestiones a las que ha dado un punto o dos.
Si no desea leer este libro por completo, puede comenzar por aquellos capítulos en los que se tratan los temas más difíciles o más interesantes para usted o que necesita cambiar con la mayor brevedad posible.
Cada capítulo contiene uno o más ejercicios. En el caso de haber un aspecto concreto que le interese, lea los ejercicios desde el principio y seleccione uno o más para seguirlos. Complete los ejercicios (o adáptelos según convenga) y observe los resultados que ha obtenido. Utilícelos para ayudarle a desarrollar sus virtudes y eliminar sus puntos débiles.
Tal vez considere conveniente crear sus propios ejercicios. En los cursos de técnicas de persuasión que he dirigido, he animado a los participantes a pensar en una situación real a la que tal vez deban hacer frente. A medida que el curso avanza, los participantes organizan sus nuevos conocimientos pensando en situaciones futuras.
Los resultados de enfocar de esta forma las clases han sido muy positivos y gratificantes. Muchos alumnos han telefoneado, escrito o enviado faxes para explicarme sus éxitos. Para algunos, este método puede tener una utilidad más directa que trabajar siempre con los ejercicios de cada capítulo.
Existen muchas aproximaciones al tema de la persuasión. Algunas de ellas se explican brevemente en el capítulo 8. Experimente con un método que no le sea familiar. Observe dónde y cómo funciona y modifíquelo para adaptarlo a su propio estilo. En el apéndice final encontrará tres modelos en los que encontrará las clásicas y ya bien conocidas vías de influencia. Ellas le ofrecen opciones adicionales y puede mezclarlas a medida que las utilice para manejar las diferentes situaciones en las que usted mismo se encontrará.
Puede simular con un amigo o compañero una situación concreta. Muchas personas detestan la idea de simular una situación. Todos hemos asistido a cursos en los que hemos tenido que representar algo delante de un público muy crítico. Sin embargo, lo que estoy sugiriendo es totalmente distinto. Si usted puede encontrar a alguien que conozca y entienda lo que desea comprobar, pueden reunirse durante un tiempo y analizar el método empleado. Explíquele a la persona con la cual va a representar una situación las objeciones que espera recibir, dándole usted mismo la oportunidad de poner a prueba algunas respuestas. Observe qué funciona o qué es lo que tiene menos éxito. No pierda de vista su comportamiento y el de su amigo a lo largo del ejercicio. Utilice la información obtenida para ajustar el método que desea adoptar.
Estos ejercicios son especialmente útiles a la hora de influir en un grupo. Anime a sus amigos o colegas a que le hagan preguntas o a que desafíen sus conclusiones y recomendaciones. Puedo garantizarle que, después de desarrollar y representar una simulación bien llevada, debería tener la impresión de haberla vivido antes y sentir esa confianza tan especial que se desprende de la experiencia.
Las técnicas de comunicación presentadas en este libro le ayudarán a pensar sobre cómo acercarse a los demás y cómo actuar con mayor precisión y éxito. Si lleva a cabo las secuencias sugeridas y desarrolla una mayor flexibilidad en su método, muchos problemas de comunicación desaparecerán, conseguirá un mayor número de objetivos, se comunicará mejor con más personas y, por encima de todo, se le considerará como una persona persuasiva y de éxito.