15 de marzo de 1939: Un año después de la anexión de Austria, Alemania invade Checoslovaquia. Hitler encuentra poca resistencia y al día siguiente establece el Protectorado de Bohemia y Moravia desde Praga. Con esta ocupación, el Reich gana no solo territorio, sino también mano de obra cualificada y una enorme reserva de armamento fabricado en esas regiones, suficiente para armar a casi la mitad de la Wehrmacht de entonces.