acción

Bueno, pues hoy he visto

MISIÓN IMPOSIBLE 2

y os voy a contar un poco.

La película va del pelo de Tom Cruise. También es espía, pero eso no tiene importancia al lado de su melena de yegua jerezana. Y va cuco y aseado, no como otros héroes de acción, que tienen más mierda pegada que el microondas de la oficina. Además es más chulo que lanzarle las llaves al aparcacoches. Las gafas de sol se las mandan con un misil.

Para su nueva misión le envían a Sevilla, donde está todo el mundo zapateando, que es como se camina en Andalucía. Allí tiene que contratar a una ladrona. Pero a una guapa y estilosa, no a una zíngara en zapatillas de casa que te birla el móvil en la mesa de una terraza.

Nada más conocerse echan una carrera de bólidos por Cazalla de la Sierra con muchas curvas y frenazos para que se vea cómo le vuela a él la crin esponjosa. Casi se matan pero sobreviven y se morrean y luego hacen el pitufeo caldoso. Así de dura es la vida de un espía.

Mientras tanto, los sevillanos están celebrando las Fallas y la Semana Santa quemando imágenes de santos, que es algo muy nuestro, como disparar al aire en las bodas y soltar toros en los hospitales. Nuestro folclore.

La idea es usar a la chiquina ladrona como cebo para recuperar un virus. Que normalmente se usan gusanos o migas de pan, pero le ha tocado a ella. Además la misión es muy peligrosa porque el malo es muy violento. Si le chistas te corta una uña, y puede llegar a arrancarte un padrastro, que es lo que le da la calidad a la película.

Entonces Tom Cruise se cuela en el laboratorio por el techo como una pulga. Los malos, en cambio, entran por la puerta matando al guardia, como cualquier persona normal. Pero ahí está Tom esperándoles para hacerles su patada Nadia Comaneci. Primero te da la hostia y luego te la repite a cámara lenta, para que saborees el procedimiento.

El maquillaje es muy bueno porque, cuando corre, a Tom Cruise se le mueve el pelo como un merengue de virilidad. Y suda sexy.

Te la recomiendo si te gusta soltar toros en un hospital o sudar sexy.