NOTA DEL TRADUCTOR

Como nacido en 1974, llegué a heredar algún casete o vinilo de legendaria música anglosajona con títulos traducidos al español: Puente sobre aguas turbulentas, Viento idiota, Qué noche la de aquel día. En los 80, no obstante, cuando comencé a comprar música, esa práctica era ya muy minoritaria y en los 90 no conocí a nadie que hablara con naturalidad de Huele a espíritu adolescente, El señor Jones o Perdiendo mi religión. Por ese motivo tirando a evidente he mantenido en inglés los títulos de álbumes y canciones, así como los versos que de estas se citan, para a continuación traducirlos en notas al pie cuando eso ayude a entender el mensaje que desea transmitir el autor (es decir, en el 95 % de los casos). Por último, decir que me he tomado pequeñas licencias en la traducción de los versos a fin de respetar algo tan fundamental en una canción como es la rima; en algún momento sutil por asonante, pero presente siempre que el original lo requería... salvo en un par de ocasiones concretas en las que, por extensión breve o escasa sinonimia, esa licencia se hubiera transformado en invención pura y dura.