Elegía vallense.
Mientras miraba al otro lado vuestro fuego se apagó
Me quedé con las cenizas para convertirlas en polvo
Fuisteis una pérdida del milagro
En mi fuego vivo mantendré vuestro desdén y el mío
En mi fuego vivo mantendré vuestra pena y la mía
Ante la desgracia de la pérdida de una vida