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EL PEZ ANUNCIADOR
Tomado de Ixtlilxochitl, Anales de Cuauhtitlán, Historia de los Mexicanos, Leyenda del Tepozteco, Códice Vaticano A, Códice Telleriano y Códice Florentino.
Tula, Estado de Hidalgo, día 1 Caña del año 13 Conejo, 22 de agosto del 946 después de Cristo.
Cada mañana, Shochitsin solía descender a bañarse a un paraje próximo al monasterio conocido como Palpan, humedal,1 donde había una gruta en la que brotaba una fuente de aguas puras. Las señoras que la custodiaban se quedaban en las inmediaciones, vigilando que nadie se acercara.
En cierta ocasión, mientras se bañaba, un pez asomó su cabeza entre las aguas y le dijo:2
—Amada niña: Nuestro Señor Serpiente Emplumada se ha acordado de ti, pues ha visto tus esfuerzos y tus austeridades, y quiere hacerte un favor: se decretó antes del principio del mundo, en lo alto del Cielo y en lo profundo del Inframundo, que tu vientre produzca fruto y traiga un guerrero a la tierra.3 Él reformará y salvará al mundo con su penitencia. Pues el mundo fue creado puro, pero los seres humanos lo han corrompido con sus vicios; por eso, ha sido destruido tantas veces, y lo será aún.4 No te enorgullezcas de este favor ni lo atribuyas a tu propio mérito, antes, esfuérzate y prepárate, y cuida mucho la piedra preciosa que en ti coloco, para que prospere y viva.
Como prueba de su mensaje, el pez le entregó una cuenta de jade que llevaba en su boca. Maravillada ante la revelación, Shochitsin tomó la cuenta y la guardó bajo su lengua. Pero, mientras regresaba al monasterio, tropezó con una raíz y la tragó, de lo cual quedó preñada.5 Desde entonces, el sitio fue conocido como Michatlau’ko, barranca del pez.6
1 Probablemente, la gruta se encuentra entre las colinas de Mishkoatl y Chimalman, las alas del Cerro del Tesoro.
2 Así como los cristianos representan al mensajero divino como un ave, por suponer al cielo de aire, los anahuacas lo representaban como un pez, por llamar al cielo Teoatl, agua divina.
3 Este parlamento se decía a las embarazadas, pues consideraban que el acto reproductivo nos enlaza con la eternidad. Alude a la fusión del principio masculino o celeste (la conciencia), con el femenino o terrestre (el cuerpo), y afirma que todos los dioses o poderes están de acuerdo.
4 Al tiempo que justifica el fenómeno mesiánico, la frase implica su ciclicidad. Los anahuacas organizaban el tiempo en paquetes de cinco “soles”, cada uno de los cuales terminaba con una catástrofe.
5 Teoshiwitl, piedra preciosa, era apodo cariñoso de los niños. El jade simbolizaba lo valioso, la vida y el mérito, como dice el Códice Telleriano: “Chalchihuitl quiere decir la piedra preciosa de la penitencia o el sacrificio”. En otras palabras, no es que una chica haya tragado una piedra, sino que, por su merecimiento, fue elegida para recibir la simiente solar.
6 El Códice Vaticano A añade una extraña versión de la anunciación: “Chimalman tenía dos hermanas, Xochitlicue y Coatlicue. Estando las tres retiradas en su casa, y viendo venir al embajador del cielo, murieron las dos (hermanas) de espanto, quedando viva Chimalman”. La concepción y preñez alude al tercer plano del cielo, Teotl kosau’kan, divino lugar dorado (el color amarillo representaba la fecundidad).