Introducción al kit de herramientas espiritual

Ahora, vamos a explorar las herramientas con las que experimentarás durante tus rituales. Analizaremos su poder y propósito, profundizaremos en su historia y te enseñaremos a sentirte cómoda mientras los utilizas.

Cristales

Los cristales nos atraen por su brillo. Estas piedras de colores, que podemos encontrar en tiendas esotéricas y ceremonias espirituales, han tenido un gran impacto en la conciencia colectiva en los últimos tiempos. Hoy en día, parece que tanto místicos como escépticos están adoptando el uso de los cristales. Puedes encontrarlos en habitaciones con una tenue iluminación y aroma a salvia y sándalo, así como expuestos en librerías locales y tiendas de productos de belleza.

Parte de su atractivo se debe a su estética. Los cristales son bonitos, así de simple. Vienen en una amplia gama de colores: desde naranjas brillantes hasta púrpuras intensos que capturan la luz de la manera adecuada. Las piedras también se presentan en múltiples formas y tamaños para satisfacer cualquier necesidad: las pequeñas que caben en el bolsillo se sienten como pequeños amuletos, mientras que las más grandes pueden convertirse en majestuosas decoraciones en nuestros hogares. Cuando se colocan uno al lado del otro, son una preciosa muestra de la Madre Tierra y su exhuberancia.

No obstante, el atractivo de los cristales va más allá de lo material. Dado que son, literalmente, trozos de la Tierra, se cree que en su interior contienen la sabiduría de millones de años. El simple hecho de interactuar con las piedras podría permitir que parte de esta sabiduría se nos transmitiera. Aunque la eficacia de los cristales en las curaciones carece de evidencias científicas, poder sujetar con tus manos un pequeño fragmento del planeta tiene sin duda un aspecto medicinal.

Para nosotras, el poder de los cristales radica en cómo te relacionas con ellos. La clave está en permitir que tus cristales te recuerden un propósito determinado. Por ejemplo, digamos que tomas una piedra de jade verde, que se cree que atrae la abundancia, durante un período de dificultades económicas. El día que lo haces, piensas en el tipo de abundancia económica que deseas y cómo puedes actuar para conseguirlo. Luego, la colocas en tu escritorio para que, cada vez que te sientes frente a tu ordenador, recuerdes esta meta. La piedra se convierte en un recordatorio constante de tu deseo de ganar más dinero, como si fuera una pequeña animadora que te mantiene fiel a tu intención. Cuando adoptas esta perspectiva, no es tan absurdo pensar que la presencia del cristal puede ayudarte a conseguir un nuevo trabajo o el aumento de sueldo que has estado buscando. Todo se reduce al enfoque 80/20. El cambio se produce cuando te comprometes con el trabajo y una pizca de energía terrenal encantada resulta de gran ayuda.

La historia de los cristales

Nuestros ancestros emplearon estos pequeños fragmentos del planeta para todo tipo de sanaciones. Los egipcios enterraban a sus difuntos con un cuarzo para proteger su viaje hacia la vida después de la muerte; en la India, el ámbar se utilizaba como herramienta medicinal para devolver el equilibrio al cuerpo, y los antiguos griegos describieron las piedras como un «seguro [remedio] contra cualquier pesar terrenal» en una inscripción de más de 1500 años1 atrás.

A lo largo de la historia, los distintos relatos dotaron a cada cristal de una personalidad única. «Amatista» deriva de la palabra griega que significa «sobrio», y en el pasado solía ser común llevar un collar de amatista como forma de prevenir la embriaguez y la resaca2. Los griegos solían frotarse el cuerpo con hematites triturados antes de la batalla como una especie de escudo, y se cree que la piedra aún posee una energía protectora. La citrina, con su tono brillante, se ha ganado la reputación de ser una piedra de la buena suerte; el cuarzo rosa, de fomentar el amor, y la turquesa, de actuar como una gran sanadora. Repasemos algunos cristales y sus usos más habituales en la actualidad3:

Amatista: promueve el crecimiento espiritual y potencia la intuición.

Aventurina: atrae la riqueza material y la prosperidad emocional.

Cornalina: supera bloqueos y abre paso a la inspiración creativa.

Citrina: trae felicidad, alegría y paz.

Esmeralda: representa el amor y el éxito duradero.

Turquesa: simboliza la protección, la fuerza y la salud.

Cuarzo: el cuarzo blanco aporta claridad y poder; el cuarzo rosa evoca el amor.

Encontrar el adecuado para ti

Los cristales se forman cuando los minerales se unen y solidifican en patrones cristalinos uniformes. Los minerales tienen diferentes puntos de fusión, presiones y condiciones, por eso vienen en formas y tamaños únicos. Si bien algunas combinaciones (como el cuarzo blanco y la amatista) son bastante habituales en la naturaleza y podemos encontrarlas en casi todas las tiendas de cristales, otras son consideradas auténticas rarezas y son muy valoradas. Los coleccionistas de cristales están dispuestos a gastarse millones en ciertas piedras, como una turmalina de tapa azul que se vendió recientemente por dos millones y medio de dólares, o pequeños trozos de meteorito que se venden por cinco mil dólares cada uno4.

Teniendo esto en cuenta, el primer paso antes de comprar cristales es fijarse un presupuesto, pero no te preocupes, los de pequeño tamaño son económicos. Más allá de eso, puedes visitar una tienda esotérica, una tienda de cristales o una feria de gemas sin tener un presupuesto concreto o una idea del tipo de piedra que quieres. Como suele ocurrir con la mayoría de las herramientas espirituales, si un cristal te llama la atención de inmediato, es probable que sea el que está destinado para ti. Desde una perspectiva simbólica, es posible que necesites más de esa energía en tu vida, ya seas consciente de ello o no. Esto también explica por qué puedes sentirte atraída hacia un cristal un mes y hacia otro el mes siguiente; todo tiene que ver con tus necesidades y deseos subconscientes. Así que no te tomes las propiedades de los cristales de forma literal. Sin importar del uso que se le haya dado a una piedra en el pasado, siempre puede convertirse en lo que necesitas en el momento presente.

Si te cuesta encontrar tu cristal a partir de su apariencia, prueba con el tacto. Toma una piedra, sujétala con tus manos y observa si te provoca algo fuera de lo común. Puede que te traiga alguna imagen a la mente, que empieces a ver cierto color o, incluso, que sientas una vibración en tu palma.

Cuando encuentres una que te llame la atención, asegúrate de que sea natural y no artificial. Las piedras falsas tienden a tener burbujas de aire, un color uniforme y presentar grietas muy marcadas. También suelen mostrar un tono blanco en la parte inferior cuando las frotas.

Dado que se cree que los cristales capturan las energías, los pensamientos y hasta las huellas de quienes se cruzan en su camino, deberías «limpiar» el que compres antes de darle la bienvenida a su nuevo hogar, ya sea tu mesita de noche, el alféizar de tu ventana, tu altar o tu escritorio. Para hacerlo, puedes utilizar una vara de salvia (hablaremos de ello más tarde) para sahumarlo, la luna para bañarlo en luz o agua para darle un baño más literal. No importa cómo elijas limpiar tu cristal, el simple hecho de hacerlo es una señal de que estás dispuesta a recibirlo en tu vida. Es como si presionaras un botón para reiniciarlo y que sintonice contigo y solamente contigo. De nuevo, todo depende de la intención. Estás afirmando tu posesión sobre el cristal y mostrando tu disposición para trabajar en comunión con esta herramienta.

A partir de ahí, puedes decidir qué deseas que represente tu nuevo cristal y qué quieres atraer a tu vida. ¿Fuerza? ¿Amor? ¿Tranquilidad? Las posibilidades son infinitas.

Cómo utilizar los cristales

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos de nuestros rituales favoritos con cristales, los cuales puedes hacer en cinco minutos. Anímate a probarlos para sentirte cómoda con esta herramienta antes de llevar a cabo rituales estacionales más complejos.

UN RITUAL CON CRISTALES PARA RELAJARSE ANTES DE DORMIR

  1. Cuando estés acostada en la cama, coloca un cristal pequeño en tu entrecejo. En la antigua tradición de la India, se dice que esta zona corresponde al chakra del tercer ojo, que controla la intuición y la conciencia.
  2. Cierra los ojos, respira profundamente varias veces e imagina que el cristal absorbe cualquier pensamiento de preocupación o negatividad que haya quedado del día. Visualiza cómo libera espacio en tu mente para dárselo a los sueños y luego coloca el cristal en tu mesita hasta la noche siguiente.

También puedes poner un cristal en tu pecho antes de dormir. Observar cómo sube y baja al ritmo de nuestra respiración es muy relajante.

UN RITUAL CON CRISTALES PARA PURIFICAR TU HOGAR

  1. Consigue un frasco o recipiente de vidrio y llénalo de agua. Coloca dentro el cristal y déjalo reposar durante unas horas o toda la noche.
  2. Luego, vierte el agua en un pulverizador y añade unas gotas de aceite esencial si deseas un toque aromático.
  3. Cada vez que te sientas un poco triste, bloqueada o simplemente desanimada en casa, tómate un minuto para rociar en el aire un poco de agua impregnada con la energía de los cristales; así llenarás el ambiente con tu intención.

A nosotras nos gusta hacer una nueva mezcla al inicio de cada estación. Elegimos la combinación de cristales conforme lo que necesitamos en ese momento del año.

Hierbas y plantas

Las hierbas y plantas tienen un poderoso efecto curativo y han sido utilizadas como medicina desde hace siglos. De hecho, en algunas lenguas nativas, «plantas» podría traducirse como «aquellos que cuidan de nosotros»5. Esto respalda las dietas a base de plantas con las que estamos familiarizadas en el ámbito del bienestar, pero también los beneficios del uso de las plantas en cantidades mucho más pequeñas.

La herbolaria, práctica ancestral que emplea hierbas para la curación física y mental, está rodeada por el misterio y la superstición. Las antiguas culturas asociaban las hierbas con el mundo espiritual y los miembros de la comunidad que entendían el lenguaje de las plantas eran muy respetados. Conocidos como «chamanes» y «hombres de medicina», estos sanadores aprovechaban las poderosas propiedades medicinales de las plantas en su papel de intermediarios con los reinos superiores.

Con la medicina moderna, aprendimos que las propiedades calmantes de las hierbas pueden ser aisladas, extraídas y utilizadas para desarrollar medicamentos. Aunque actualmente estamos presenciando el auge de los fármacos sintéticos, el origen de la mayoría de los medicamentos en Occidente son compuestos botánicos.

La ciencia ha desempeñado un importante papel al explicarnos la medicina herbal, lo que ha dejado poco espacio para la investigación. Sin embargo, algunas personas todavía tienen un deseo ferviente de conectarse con el lado más mágico y enigmático de la herbolaria. Las ceremonias de medicina herbal que utilizan potentes mezclas, como la ayahuasca, son populares entre quienes sienten curiosidad por emprender viajes espirituales. Muchas personas se dirigen en masa hacia las remotas selvas de Costa Rica (o a los sótanos de Brooklyn) para emprender un viaje hacia la imprevisibilidad de lo desconocido.

La historia de las hierbas

El primer registro escrito sobre el uso de hierbas para tratar la salud se remonta a cinco mil años6 atrás. En un texto chino llamado Shennong Ben Cao Jing, que se podría traducir como «El clásico de la medicina herbolaria», se presentan las propiedades curativas de más de trescientas hierbas, muchas de las cuales todavía se emplean en la medicina actual. El Ayurveda, la práctica india para prevenir enfermedades al equilibrar las diferentes energías del cuerpo, también empezó a recurrir a las hierbas hace miles de años. Alrededor del 800 a. C., se fundó en India uno de los primeros precursores de los hospitales modernos, con estanterías llenas de miles de hierbas, desde las menos conocidas (raíz de shatavari, tallo de guduchi) hasta las más habituales (regaliz, ashwagandha).

El proceso de decidir qué planta debía usarse para cada dolencia solía ser experimental, aunque el exterior de una hierba, como su color, aroma o forma, a menudo daba pistas sobre la curación que albergaba en su interior. Por ejemplo, las hierbas utilizadas para tratar la ictericia solían tener flores amarillas, que reflejaban el tono de la piel de un paciente cuando tenía esa enfermedad7. En cambio, las violetas se usaban para problemas cardíacos debido a sus pétalos en forma de corazón. El antiguo comercio de especias difundió estas poderosas hierbas por Asia y el Mediterráneo, donde adquirieron un inmenso valor. Muchas de las hierbas que hoy en día son habituales, en aquel entonces se valoraban mucho por su rareza, y se dice que ciertos soldados solían recibir su paga en sal, lo que dio origen a la palabra «salario» y a la expresión «No vale su sal».

A lo largo de los años, las plantas se han utilizado tanto en tiempos de guerra como de paz. Los cirujanos que acompañaban a los ejércitos utilizaban hierbas para tratar las heridas de batalla, mientras que las flores eran las protagonistas en las celebraciones.

Más allá de sus usos prácticos, las hierbas, las plantas, las flores y otros elementos naturales adquirieron un atractivo olvidado con el paso del tiempo. Dado que las plantas provienen de la tierra, los místicos solían incorporar su energía en rituales y hechizos. Cuando acusaron a Juana de Arco de brujería, utilizaron el hecho de que ella llevara consigo raíces de mandrágora como evidencia8.

En la actualidad, las hierbas siguen teniendo un valor inmenso, sobre todo en círculos espirituales. No puedes entrar en una tienda esotérica sin sentirte rodeada por los aromas de la salvia o la estevia; fragancias relacionadas con la purificación y la energía positiva. Incluso en el simple acto de tomar té hay una sensación vagamente espiritual: el proceso constante de infusionar flores y hierbas en agua, y el lento sorbo que permite captar la esencia de la tierra.

Encontrar las hierbas adecuadas para ti

Las hierbas son herramientas muy diversas y versátiles, por lo que puede llevar un tiempo dar con las que se ajusten más a tus necesidades.

Las regiones ricas en biodiversidad son focos de plantas medicinales silvestres. Lugares como las selvas de Costa Rica albergan miles de especies, cada una con sus propiedades únicas. Al igual que los cristales, las hierbas cuentan la historia de las tierras de donde provienen. El primer paso es encontrar una que te llame la atención; luego puedes decidir cómo emplearla. Las plantas pueden consumirse en forma de tinturas e infusiones, o aplicarse tópicamente; también pueden convertirse en aceites esenciales y aerosoles, o quemarse para aprovechar su humo.

Para los objetivos de este libro, utilizaremos hierbas secas para limpiar espacios y preparar tés, así como hierbas y flores frescas para baños y purificaciones. Si bien puedes encontrar plantas secas y frescas en cualquier supermercado, mercado de agricultores o herbolario, asegúrate de que sean de calidad y tengan un bajo impacto ambiental. Puedes cultivarlas tú misma o comprar cuando sea posible las que hayan sido cultivadas de manera orgánica o recolectadas de forma silvestre. Estas últimas se recolectan en su entorno natural, por lo que no deberían contener fertilizantes químicos ni pesticidas. En general, utilizaremos las hierbas de forma tópica, pero cuando las consumas, asegúrate de estar informada y comenzar con cantidades pequeñas para ver cómo reacciona tu organismo.

Cómo utilizar hierbas y plantas

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos de nuestros rituales favoritos con hierbas, que puedes hacer en cinco minutos. Anímate a probarlos para sentirte cómoda con esta herramienta antes de llevar a cabo rituales estacionales más complejos.

EL RITUAL DE SAHUMAR PARA LOS NUEVOS COMIENZOS

  1. Enciende un ramillete de hierbas sobre una caracola marina grande. De esta manera, se incorpora un elemento acuático a las energías de fuego, tierra y aire que ya están en juego. Si no tienes una caracola, puedes utilizar un platito o un cuenco pequeño.
  2. Apaga la llama de inmediato y deja que el humo se propague mientras caminas por el entorno, repitiendo internamente o en voz alta: «Aquí es donde comienzo de nuevo».
  3. Después de unos momentos, deja que el humo se extinga solo o apágalo en la caracola.

Puedes llevar a cabo este ritual por toda tu casa o sobre una nueva adquisición que quieras impregnar de energía positiva antes de empezar a utilizarla. A nosotras nos gusta hacer esto con la ropa nueva, en especial con la que encontramos en tiendas de segunda mano, ya que han tenido toda una vida antes.

EL RITUAL DE INCIENSO PARA UNA SESIÓN DE TRABAJO PROFUNDA

  1. Las varitas de incienso son otra increíble herramienta herbal que puedes encontrar en las tiendas naturistas o esotéricas. Escoge una fragancia que te guste y enciéndela justo antes de que vayas a ponerte manos a la obra.
  2. Cuando la enciendas y apagues la llama, deja que el humo se escape y visualízate acabando la tarea que tienes por delante.
  3. Estimulada por el humo aromático, trabaja sin interrupciones hasta que la varita de incienso se haya consumido por completo.

Durante el proceso de escribir este libro, encender una varita de incienso se convirtió en una señal de que era hora de ponerse a trabajar. Hemos descubierto que resulta muy útil a primera hora de la mañana o durante la noche.

Aceites esenciales

El aroma es un mensajero poderoso, capaz de transportarnos a un tiempo y lugar totalmente distintos. La química cerebral es lo que permite ese viaje. Cuando inhalas un aroma, este viaja por la nariz hasta llegar al nervio olfativo del cerebro. Una vez que tu cerebro lo ha procesado, envía una señal a la amígdala y al hipocampo, las regiones que almacenan emociones y recuerdos. Las experiencias visuales, auditivas y táctiles no pasan por las mismas áreas del cerebro. Es por ello que los olores pueden desbloquear momentos que pensábamos que habíamos olvidado. De hecho, se ha descubierto que los recuerdos relacionados con los olores se remontan más atrás en el tiempo que los evocados por cualquiera de los otros sentidos9.

El aroma también puede cambiar la forma en que vivimos el momento presente. Cualquiera que haya estado en un sótano con mal olor y lleno de gente experimentó un alivio instantáneo con la primera bocanada de aire fresco al salir. Por eso no es de extrañar que la aromaterapia sea el tratamiento alternativo más popular para el estrés y la ansiedad en todo el mundo10.

Una de las formas más efectivas de calmarse a una misma con aromas es utilizando aceites esenciales. Estos se obtienen a partir de la extracción de los compuestos concentrados que están presentes en flores, hierbas, hojas, raíces y árboles. Estos compuestos son antisépticos, lo que significa que ayudan a prevenir la propagación de infecciones, y son los responsables de los aromas característicos de las plantas.

Extraerlos no es tarea fácil. Se necesitan sesenta mil flores de rosa para producir unos treinta mililitros de aceite esencial; las flores de jazmín deben ser recolectadas el primer día de su floración para conservar su poder aromático, y un árbol de sándalo debe tener al menos treinta años y medir casi diez metros de altura antes de que se pueda extraer su aceite11. Pero el resultado hace que todo el esfuerzo valga la pena. Los aceites esenciales son medicamentos naturales potentes que se pueden ingerir o aplicar en la piel, propagar por el aire o inhalar directamente del frasco. Pueden despertarnos y relajarnos, agudizar la mente y aliviar el dolor, y así convertirnos en poderosos alquimistas cada vez que destapamos el frasco.

La historia de los aceites esenciales

Hipócrates, el médico de la antigua Grecia conocido como «el padre de la medicina», lo expresó de manera simple y sabia con estas palabras: «El camino a la salud es tomar un baño aromático y recibir un masaje perfumado todos los días»12. Las culturas que aprovecharon las hierbas con fines medicinales también estaban a la vanguardia en cuanto a los aromas. Los aceites esenciales eran habituales en las prácticas ayurvédicas y la medicina china, y se mencionan en la Biblia más de doscientas veces13. Sin embargo, fueron los antiguos egipcios quienes perfeccionaron esta herramienta de sanación. Pusieron en práctica la famosa técnica del uso de incienso, mirra y sándalo para tratar diversas heridas y emplearon aceites esenciales para embalsamar cuerpos, y así crearon una conexión entre los difuntos y lo divino. Incluso, siglos después de las primeras excavaciones14, se han encontrado vestigios de lirio azul en cuerpos momificados. Hoy en día, algunos de estos aromas todavía nos resultan familiares y evocan festividades y tradiciones con sus intensos aromas florales.

Con el tiempo, ciertos olores han adquirido un significado romántico y espiritual. Pensemos en historias como la de Cleopatra atrayendo a Marco Antonio a su lecho con el aroma de las rosas, o los médicos europeos que quemaban incienso en las calles para protegerse de enfermedades y espíritus malignos durante la peste bubónica15.

Los diversos usos de los aromas se han documentado en libros sobre aceites esenciales, siendo uno de los más antiguos Complete Herbal, que fue publicado en 1653. La información que había sobre los aceites esenciales no era novedosa en aquella época, lo que sugiere que tenemos acceso a algunos de los sanadores más antiguos. En referencia a las propiedades de los aceites esenciales de las flores de manzanilla, el autor Nicholas Culpeper escribió: «Es un conocimiento tan difundido que describirlo sería una pérdida de tiempo y de trabajo»16.


Un aceite para cada estado de ánimo

Hoy en día, circulan más de trescientos aceites esenciales y cada uno tiene propiedades únicas. A continuación mencionamos algunos de los más destacados para cada estado de ánimo17:

Si necesitas calmar una mente acelerada:

Si necesitas
energía:

Bergamota

Jazmín

Sándalo

Ylang-ylang

Cajeput

Albahaca dulce

Cítricos (pomelo, limón, lima, mandarina, etc.)

Menta y hierbabuena

Si necesitas concentrarte:

Si necesitas dormir:

Pino

Menta

Romero

Cedro

Lavanda

Vetiver

Manzanilla romana

Incienso

Encontrar el aceite esencial adecuado para ti

Puede parecer obvio, pero antes de invertir en un aceite esencial, asegúrate de que realmente te gusta su aroma. ¡No lo escojas solo por sus propiedades curativas! Así como ciertos olores pueden transportarnos a lugares felices al instante, otros pueden acabar con nuestro estado de ánimo.

Otro factor a tener en cuenta es la gran diferencia de precio entre los aceites, ya que algunos son mucho más difíciles de extraer. Treinta mililitros de aceite de rosa otto se venden por cuatrocientos dólares como mínimo, mientras que aromas como la lavanda, el árbol de té y los cítricos te costarán solo unos pocos dólares. Si estás comenzando, puede que sea una buena idea empezar con aromas más económicos y luego avanzar hacia los más lujosos.

Más allá del tipo de aceite que estés buscando, asegúrate de que sea de buena calidad. Algunos fabricantes diluyen sus aceites o los crean en un laboratorio en lugar de extraerlos de las plantas y, aunque estas mezclas pueden oler igual de bien, no tienen los mismos beneficios. A veces, el olfato por sí solo no puede distinguir lo auténtico de lo falso, por lo tanto, es recomendable investigar al fabricante18. Si en la etiqueta se encuentran tanto el nombre común como el nombre del aceite en latín, su lugar de origen y una certificación de producto orgánico, es una buena señal. No prestes atención a la «calidad» del aceite, ya que no está regulada; en su lugar, siempre que puedas, elige aceites de pequeños productores.

Guárdalos en un lugar fresco y seco para que conserven su eficacia durante más tiempo, y dentro de recipientes de vidrio, no de plástico. Los aceites pueden extraer los productos químicos del plástico, lo que los hace menos fragantes y en algunos casos hasta peligrosos.


Acerca de la aplicación segura

Cómo utilizar los aceites esenciales

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos de nuestros rituales aromáticos favoritos, que puedes hacer en cinco minutos. Anímate a probarlos para sentirte cómoda con esta herramienta antes de llevar a cabo rituales estacionales más complejos.

UN RITUAL DE AROMATERAPIA PARA ENERGIZARTE

  1. Combina varios aromas energizantes (nos encanta el limón y la lima) en dos frascos de vidrio hasta que obtengas unas mezclas que te resulten agradables.
  2. Coloca uno de los frascos en tu escritorio o donde suelas trabajar. Pon el otro en tu bolso o en lo que lleves contigo durante el día.
  3. Cuando sientas que te falta energía, inhala durante unos segundos por cada fosa nasal. Cierra los ojos y visualiza cómo revitalizan los aromas ambos lados de tu cerebro. También es un gran recurso cuando viajas.

Emma se ha ganado la reputación de ser una fanática del aceite de limón. Siempre lleva un frasco al trabajo y lo comparte con cualquiera que parezca estresado, agotado o decaído.

RITUAL DE MEZCLA DE BÁLSAMO PARA GOZAR DE BUENA SALUD

  1. Diluye unas gotas de aceite de eucalipto en un aceite portador y mézclalas a fuego lento con cera de abejas hasta que esta se derrita.
  2. Vierte la mezcla en un recipiente de vidrio con una abertura amplia y deja que se enfríe y endurezca.
  3. Si alguna vez te sientes congestionada, con dolor de cabeza o con malestar general antes de acostarte, masajea suavemente tu pecho y frente con el bálsamo (recuerda hacer antes una prueba en una pequeña zona de piel). Respira profundamente y visualiza cómo alivia el aroma cualquier molestia de tu cuerpo.

Este remedio nos recuerda al bálsamo Vicks VapoRub, que nuestros padres solían ponernos cuando éramos niñas, por lo que nos da una reconfortante sensación de familiaridad.

Astrología

La astrología, una de las tradiciones más antiguas de la humanidad para entender el cielo, parece tener hoy más influencia que nunca.

Para algunas personas se trata de simples horóscopos: predicciones diarias, semanales y mensuales que prometen brindar cierta previsibilidad en un mundo cada vez más caótico. Escuchar lo que el zodíaco tiene que decir sobre las tendencias de nuestro signo nos ofrece una explicación para aquellas cosas que no se pueden expresar fácilmente con palabras.

Pero si solo exploras la astrología para averiguar cómo será tu semana o lo compatible que eres con tu pareja, no estás aprovechando al máximo esta herramienta. Leer tu carta natal, que muestra la posición de los planetas cuando diste tu primer aliento, es una inmersión mucho más profunda en las fuerzas cósmicas que influyen en tu vida. Esta carta va más allá de tu signo solar (el que se usa en los horóscopos tradicionales) y proporciona otros pequeños datos sobre tu carácter.

En pocas palabras, la astrología es una herramienta que te invita a reflexionar sobre ti misma y tu espíritu. Te obliga a considerar cosas como la forma en que procesas tus emociones, por qué puedes sentir una atracción inconsciente hacia ciertas personas y qué te hace falta para sentirte realizada. A pesar de su importancia, a veces no nos tomamos el tiempo de pensar en estos rasgos porque estamos inmersas en nuestra ajetreada rutina diaria. ¿Cuándo fue la última vez que un médico te pidió que calificaras tu inteligencia emocional en una escala del 1 al 10 o te pidieron que describas tu última corazonada en una solicitud de empleo?

Desde una perspectiva práctica, mirar tu vida a través de la astrología puede proporcionarte información sobre tu personalidad que no hubieras descubierto de otra forma. Y, desde una perspectiva más simbólica, leer tu carta natal te recuerda que la experiencia humana en parte está influenciada por el cosmos. Además, hay algo reconfortante en su simplicidad: la idea de que, en tiempos de paz o guerra, de caos o calma, la humanidad puede encajar en doce pequeñas categorías.

La historia de la Astrología

Los orígenes de la astrología se remontan a la antigua Babilonia, donde los adivinos observaban patrones en la naturaleza para tratar de entender lo que sucedía a su alrededor. Operaban bajo la idea de que los dioses dejaban pistas sobre el futuro en lugares donde sabían que los seres humanos podrían encontrarlas20. Esta filosofía inspiró a los griegos a crear el zodíaco tal como lo conocemos hoy en día, al que llamaron zodiakos kyklos o «círculo de animales»21. Luego, asignaron a cada uno de los doce signos unos animales y dioses concretos. Por ejemplo, Aries adoptó la mascota de un carnero, en referencia al mito de un carnero de oro que salvó a dos niños de ser sacrificados. Leo se convirtió en un león, un animal que Hércules tuvo que vencer para expiar sus errores.

La filosofía pitagórica del griego Pitágoras también influyó en la astrología al considerar que cada ser humano es un microcosmos del universo y que nuestros cuerpos son simples vehículos a través de los cuales se manifestaba la energía cósmica22. Esta idea se reflejó en la literatura y el arte durante los siglos posteriores, como en La divina comedia de Dante, un poema épico del siglo xiv que muestra el viaje del alma a través de los planetas hasta llegar al Paraíso23.

El auge de la práctica astrológica tuvo lugar en la Europa renacentista24, cuando se escribieron libros de texto sobre esta disciplina, los profesores la enseñaban en las universidades y el rey Enrique VII inició la moda de que la realeza consultara a astrólogos cortesanos para planificar estrategias25. A lo largo de la historia, especialmente en épocas de conflictos y guerras, los adivinos eran buscados por sus profecías. Sin embargo, con el tiempo, la falta de apoyo de la comunidad científica y la religiosa (si las estrellas eran las encargadas de dictar el futuro, ¿dónde encajaba la figura de Dios?) hizo que la astrología cayera en el olvido.

La astrología moderna, tal como la conocemos hoy en día, comenzó a tomar forma en la década de 1930 con un periodista británico llamado R. H. Naylor. Este siguió los pasos de un anciano chamán y astrólogo conocido como Cheiro, que solía leer las palmas de las manos de personas famosas (como Mark Twain, Grover Cleveland y Winston Churchill, según los rumores). Naylor llevó el conocimiento que adquirió en esta experiencia al primer horóscopo impreso en un periódico, The Sunday Express26, y que fue seguido por la nueva integrante de la familia real británica, la princesa Margaret. Lectores de todo el mundo leyeron el horóscopo, lo que llevó a Naylor a dedicar toda una columna a la astrología. Dice la leyenda que se volvió muy famoso después de que uno de sus artículos predijera con precisión el accidente de un avión británico. Como resultado, otras publicaciones buscaron imitar su éxito con sus propios horóscopos.

Cómo interpretar tu carta natal

A simple vista, tu carta natal puede parecer un conjunto desordenado de formas, símbolos y números. Aunque podría escribirse un libro entero sobre cómo interpretarla (de hecho, existen muchos), aquí tienes una breve guía para ayudarte a entenderla.

  1. Tu big three: tres de los indicadores más importantes de tu personalidad son los signos zodiacales en los que caen tu sol, luna y ascendente. El signo solar, el más conocido en la astrología occidental, representa tu identidad y tu necesidad externa de validación. El signo lunar, en cambio, se refiere a tu subconsciente, a tu verdadera naturaleza, y da origen a tus necesidades y emociones más profundas. Su energía femenina equilibra la energía masculina de tu signo solar y constituye la raíz interna de tu personalidad. Tu ascendente, que es la constelación que estaba en el horizonte en el momento de tu nacimiento, simboliza cómo te presentas a los demás y cómo estás evolucionando hacia la misión de tu vida.
  2. Los planetas: los ocho planetas que rodean la Tierra (sí, Plutón aún cuenta en astrología) también se ubican en signos en tu carta natal. Cada uno de estos planetas influye en cómo experimentas diferentes aspectos de la vida, como la comunicación (Mercurio), el manejo del poder (Plutón) y cumplir tu propósito (Saturno). Cada uno de estos planetas está relacionado con un signo zodiacal en particular. Tu «planeta regente» es el que se asocia con tu signo ascendente. Por ejemplo, si tu ascendente es Virgo, tu planeta regente es Mercurio, y es probable que los movimientos de Mercurio tengan un impacto más importante en tu vida.
  3. Nodos norte y sur: los nodos norte y sur de la luna (los puntos donde entra en un eclipse) se encuentran uno frente al otro en tu carta natal. El nodo norte representa tu destino, mientras que el nodo sur refleja los patrones menos favorables que buscas dejar atrás, es decir, aquellos que deseas superar.
  4. Las casas: tu carta natal se divide en doce casas, y cada una de ellas es una porción del pastel astrológico. Las casas en las que se encontraban tu sol, luna, planetas y nodos cuando naciste dictan dónde es probable que se manifiesten sus cualidades. Hay una casa para la familia, el hogar, las finanzas, etc. Se construyen unas sobre otras hasta converger en la duodécima casa y luego se desglosan una vez más. Entonces, si tu signo solar es Leo y cae en la quinta casa (la cual se relaciona con el romance), es probable que muestres tu naturaleza creativa y curiosa principalmente en tus relaciones. Si tu nodo norte está en la tercera casa (comunicación), es posible que tu destino sea convertirte en una respetada autora.

A continuación encontrarás un desglose de todas las casas:

1.

Identidad, el «yo», bienestar y personalidad.

2.

Autoestima, cómo te valoras a ti misma, ingreso de dinero.

3.

Autoexpresión, comunicación, primeras etapas del desarrollo durante la infancia.

4.

Seguridad y protección en el mundo, familia.

5.

Cocreación, romance, diversión, creatividad, hijos.

6.

Salud, estabilidad, rutinas diarias, trabajo cotidiano.

7.

Relaciones contractuales como el matrimonio, relaciones comerciales y contratos.

8.

Transformación, recursos compartidos.

9.

Religión, cosmovisión, educación superior, viajes internacionales.

10.

Prestigio, estima, cómo te ven y respetan, éxito profesional.

11.

Esperanzas y deseos, manifestación, grupos y amigos.

12.

Desintegrarse para reinventarse, espiritualidad, eliminar lo inconsciente.

Y luego están las características de cada signo. Para nosotras, tiene mucho sentido comparar la energía de un signo con las estaciones en el hemisferio norte. Todos estamos familiarizados con los sentimientos que evocan los ciclos del año y no resulta difícil imaginar que nacemos bajo la influencia de las características de la estación en la que venimos al mundo.

Aries (del 21 de marzo al 21 de abril, fuego): Aries, el primer signo del zodiaco, es un líder intrépido. Su estación coincide con el inicio de la primavera, cuando el mundo comienza a despertar con la energía característica del carnero. Al igual que las primeras hojas que reaparecen en los árboles, este signo es llamativo, colorido y lleno de vitalidad.

Tauro (del 20 de abril al 20 de mayo, tierra): la estación de Tauro implica apreciar las nuevas abundancias de la primavera. Este signo terrenal está conectado a la tierra y agradecido por las cosas buenas de la vida. Piensa en pícnics, largos paseos al aire libre y la belleza de las flores frescas.

Géminis (del 21 de mayo al 20 de junio, aire): las personas de Géminis son grandes comunicadoras y las mueve la curiosidad por todo lo que les rodea. Viajarán cortas y largas distancias en busca de nuevas historias y experiencias, por lo que tiene sentido que este signo caiga durante el inicio de las vacaciones de verano.

Cáncer (del 21 de junio al 22 de julio, agua): Cáncer llega al comienzo del verano, con una energía profundamente emocional, intuitiva y sentimental. Este signo refleja el anhelo de sentirse en casa, una sensación que suele surgir durante las vacaciones, la necesidad de encontrar familiaridad en lugares desconocidos.

Leo (del 23 de julio al 22 de agosto, fuego): cuando llega el apogeo del verano, Leo emerge como el creativo destacado del zodiaco. Este expresivo signo de fuego es un líder audaz y lo alimenta el calor y la energía de la estación.

Virgo (23 de agosto al 22 de septiembre, tierra): a medida que el verano llega a su fin y todos volvemos a la sobriedad tras su opulencia, la energía de Virgo nos ayuda a poner nuestra vida en orden. Este signo, el más organizado y detallista del zodiaco, anuncia el regreso a la escuela y al trabajo.

Libra (23 de septiembre al 22 de octubre, aire): Libra, representado por las balanzas, siempre busca la equidad y la justicia. A medida que nos adentramos en el otoño, aparecen temas relacionados al equilibrio. Comenzamos a vivir la vida tanto en el interior como en el exterior, sumergimos los pies en la introspección del invierno y conservamos parte de la energía orientada hacia el exterior, propia del verano.

Escorpio (23 de octubre al 21 de noviembre, agua): la estación de Escorpio marca el comienzo del clima más frío y de noches más largas. Este signo está relacionado con los misterios y no teme explorar temas más oscuros como la muerte, la pérdida y las luchas de poder.

Sagitario (22 de noviembre al 21 de diciembre, fuego): Sagitario es un signo de soñadores. Cuando abrazamos la oscuridad del otoño, este signo nos invita a salir y explorarla, por lo que es apropiado que caiga durante épocas de reuniones sociales como las fiestas navideñas.

Capricornio (22 de diciembre al 19 de enero, tierra): Capricornio es el sabio y práctico hacedor del zodiaco. La estación de Capricornio coincide con el año nuevo del calendario, lo que nos ayuda a establecer y cumplir nuestras resoluciones.

Acuario (20 de enero al 18 de febrero, aire): a medida que nos acercamos al final del zodiaco, Acuario emerge como el gran unificador. Reúne a todos los signos que le preceden para que podamos avanzar hacia algo más grande como un todo colectivo.

Piscis (19 de febrero al 20 de marzo, agua): el último signo del zodiaco, Piscis, trae consigo una energía reflexiva y esotérica. Marca el final, pero también el comienzo, y nos lleva hacia una nueva estación y oportunidad para recorrer las expansiones del zodiaco.

Hacer que la astrología funcione a tu favor

Creemos que la astrología es una buena forma de explorar tu energía inherente y tus preferencias. Pero también sabemos que el libre albedrío es auténtico. Si bien siempre es divertido leer sobre lo que podría estar «escrito en las estrellas» para nosotros, a fin de cuentas, la dirección de nuestra vida está en gran medida moldeada por nuestro entorno y experiencias. La mayoría de los astrólogos te dirán lo mismo. Esto explica por qué los gemelos pueden tener cartas natales idénticas pero personalidades distintas y por qué aquellos nacidos durante la misma época del año pueden tener experiencias de vida tan diferentes.

Te recomendamos utilizar la astrología como una herramienta para reflexionar sobre lo que te hace ser tú misma: deseos, necesidades, anhelos, peculiaridades y ocurrencias que permanecen constantes cuando todo a tu alrededor cambia.

Cómo utilizar la astrología

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos de nuestros rituales zodiacales favoritos que puedes hacer en cinco minutos. Anímate a probarlos para sentirte cómoda con esta herramienta antes de llevar a cabo rituales estacionales más complejos.

UN RITUAL DE LECTURA ASTROLÓGICA PARA ENCONTRAR EQUILIBRIO

  1. Echa un vistazo a los big three de tu carta natal: tu signo solar, lunar y ascendente, y observa a qué elemento pertenecen.
  2. Luego, anota los elementos que falten en tu carta. ¿Tu sol, tu luna y tu ascendente son signos de fuego principalmente, sin ningún rastro de agua? ¿Tienes mucho de tierra pero nada de aire?
  3. De ahora en adelante, prueba a incorporar más actividades que correspondan al elemento que te falta y observa si se llenan esos vacíos.
  1. Agua: mira una película que te haga llorar.
  2. Aire: escribe una carta a alguien a quien ames.
  3. Tierra: sal descalza a la naturaleza.
  4. Fuego: prueba un nuevo tipo de ejercicio.

Por ejemplo, Emma tiene el sol en Géminis, un signo de aire; la luna en Leo, un signo de fuego, y ascendente en Virgo, un signo de tierra. La ausencia de agua en su carta indica que podría necesitar ayuda para lidiar y procesar sus emociones. Pero está trabajando en eso. Lindsay tiene el sol en Leo, pero solo durante veintidós minutos, justo en el límite entre Cáncer y Leo. Con su luna en Cáncer y ascendente en Escorpio, su carta está llena de signos de fuego y agua, que suelen chocar entre sí. Esto le permite ser una persona vivaz, pero es fácil que pierda el equilibrio entre uno y otro. Practicar yoga con regularidad la ayuda a mantenerse centrada.

UN RITUAL DE LECTURA ASTROLÓGICA PARA EXPRESARSE

  1. En una noche de luna llena, reflexiona sobre el modo de comunicación preferido por tu signo lunar. ¿Eres una géminis charlatana? ¿Una leo aparatosa?
  2. Adapta tu ritual de luna llena (más detalles en la página 80) a tu astrología y observa si cambia la forma en que te conectas con la energía de la noche.

Tarot

Para aquellos que no están familiarizados, las cartas de tarot pueden evocar la imagen de una lectura psíquica en una habitación misteriosa iluminada por velas, incienso y, tal vez, una bola de cristal. Sin embargo, el tarot es mucho más que una herramienta de adivinación situada en los márgenes de lo místico. La baraja de setenta y ocho cartas te invita a conectarte con tu intuición y conocimiento interno. Es como tener a tu lado a una amiga sabia o un ser querido en quien puedes confiar plenamente, y que te alienta a confiar en ti misma por encima de todo.

La historia del tarot

Hace mucho tiempo, las cartas del tarot se usaban principalmente para el entretenimiento. La primera versión del tarot llegó en el siglo xv desde Italia, cuando los artistas crearon un nuevo tipo de mazo para juegos de cartas. A medida que pasaba el tiempo, las personas adineradas comenzaron a encargar mazos especiales con imágenes más detalladas y realistas, a menudo con lujosos fondos dorados. Estas pequeñas obras de arte renacentistas sirvieron como base para el mazo que usamos hoy en día y que consta de veintidós Arcanos Mayores (que representan momentos espirituales y simbólicos de gran relevancia, como el sol o el diablo) y cincuenta y seis Arcanos Menores (que ofrecen una visión más detallada de la vida cotidiana).

Conforme las imágenes y la terminología se volvían más sofisticadas, las cartas comenzaron a adquirir un mayor significado espiritual. El tarot llegó a un punto crucial cuando Arthur Edward Waite, poeta británico y erudito, pidió a la artista Pamela Colman Smith que ilustrara un mazo para acompañar su libro La clave ilustrada del tarot en 190927. El resultado fue el mazo Rider-Waite, una colección de cartas que conseguían una interesante combinación entre realismo y elementos místicos. En estas cartas, se representaba a la realeza dentro de paisajes místicos. Este mazo fue el primero en ser producido en masa en inglés y se convirtió en un modelo para la mayoría de las cartas que pueden encontrarse actualmente en el mercado.

Encontrar el mazo adecuado para ti

Los tradicionalistas pueden sentir la tentación de comenzar su viaje con el clásico mazo Rider-Waite, pero ten en cuenta que estas cartas pueden tener interpretaciones un tanto oscuras. Aunque en el tarot no existen cartas inherentemente «malas», sacar al diablo con cuernos y fuego cuando apenas estás empezando puede resultar desalentador, por lo que recomendamos comenzar con un mazo que sea un poco más suave, especialmente si tiendes a preocuparte. Por fortuna, hay mazos de tarot y oráculos para todo tipo de gustos. Los mazos de oráculo se utilizan de la misma manera que el tarot, pero tienen temáticas diferentes y es posible que no contengan exactamente setenta y ocho cartas. Algunos están relacionados con la época en que se crearon (como el Morgan-Greer, que es una colorida representación de la década de 1970); otros están centrados en las personas que pueden utilizarlos (como el Dust II Onyx, que presenta a mujeres de color en cada carta), y algunos se enfocan en una estética particular (como el Oráculo Minimalista, que es una interpretación de las detalladas escenas del tarot representadas como formas de colores).

Existe una antigua superstición que dice que, en lugar de elegir tu propio mazo, debes esperar a que uno te encuentre: alguien te lo regala, lo encuentras por accidente o llega a tu vida de alguna manera que está fuera de tu control. Si bien hay algo a favor de considerar tu mazo como un regalo del universo, hay muchas personas que se lo compran, así que no dudes en hacerlo cuando sientas que es el momento adecuado. Cuando busques un mazo que conecte contigo, deja que la intuición sea tu guía. ¿Qué cartas te llaman la atención de inmediato? Dado que tu mazo se convertirá en una herramienta muy personal y sagrada, es mejor optar por uno con imágenes que realmente te impacten, incluso si no puedes explicarte el porqué.

Cuando obtengas un mazo nuevo, debes utilizar salvia para limpiar su energía, tal como lo hiciste con tus cristales. Mientras dejas pasar el humo por tus cartas, programa su energía para que se conecten contigo y tu vida. Tómalas entre tus manos y visualiza que tu contacto está personalizando aún más los mensajes que tienen para ti. Luego, baraja las cartas a conciencia, familiarízate con la sensación de tenerlas en tus manos y prepárate para tu primera tirada.

Siéntate y elige una carta, cualquiera de ellas. Primero, colócala boca abajo en una superficie plana; luego, dale la vuelta. Si sacas una carta que no te satisface, no la devuelvas al mazo de inmediato. Consulta el libro de guía que viene con las cartas y lee lo que dice sobre la carta que has elegido. El poder radica en colocar cada carta en el contexto de tu vida, así que reflexiona sobre lo que podría estar tratando de comunicarte en ese momento. Confía en tu intuición. Toma un bolígrafo y deja que las palabras fluyan en una página si eso te resulta útil. No te detengas demasiado en ninguna carta. La intuición se pierde con el tiempo y tu primera impresión es probablemente la más valiosa, sin importar lo «extraña» que te parezca. De hecho, cuanto más extraña, mejor. Las personas tienden a seguir la misma lógica una y otra vez y, en su mayoría, terminan en el mismo lugar. El propósito de este ejercicio es buscar senderos no trillados, aquellos que parecen extraños, misteriosos y hasta un poco intimidantes. Son las interpretaciones de las cartas que emergen desde lo más profundo de tu ser las que están llenas de espíritu, no las que se producen en masa en la mente racional.

En cuanto al momento adecuado para realizar una tirada, eso depende totalmente de ti. Las reglas del tarot son flexibles y, en esencia, te dicen que debes respetar y confiar en las cartas. Puedes sacar una carta cada mañana o hacer una tirada de tres cartas una vez al mes. Puedes escribir sobre una tirada en un diario durante horas u olvidarte de ella en cinco minutos. Nosotras solemos recurrir al mazo cuando nos encontramos en un punto muerto o no estamos seguras de cómo proceder con un problema; lo vemos como si fuera una amiga de confianza que nos da un consejo que, de otra manera, no hubiéramos considerado. De nuevo, todo se basa en la intuición. Si sientes de manera distintiva que falta algo, como si hubiera un mensaje esperando ser revelado pero aún no ha salido a la luz, prueba con el tarot para obtener claridad. Si estás atravesando un período de transición y no sabes qué se necesita para llegar al otro lado sin contratiempos, toma una carta y descubre lo que te ofrece. Al igual que con la astrología, consideramos que el tarot es una vía para acceder a pensamientos frescos y únicos. Sin embargo, mientras que la astrología se enfoca más en tu mundo interior, el tarot se orienta hacia el exterior y está orientado a la acción.

Cuando te acostumbres a utilizar tu mazo regularmente, algo prácticamente mágico empezará a ocurrir. Las cartas que saques comenzarán a hablar cada vez más fuerte y claro, volviéndose de alguna manera más valiosas en ese momento.

Te harán sonreír, asentir con la cabeza o sacudirla en señal de comprensión y confianza. Este poder tiene dos facetas: por un lado, te convertirás en un ser más intuitivo, capaz de encontrar y seguir tu voz interior y, tal vez, solo tal vez, tus cartas también te estarán conociendo a ti.

Cómo utilizar el tarot

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos de nuestros rituales favoritos de tarot que puedes hacer en cinco minutos. Anímate a probarlos para sentirte cómoda con esta herramienta antes de llevar a cabo rituales estacionales más complejos.

TIRADA DE UNA SOLA CARTA PARA OBTENER APOYO

  1. Al comenzar un nuevo capítulo en la vida, sigue tu intuición y elige una sola carta. Esto puede ser al inicio de un nuevo trabajo, la mudanza a otra ciudad o incluso con la llegada de una luna nueva.
  2. Reflexiona sobre el mensaje que esta carta podría estar transmitiéndote y colócala en tu billetera u otro lugar donde sepas que la verás a diario.

Por ejemplo, cuando Emma comenzó un nuevo trabajo, seleccionó una carta de un mazo de oráculo que mostraba a una mujer caminando bajo la luna y llevaba la inscripción «Confío en los misterios de la vida». Cada vez que la encuentra en su billetera, le sirve como recordatorio para ser más comprensiva consigo misma y confiar en que el universo la apoya.

RITUAL DE DIARIO PARA LA REFLEXIÓN

  1. Al despertar por la mañana, toma una carta que represente lo que el día tiene reservado para ti.
  2. Configura un temporizador de tres minutos y comienza a escribir en tu diario de forma libre y espontánea, basándote en lo que la carta te sugiere.
  3. Más tarde, antes de acostarte, vuelve a leer lo que escribiste por la mañana y reflexiona sobre si la carta tenía razón.

Siempre nos han inspirado aquellas personas que convierten este ritual en parte de su rutina diaria para establecer el tono de su día.

Respiración consciente y meditación

Conectarse con la respiración es una herramienta para el bienestar que se puede utilizar en cualquier momento. En yoga, a la respiración consciente la llamamos pranayama (también recibe el nombre de «pranayam» en yoga o meditación, que es una versión abreviada). En las líneas yóguicas, el pranayama es uno de los ocho miembros del yoga Ashtanga según los Yoga Sutras de Patanjali, el antiguo texto que se referencia como la base de nuestra moderna práctica de yoga (verso 2:29). Durante mucho tiempo, ha sido un componente fundamental en la práctica del yoga, y en la actualidad su valor terapéutico está siendo reconocido tanto por la comunidad científica como por personas que no están vinculadas al yoga necesariamente.

La respiración es la única función corporal en la que podemos participar de forma activa; la digestión, la desintoxicación y nuestros latidos cardíacos son automáticos. Por lo tanto, la respiración se considera el punto donde se encuentran conciencia y subconsciente.

Aunque la respiración consciente y la meditación no son idénticas, están estrechamente relacionadas. El pranayama puede considerarse una forma de meditación por sí misma. En esencia, manipular la respiración mediante ejercicios y patrones es un camino rápido hacia un estado meditativo. Tanto la práctica regular de pranayama como la meditación tienen como objetivo cambiar nuestro estado de ser, y esto se suele conseguir en ambas disciplinas.

Por el contrario, la meditación ha adquirido múltiples significados y varía según la persona. Para algunos, actividades como correr, pintar o incluso tareas triviales como envolver regalos pueden ser meditativas. Para aquellos que desean una práctica más estructurada y autodidacta, hay diversas técnicas de meditación, siendo la meditación de atención plena o mindfulness la que más se utiliza en la actualidad. Este tipo de meditación implica sentarse en silencio, prestar atención a los pensamientos y utilizar los sentidos para tomar conciencia de lo que está ocurriendo en el momento presente.

En los últimos años, se ha producido un aumento notable en el interés por el yoga kundalini, que incorpora la respiración y la meditación como partes fundamentales de la práctica, pero también puedes incorporar la respiración en cualquier tipo de yoga. De hecho, a Lindsay le gusta hacer una práctica de pranayama antes de su meditación matutina diaria. Siendo alguien que padece asma, disfruta de la sensación del aire circulando por sus pulmones y se beneficia de la claridad mental que conlleva un aumento del flujo de aire.

Ya sea que estés buscando apoyo en un momento de cambio o complementar la meditación, el yoga, la escritura de un diario u otros cuidados personales, la respiración es una aliada fundamental.

La ciencia de la respiración

Gracias a la tecnología moderna, los científicos han podido entender por qué las personas vuelven a estas prácticas una y otra vez. Por ejemplo, cuando se combina la respiración consciente con ejercicios para fortalecer el abdomen, se ayuda a superar los obstáculos. Un estudio a pequeña escala investigó la efectividad de los laxantes28 frente a una terapia combinada de respiración consciente, ejercicios abdominales y laxantes en un grupo de personas que sufrían estreñimiento crónico. Los resultados mostraron que aquellos que practicaban la respiración diafragmática tenían movimientos intestinales más frecuentes que quienes solo tomaban laxantes.

Otro estudio realizado en la década de 1990 demostró que la respiración consciente puede ser un tratamiento terapéutico para personas con trastornos del equilibrio, porque les da una sensación de estabilidad29. Se les pidió a tres grupos de personas que siguieran los movimientos de un gráfico que cambiaba constantemente y se proyectaba en una pantalla. Quienes tenían experiencia con la respiración consciente, tanto principiantes como practicantes avanzados, superaron a los que no la tenían.

Una completa investigación académica sobre una técnica de respiración consciente llamada «Sudarshan Kriya yoga» reveló que este enfoque es un «complemento accesible y de bajo riesgo para el tratamiento del estrés, la ansiedad, el trastorno de estrés postraumático, la depresión, condiciones médicas relacionadas con el estrés, el abuso de sustancias y la rehabilitación de personas que han cometido delitos»30.

La respiración holotrópica, creada por el Dr. Stan Grof, es una técnica que involucra el diafragma en respiraciones profundas y rápidas para mejorar la oxigenación del sistema respiratorio. Ha demostrado ser beneficiosa para pacientes que afrontan problemas de salud mental especialmente complejos cuando la psicoterapia no aporta resultados exitosos31. Otras investigaciones han establecido la conexión entre una práctica regular de respiración consciente y un aumento de los rasgos positivos del carácter, una disminución de los negativos y una mejora general en la autoconciencia32. Además, la práctica de respiración consciente en sus diversas formas se utiliza en programas de recuperación de adicciones en todo el mundo.

Cómo utilizar la respiración consciente y la meditación

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos rituales de respiración consciente que puedes hacer en cualquier momento y en cualquier lugar. Encontrarás más de este tipo en las siguientes páginas.

SITALI: UNA RESPIRACIÓN REFRESCANTE

Sitali es una técnica calmante y refrescante que puedes utilizar cuando hace calor o te sientes ansiosa. Te llevará de dos a tres minutos.

  1. Encuentra un asiento cómodo y comienza a respirar con normalidad mientras te concentras. Luego, enrolla la lengua, sácala y rodéala con los labios.
  2. Respira solo a través de tu lengua, sintiendo cómo se evapora el aire que pasa por ella, lo cual aporta una agradable sensación de frescura. Continúa así, con una inhalación y exhalación de tres tiempos.
  3. Vuelve a respirar normal para acabar.

RESPIRACIÓN BHASTRIKA (O DEL FUELLE): UNA RESPIRACIÓN QUE DA CALOR

La respiración Bhastrika o respiración del fuelle genera calor en el cuerpo. Si necesitas un reinicio, sentir algo de calor en los fríos meses de invierno o conseguir claridad mental, prueba la respiración del fuelle.

  1. Encuentra un asiento cómodo y respira con normalidad mientras te concentras. Comienza a respirar a través del diafragma, dilata el abdomen en la inhalación y lleva el ombligo hacia la columna en la exhalación.
  2. Respira solo por la nariz, haciendo que tus inhalaciones y exhalaciones sean más vigorosas y de igual duración. Respira diez veces seguidas.
  3. Luego, vuelve a respirar normal y realiza una ronda adicional, aumentando la cantidad si lo deseas.

La meditación y la respiración consciente son prácticas acumulativas. Siempre es mejor hacer una práctica breve que prescindir de ella. Con constancia y disciplina, la combinación resulta transformadora.

La luna y el sol

Emma recuerda la primera vez que se dio cuenta de que todos vivimos bajo el mismo cielo. Cuando era joven, pensaba que el sol, la luna, las estrellas y los planetas la seguían solo a ella; eran como compañeros constantes en su patio trasero, pasajeros en los largos viajes en coche con su familia, algo que siempre podía encontrar, al igual que ellos siempre la encontraban a ella. Luego le dijeron que el cielo era compartido y no solo suyo, que alguien a miles de kilómetros de distancia podría estar mirando el mismo sol y la misma luna. Tomar conciencia de que sus fieles acompañantes también visitaban a todos los demás la sorprendió. Esperamos que, tras la sorpresa inicial, se haya sentido feliz de saberlo.

¿No es asombroso que la luna desaparezca cada mañana en el cielo, solo para aparecer más tarde? ¿O que el sol salga todas las mañanas, inunde la tierra de luz y coloree todo después de una noche en blanco y negro? Aunque en esos momentos pueda parecer que el mundo tal como lo conocemos ha llegado a su fin, el sol de siempre vuelve a salir al día siguiente y nos recuerda que el amanecer siempre nos alcanza, que el tiempo es constante y cíclico. La luna y el sol son fuerzas mágicas, espirituales y energéticas que todos podemos ver todos los días y, sin embargo, nos hemos vuelto indiferentes a su grandeza.

Solo se necesita un momento para sentir realmente al sol y a la luna, y celebrar su presencia como lo haría un niño. Al hacerlo, podemos salir de nosotras mismas y maravillarnos ante el mundo que nos rodea.

La historia del cielo

Remontarnos en el tiempo para rastrear el origen de la Luna y el Sol lleva su tiempo. Actualmente, los científicos estiman que el Sol se formó hace unos 4600 millones de años, cuando una nube giratoria de gas y polvo colapsó y se condensó en un objeto de una energía y fuerza sin igual33. Su tamaño es tan colosal que cabrían un millón de Tierras en su interior; su superficie alcanza los 5505 °C y se necesitarían cien mil millones de toneladas de dinamita por segundo para igualar su energía. Aunque parece una fuente de luz infinita, el Sol tal y como lo conocemos acabará dentro de cinco mil millones de años, cuando pierda sus capas exteriores y su núcleo se enfríe y colapse en una enana negra, una región invisible definida por su vacío.

Después del Sol, llegó la Luna. De vez en cuando aparecen nuevas teorías sobre su formación, pero la más popular sostiene que la Tierra chocó con otro planeta y los escombros resultantes de la colisión formaron el satélite. Esto podría explicar por qué la Luna y la Tierra son similares, pero no idénticas, en cuanto a su composición.

La Luna parece cambiar de forma en el cielo nocturno por la manera en que la luz del sol la ilumina. En una luna llena, la luna entera está iluminada, mientras que en una luna nueva, la Tierra se encuentra entre la Luna y el Sol, y eso hace que la sombra de nuestro planeta haga que la luna casi desaparezca. Mientras tanto, la Luna orbita alrededor de la Tierra y cambia de forma a medida que atraviesa esta sombra, en un ciclo de crecimiento y decrecimiento. Dado que el campo gravitatorio de la Luna siempre se encuentra en una danza con el de la Tierra, ejerce fuerzas de atracción y repulsión sobre el agua, creando así nuestras mareas.

A lo largo de la historia, el horario constante del cielo ha marcado nuestros propios calendarios. La Luna completa su órbita cada veintinueve días y medio, y esta fue la razón original de la duración de nuestros meses. (De hecho, las palabras «luna» y «mes» tienen raíces similares). El Sol y la Luna eran nuestros relojes antes de que los fabricáramos, así como las fuerzas que nuestros antepasados seguían para sembrar, cosechar y cazar, es decir, para sobrevivir.

A lo largo del tiempo, algunos también creyeron que la luna llena enviaba mensajes de mal augurio. El mito de que la luna llena podía llevarnos a la locura ha existido desde la diosa romana Luna, cuyo nombre inspiró las palabras «lunático» y «alunado»34. La mayoría de los médicos de la Antigüedad suscribían la creencia de que la intensa luz de la luna llena podía llevar a conductas extrañas. En algunos hospitales, durante las luminosas noches de luna llena, se solía esposar a los pacientes psiquiátricos y los delitos que se cometían en ese período tenían más posibilidades de ser exculpados. Según Aristóteles, esta locura se debía a que el cuerpo humano está compuesto en su mayoría de agua, por lo que, al igual que las mareas, es susceptible a las influencias de la energía lunar35. Otra explicación, más respaldada desde el punto de vista médico, es que la intensa luz de la luna llena podría provocar trastornos del sueño y, como resultado, comportamientos erráticos. Aunque ya no es tan habitual, la superstición relacionada con la Luna todavía preocupa a algunas personas. De hecho, hasta 2007 los departamentos de policía del Reino Unido enviaban más oficiales en las noches de luna llena para lidiar con el esperado aumento de la delincuencia36.

Hoy en día, muchos de nosotros seguimos mirando al cielo en busca de una guía para vivir en la Tierra. Los agricultores biodinámicos, aquellos que trabajan para respetar los ritmos de la naturaleza, suelen cosechar plantas que crecen sobre la tierra durante la luna llena y las raíces que se encuentran bajo tierra durante la luna nueva, cuando la influencia sutil de la Tierra es más fuerte que la del cielo37.

Hacer que el cielo funcione a tu favor

A excepción de esporádicos momentos de frenesí, nuestro cielo es una fuente de asombro y sirve de hermoso escenario para los rituales.

El sol, con su luz, calor y movimiento, nos incita a movernos y explorar, mientras que la luna nos invita amablemente a quedarnos en silencio y reflexionar. Sus fases dramáticas les dan ritmo a nuestras ajetreadas vidas. Las lunas nuevas y llenas siempre llegan cada dos semanas, por lo que podemos emplear su llegada para reflexionar sobre nosotras mismas.

La luna nueva representa un nuevo comienzo; el inicio de un nuevo ciclo en el cielo y en la Tierra.

Es, por lo tanto, un momento para establecer metas para el siguiente período. Las noches de luna nueva suelen caracterizarse por la poca energía, lo que puede hacerte sentir un poco débil. Esta es la forma en que la luna te dice que desaceleres el cuerpo y la mente, para que puedas ser sincera contigo misma. La luna nueva es un momento para manifestar. Es un momento para comprometerte con tus objetivos y tu crecimiento. Elige lo que deseas atraer y luego imagina que ya lo tienes.

Dos semanas después, la luna llena marca el punto culminante de un ciclo. Es un período de intensidad, poder y revuelo, cuando todas las cosas salen a la superficie, ya sea que las deseemos o no. Pero, cuando todo sale a la luz, es más sencillo determinar qué nos está ayudando y qué no. Por lo tanto, los rituales de luna llena son un buen momento para reflexionar sobre tus metas de luna nueva y liberar cualquier negatividad que pueda estar impidiéndote alcanzarlas, para que puedas hacer todo el ciclo lunar con energía.

Al trabajar en conjunto con el cielo, puedes agregar constancia y regularidad a tus objetivos, lo que siempre te ayudará.


Días lunares especiales

Al igual que la luna nueva y la luna llena, se cree que las ocasiones especiales solares y lunares tienen su propia energía. A continuación verás algunas de las más importantes y cómo puedes darles la bienvenida.

Superluna: una superluna se produce cuando la Luna se acerca más a la Tierra durante una luna nueva o luna llena, haciéndola parecer más grande. Esto sucede solo unas pocas veces al año y potencia la energía de las manifestaciones y liberaciones de la luna nueva y la luna llena.

Eclipse: los eclipses solares ocurren durante las lunas nuevas, cuando la Luna se coloca entre el Sol y la Tierra, bloqueando parte de la luz solar. Los eclipses solares totales, si bien son inusuales, hacen que el Sol desaparezca por completo del cielo durante un momento, sumiendo el día en la oscuridad. Dado el simbolismo de la Luna cubriendo al Sol, los eclipses son un buen momento para tomar parte de la energía que sueles dirigir hacia el mundo y utilizarla para tu trabajo interior.

Equinoccio y solsticio: un equinoccio solar se produce cuando el Sol cruza el ecuador y los días y las noches tienen la misma duración. Un solsticio ocurre cuando el Sol alcanza sus puntos más altos en el norte y en el sur, lo que resulta en el período de mayor luz diurna y la noche más larga, respectivamente, en el hemisferio norte. Ambos son momentos para reflexionar sobre la estación que ha pasado y planificar la que está por llegar.

Hoy en día, ¿quién no quiere confiar en que el universo lo apoya de una manera total e intangible? Simplemente por existir, la luna es una inmensa fuente de magia, por lo que la idea de que pueda irradiar esa energía con sus rayos no es tan difícil de creer después de todo.

Cómo utilizar la luna y el sol

Rituales exprés

A continuación te presentamos algunos de nuestros rituales lunares favoritos que puedes hacer en cinco minutos. Anímate a probarlos para sentirte cómoda con esta herramienta antes de llevar a cabo rituales estacionales más complejos.

RITUAL DE FUEGO PARA LA LIBERACIÓN

  1. En una noche de luna llena, reflexiona sobre cualquier energía negativa o creencia limitante que te esté impidiendo alcanzar un objetivo concreto.
  2. Escríbelas en trozos de papel. Luego, quema estas notas en una pequeña hoguera repitiendo la frase «Gracias, pero ya no te necesito» con cada una.

Dado que un apartamento en la ciudad no suelen contar con espacio al aire libre, también funciona romper simplemente cada trozo de papel.

UN EJERCICIO DE VISUALIZACIÓN PARA OBTENER CLARIDAD

  1. Cierra los ojos y conéctate con tu respiración.
  2. Cuando te sientas centrada, comienza a imaginarte abriendo la puerta a tu propio paraíso personal. ¿Qué aspecto tiene? ¿Qué estás haciendo? ¿Quién eres? ¿Quién está a tu alrededor? No juzgues nada de lo que veas, simplemente observa.
  3. Piensa cómo puede inspirar esta visualización tus intenciones durante la luna nueva.

Ambas hemos realizado muchas visualizaciones así y hemos notado que no podemos prever cómo se manifestará nuestro paraíso en un día concreto. Al establecer el propósito de no juzgar lo que surja, te abrirás a descubrimientos que, de otro modo, no habrían salido a la superficie.

Diseñar un altar para guardar el kit de herramientas

Hay algo especial en reservar un espacio para crecer, explorar y descubrir. Los altares ofrecen esa libertad para jugar, especialmente cuando se utilizan junto con los rituales.

La palabra «altar» proviene de una palabra latina que significa «lugar elevado»38, dado que los altares solían estar colocados en plataformas elevadas. Esta etimología también nos recuerda que los altares pueden trascender todo lo que ocurre en la Tierra. En la religión, los altares siempre han proporcionado una conexión más cercana con lo divino. Se mencionan docenas de veces en el Nuevo Testamento y siguen desempeñando un papel central en ceremonias sagradas y festividades alrededor del mundo.

Con independencia de tu sistema de creencias, puedes montar un altar que te parezca cómodo e inspirador. En esencia, los altares son espacios para bajar el ritmo, reflexionar y estar en silencio. Tu altar no necesita ser llamativo ni majestuoso; no tiene que ocupar una habitación entera, ni siquiera una repisa por completo. Tampoco es necesario adornarlo con cristales ni que huela siempre a salvia. Puede ser tan diminuto como un rincón en tu armario o tan modesto como una pila de fotografías. La verdadera belleza de un altar reside en la relación que tengas con él; que sea un lugar donde puedas ser tú misma.

Deberías sentirte bien montando tu altar, así de simple. Imagínatelo como una extensión de las fotos que tienes en la pared o la colección de objetos de tu mesita de noche. Es un escenario para contar una historia.

Tu altar puede estar destinado a un propósito concreto o ser un espacio más general donde tu espíritu pueda expresarse. Puede preservar el pasado al evocar el recuerdo de alguien que ha fallecido o conmemorar momentos importantes, como una boda o un nacimiento, o también orientarse hacia el futuro al representar la abundancia que deseas materializar en tu vida. Puede ser lo que necesites que sea. El primer paso para crear tu exhibición es decidir dónde colocarla. Puede ocupar un pequeño rincón en tu hogar si tienes poco espacio o prefieres que sea discreto, pero debe estar en un lugar por el que pases todos los días. Tal vez sea tu dormitorio, la sala de estar o el patio trasero. Puedes colocar un paño o un mantel para destacar el espacio y diferenciarlo del entorno.

A partir de ahí, vas añadiendo elementos que te inspiren a bajar el ritmo y entablar un diálogo contigo misma. Pueden evocar recuerdos positivos que te pongan en el estado de ánimo adecuado para reflexionar o te motiven a tomarte un tiempo para concentrarte en la respiración.


Altares alrededor del mundo

A continuación te mostramos algunos de nuestros altares favoritos para inspirarte:

Recuerda que no es necesario que nada permanezca en tu altar para siempre. Puede evolucionar como cualquier otra cosa, así que sigue revisándolo de vez en cuando para ver si todavía te sientes conectada con él. Del mismo modo, siéntete libre de añadir objetos cuando así lo consideres.

Cómo utilizar un altar

Por último, pero no menos importante, te recomendamos que conviertas tu altar en el telón de fondo para la mayoría de los rituales descritos en este libro. Es un excelente lugar para guardar tus herramientas, como una baraja de tarot, tu aceite esencial favorito, un poco de salvia para limpiar y mucho más. Utilizar tu altar como un espacio para practicar rituales le dará aún más significado y lo asociarás con las ideas que descubras en las próximas páginas.

Esperamos que tu altar pueda convertirse en la encarnación de la magia en tiempos difíciles, un espacio mágico en medio de lo mundano. Que te sirva como fuente de inspiración para salir a conquistar el mundo, así como un lugar tranquilo para esconderte de él de vez en cuando.

Y, a partir de ahí, es hora de comenzar a vivir con un poco más de espíritu.