Primera parte:
El Eneagrama Esencial

¿Qué es el Eneagrama?

El Eneagrama es un sistema de tipos de personalidad potente y dinámico que define nueve modos claros y fundamentalmente distintos de pensar, sentir y actuar. Ennea es la palabra griega que significa «nueve», y gram significa una figura o algo escrito. De ahí que este sistema de personalidad, Eneagrama, se represente por el diagrama de una estrella de nueve puntas dentro de un círculo. Cada uno de los nueve modos se funda en un explícito filtro de la percepción y la energía impulsora que la acompaña. Esto es coherente con el modo de actuar de las neuronas según el flujo de información y energía entretejidas. Estos modos determinan a qué prestan atención las personas de cada tipo de personalidad y cómo dirigen su energía y comportamiento. Subyacente a cada uno de estos nueve modos hay una proposición o creencia básica acerca de lo que se necesita en la vida para la supervivencia y la satisfacción.

Cada persona ha desarrollado uno de los nueve modos para proteger un aspecto concreto de su yo que se sintió amenazado cuando se estaba desarrollando su personalidad. Cuando descubrimos nuestro tipo de personalidad eneagrámico descubrimos algo más acerca de nuestro yo total original. También comprendemos más acerca de las motivaciones inconscientes por las que actuamos.

Descubrir el tipo de personalidad eneagrámico puede servirnos para aprender a producir un cambio positivo en la vida. Puede servirnos para cambiar la forma de relacionarnos con los demás y también para comprender mejor las circunstancias y los problemas que se nos presentan. Además nos ofrece una poderosa ayuda para integrar los aspectos personales y espirituales de nuestra vida, siendo esta integración el enlace de los elementos diferenciados.

¿Qué es el Eneagrama Esencial?

Desarrollamos el Eneagrama Esencial como una forma sencilla y precisa de identificar el propio tipo de personalidad eneagrámica y a modo de guía para avanzar en el desarrollo personal, profesional y espiritual.

El Test del Eneagrama Esencial consiste en nueve párrafos cortos que definen los aspectos fundamentales de cada uno de los nueve tipos de personalidad. Para hacerte el test lees los nueve párrafos y eliges los tres que consideras que te describen mejor; luego ordenas los tres párrafos elegidos poniendo en primer lugar el que te parece que te describe mejor. Este proceso lleva poco tiempo.

Después emprendes la aventura de autodescubrimiento siguiendo el proceso explicado en el libro, el que te orienta por la terminología básica del Eneagrama, la determinación de tu tipo de personalidad, una descripción completa de tu tipo, las características determinantes principales que diferencian a cada tipo de todos los demás, y una serie de prácticas o ejercicios de autodesarrollo, entre ellos ejercicios diseñados específicamente para tu tipo.

Un rasgo distintivo del Test del Eneagrama Esencial es el extenso estudio realizado para validarlo. Realizamos un estudio de validez con casi mil personas. Los resultados de este estudio indican que el test tiene un elevado grado de validez y fiabilidad. En el Apéndice B (al final del libro) incluimos un resumen de este estudio.

Empleando el Eneagrama Esencial de la forma que explicamos aquí, puedes descubrir, confirmar y verificar tu tipo de personalidad eneagrámico con un elevado grado de fiabilidad. Ten presente, eso sí, que la finalidad del Eneagrama no es etiquetarte sin ayudarte en tu viaje de comprensión y desarrollo personal. Conociendo tu tipo de personalidad eneagrámico puedes darte cuenta de los hábitos de tu personalidad que te limitan y liberarte de ellos.

El proceso de descubrimiento y desarrollo personal utilizando el Eneagrama Esencial

Cómo usar este libro

Eneagrama Esencial te guía paso a paso por el proceso de hacer el test de personalidad eneagrámica, descubrir y confirmar tu tipo, y seguir un camino de desarrollo personal una vez que conoces tu tipo de personalidad. Primero te ofrecemos una visión de conjunto; una vez que la hayas leído, continúa leyendo y verás la forma de comenzar.

Cómo hacer el Test del Eneagrama Esencial

Cómo descubrir y confirmar el tipo correcto

Qué hacer cuando se ha descubierto el propio tipo

Cómo empezar

De acuerdo a las instrucciones siguientes, haz el Test del Eneagrama Esencial de las páginas 23-27.

Instrucciones para hacer el Test del Eneagrama Esencial

A continuación hay nueve párrafos que describen nueve tipos diferentes de personalidad. Ninguno de estos tipos de personalidad es mejor ni peor que los demás. Cada párrafo pretende ser una simple instantánea de uno de los nueve tipos. Ningún párrafo pretende ser una descripción completa de la personalidad de una persona.

  1. Lee los párrafos y elige los tres que te describen mejor. Cada uno de los nueve párrafos podría describirte hasta cierto punto, pero elige los tres que encuentras más parecidos a ti.
  2. Numera los párrafos elegidos de 1 a 3, siendo 1 el que consideras que te define mejor, el 2 el segundo que mejor te define y el 3 el tercero.

    Al hacer las elecciones considera cada párrafo en su totalidad, no cada frase separada del contexto de su párrafo. Pregúntate: «¿Este párrafo en su totalidad calza mejor conmigo que los demás párrafos?»

    Si te resulta difícil elegir los tres párrafos que mejor te describen, piensa cuál elegiría una persona amiga o muy cercana a ti para describirte. Dado que los rasgos de personalidad suelen ser más prominentes en la juventud, también podrías preguntarte cuáles de estas descripciones calzarían mejor contigo entre los 20 y los 30 años.

    Anotar la elección

    Después de leer los párrafos y elegir los tres que encuentras que te describen mejor, anota o marca sus letras:

    Primer párrafo elegido:

    A B C D E F G H I

    Segundo párrafo elegido:

    A B C D E F G H I

    Tercer párrafo elegido:

    A B C D E F G H I

  3. Una vez que tengas elegidos y anotados los tres párrafos, ve a la página siguiente para ver la correspondencia entre esos párrafos y los tipos eneagrámicos.

Test del Eneagrama Esencial

  1. Enfoco las cosas con la actitud o todo o nada, sobre todo en los asuntos que me importan. Valoro muchísimo ser fuerte, sincero y fiable. Lo que se ve es lo que se tiene. No me fío de los demás mientras no hayan demostrado que son dignos de confianza. Me gusta que sean francos conmigo, y me doy cuenta cuando alguien disimula, miente o trata de manipularme. Me cuesta tolerar la debilidad en las personas, a menos que entienda el motivo de esa debilidad o vea que la persona hace algo al respecto. También me cuesta acatar órdenes o seguir instrucciones cuando no respeto o no estoy de acuerdo con la persona que está al mando. Soy mucho mejor para tomar el mando yo. Me resulta difícil no expresar mis sentimientos cuando estoy enfadado. Siempre estoy dispuesto a defender a mis amigos y seres queridos, sobre todo si considero que se los trata injustamente. Puede que no gane todas las batallas con los demás, pero ellos sabrán que he estado por ellos.
  2. Doy muchísimo valor a la corrección, y procuro vivir a la altura de esos valores. Me resulta fácil ver lo que está mal en las cosas cuando están mal, y ver cómo se podrían mejorar. Algunas personas podrían considerarme excesivamente crítico o exigente en lo que a perfección se refiere, pero me cuesta pasar por alto o aceptar las cosas que no están hechas correctamente. Me enorgullece saber que si me responsabilizo de hacer algo se puede tener la seguridad de que lo haré bien. A veces siento resentimiento cuando las personas no tratan de hacer bien las cosas o cuando actúan de modo irresponsable o injusto, aunque normalmente trato de no manifestarlo francamente. Para mí el trabajo está antes que el placer y reprimo mis deseos cuando es necesario para hacer el trabajo.
  3. Creo que soy capaz de ver todos los puntos de vista con bastante facilidad. Incluso a veces puedo parecer indeciso, porque veo las ventajas y desventajas de todos los lados. Esta capacidad de ver todos los lados me hace bueno para ayudar a las personas a resolver sus diferencias. Esta misma capacidad a veces me lleva a percibir las posturas, asuntos y prioridades personales de otras personas mejor que los míos. No es insólito que me distraiga e interrumpa cosas importantes que estoy tratando de hacer. Cuando me ocurre eso mi atención suele desviarse hacia tareas triviales sin importancia. Me cuesta saber qué es verdaderamente importante para mí, y evito los conflictos diciendo amén a lo que desean los demás. Se me suele considerar una persona acomodadiza, complaciente y simpática. Hacen falta motivos muy serios para que llegue al punto de manifestar mi enfado a alguien. Me gusta que la vida sea agradable, armoniosa y que los demás me acepten.
  4. Soy sensible a los sentimientos de los demás. Sé ver lo que necesitan, incluso cuando no los conozco. A veces es frustrante ser tan sensible a las necesidades de los demás, sobre todo de su dolor o infelicidad, porque no soy capaz de hacer por ellos todo lo que me gustaría hacer. Me resulta fácil dar de mí. A veces quisiera ser mejor para decir no porque acabo poniendo más energía en cuidar de los demás que en cuidar de mí. Me duele cuando las personas creen que quiero manipularlas o controlarlas cuando lo único que trato de hacer es comprenderlas y ayudarlas. Me gusta que me consideren una persona buena y afectuosa, pero cuando no se me toma en cuenta o no se me valora puedo ponerme muy emotivo e incluso exigente. Las buenas relaciones significan muchísimo para mí, y estoy dispuesto a esforzarme al máximo para tenerlas.
  5. Ser el mejor en lo que hago es una potente motivación para mí, y a lo largo de los años he recibido muchísimo reconocimiento por mis logros. Hago todo lo que puedo y tengo éxito en casi todo lo que emprendo. Me identifico profundamente con lo que hago, porque en gran medida creo que la propia valía se basa en lo que uno realiza y el reconocimiento que obtiene por ello. Siempre tengo más cosas que hacer que las que caben en mi tiempo, por lo que suelo dejar de lado los sentimientos y la reflexión sobre mí mismo para lograr hacer las cosas. Dado que siempre hay algo que hacer me cuesta estar sentado sin hacer nada. Me impaciento con las personas que no usan bien mi tiempo. A veces prefiero hacer yo un trabajo que alguien está haciendo con demasiada lentitud. En toda situación me gusta sentirme y parecer que «estoy a la altura». Si bien me gusta competir, también soy buen jugador de equipo.
  6. Yo me describiría como una persona callada y analítica que necesita más tiempo a solas que la mayoría de las personas. Normalmente prefiero observar lo que ocurre en lugar de estar metido en el medio. No me gusta que me impongan demasiadas exigencias ni esperen que sepa y diga lo que siento. Soy más capaz de conectar con mis sentimientos cuando estoy solo que cuando estoy con otras personas, y suelo disfrutar más con las experiencias cuando las estoy reviviendo que cuando estoy pasando por ellas. Casi nunca me aburro estando solo porque tengo una vida mental activa. Para mí es importante proteger mi tiempo y energía y, por lo tanto, vivir una vida sencilla, sin complicaciones y ser lo más autosuficiente posible.
  7. Tengo una viva imaginación, especialmente cuando se trata de lo que podría amenazar la seguridad. Por lo general soy capaz de detectar lo que podría ser peligroso o dañino y llego a sentir tanto miedo como si estuviera ocurriendo de verdad. Tiendo o bien a evitar el peligro o a plantarle cara. Mi imaginación también me favorece la inventiva y un sentido del humor bueno aunque algo excéntrico. Me gustaría que la vida fuera más segura, pero en general dudo de las personas y las cosas que me rodean. Suelo ver los defectos en las opiniones o puntos de vista de las personas. Supongo que, a consecuencia de eso, algunas personas podrían considerarme muy sagaz. Tiendo a desconfiar de la autoridad y no me siento particularmente cómodo cuando se me considera la autoridad. Dado que veo lo que está mal en lo que generalmente se opina de las cosas, tiendo a identificarme con causas perdidas. Una vez que me he comprometido con una persona o una causa, soy muy leal a ella.
  8. Soy una persona optimista que disfruta de encontrar cosas nuevas e interesantes para hacer. Tengo una mente muy activa que se mueve con rapidez entre diferentes ideas. Me agrada hacerme un cuadro global de cómo se ensamblan esas ideas, y me entusiasmo cuando logro conectar conceptos que al principio parecían no estar relacionados. Me gusta trabajar en cosas que me interesan, y tengo muchísima energía para dedicarles. Me cuesta perseverar en trabajos repetitivos y poco gratificantes. Me gusta estar en el comienzo de un proyecto, durante la fase de planificación, cuando puede haber opciones interesantes que considerar. Cuando se me ha agotado el interés por algo me cuesta seguir con ello porque deseo pasar a lo siguiente que ha captado mi atención. Si algo me deprime, prefiero pasar la atención a ideas más agradables. Creo que las personas tenemos derecho a disfrutar de una vida agradable.
  9. Soy una persona sensible, de sentimientos muy intensos. Suelo sentirme incomprendido y sólo porque me siento diferente a todos los demás. Mi conducta puede parecerles algo teatral a los demás, y se me ha criticado por ser demasiado sensible y exagerar mis sentimientos. En el fondo lo que realmente siento es un anhelo de conexión emocional y de una profunda experiencia de relación. Tengo dificultad para valorar totalmente las relaciones del momento debido a mi tendencia a desear lo que no puedo tener y a desdeñar lo que poseo. Ese deseo de conexión emocional me ha acompañado toda mi vida, y su ausencia me hace caer en la tristeza y la depresión. A veces pienso por qué otras personas parecen tener más que yo: mejores relaciones y una vida más feliz. Tengo un sentido estético refinado y experimento un mundo rico en emociones y sentido.

IMPORTANTE:

Para continuar leyendo, antes tienes que haber terminado de hacer el Test del Eneagrama Esencial.

Correspondencia entre párrafos y tipos

Mira a qué tipos corresponden cada uno de los párrafos que has elegido.

Párrafo

Tipo

Página de determinación

A

Tipo 8

Páginas 70-71

B

Tipo 1

Páginas 42-43

C

Tipo 9

Páginas 74-75

D

Tipo 2

Páginas 46-47

E

Tipo 3

Páginas 50-51

F

Tipo 5

Páginas 58-59

G

Tipo 6

Páginas 62-63

H

Tipo 7

Páginas 66-67

I

Tipo 4

Páginas 54-55

La figura del Eneagrama

Ennea es la palabra griega que significa «nueve» y gram significa figura o algo escrito. Llamamos «eneagrama», entonces, al diagrama de una estrella de nueve puntas dentro de un círculo.

Las flechas dibujadas en el diagrama indican los tipos estrés y seguridad relacionados con cada tipo de personalidad. El tipo estrés lo indica la flecha que sale del tipo, y el tipo seguridad, la flecha que llega al tipo. En la página 33 encontrarás la explicación de los tipos estrés y seguridad.

Cómo proceder

Por el momento has hecho el Test del Eneagrama Esencial y visto la correspondencia entre tus tres párrafos elegidos y sus respectivos tipos eneagrámicos.

Ya estás preparado para leer la explicación de las páginas de determinación y de descripción del tipo que son esenciales para determinar tu tipo. Estas páginas son la parte principal de esta guía para descubrir el tipo de personalidad en el Eneagrama. Para identificar, confirmar y verificar el propio tipo es fundamental comprender la terminología y el formato de estas páginas.

Comprensión de las páginas de determinación del tipo

Las páginas de determinación del tipo te dicen cuál es la probabilidad de que el párrafo elegido en primer lugar sea el correspondiente a tu tipo de personalidad correcto. También te dice cuáles son las principales posibilidades alternativas para ese primer párrafo elegido. Esta información cuantitativa te servirá para determinar correctamente tu tipo de personalidad.

Las probabilidades que aparecen en las páginas de determinación del tipo se descubrieron mediante un extenso estudio realizado con el Test del Eneagrama Esencial. En el Apéndice B ofrecemos un resumen de ese estudio.

La figura 1 muestra el formato de las páginas de determinación del tipo, seguida por una explicación.

Figura 1. Muestra de la disposición de las páginas de determinación del tipo

Tipo del Eneagrama. Cada tipo tiene un número y un nombre descriptivo.

Determinación del tipo. Estas páginas enfrentadas te sirven para determinar cuáles tipos podrían ser el tuyo.

Tipos conectados. Los cuatro tipos de personalidad relacionados con tu tipo básico.

Tipos no conectados. Los tipos de personalidad que muchas veces manifiestan características similares a las de tu tipo básico.

Probabilidades de ser otros tipos. El porcentaje de probabilidades de que puedas ser otro tipo y no el correspondiente a tu primer párrafo elegido.

Calificativos que describen al tipo. Adjetivos que sirven de complementos útiles para determinar el tipo.

Mitos acerca del tipo. Ideas estereotipadas acerca del tipo basadas en falsas creencias y que llevan a rechazar involuntariamente el tipo.

Explicación detallada de las páginas de determinación del tipo

Las explicaciones siguientes se refieren a la figura 1.

El título da el número y el nombre del tipo.

Determinación del tipo

Las primeras dos páginas enfrentadas para cada tipo se llaman de determinación del tipo porque sirven para determinar si el tipo que elegiste en primer lugar es el correcto. Estas páginas señalan las probabilidades de que seas el primer tipo elegido. También indican las probabilidades de que fueras otro tipo, más concretamente, la probabilidad de que fueras uno de los tipos conectados o uno de los tipos parecidos al primer tipo elegido pero no conectados. También podrías ser el segundo o el tercer tipo elegido.

Tipos conectados

Cada tipo de personalidad eneagrámica tiene cuatro tipos conectados (las dos alas, y los tipos seguridad y estrés). Éstos son los cuatro tipos de personalidad relacionados con el tipo de personalidad básico según la teoría de la personalidad del Eneagrama. Las páginas de determinación del tipo indican cuáles son estos tipos conectados. Recuerda que podrías ser uno de los tipos conectados con el primer tipo que elegiste.

Las alas

Dos de los tipos conectados se llaman alas, y son los tipos de personalidad que están a cada lado del tipo en el Eneagrama. Por ejemplo, si eres un Realizador (tipo Tres), entonces los dos tipos de personalidad que son tus alas son el Dador (tipo Dos) y el Romántico (tipo Cuatro). Si eres un Mediador (tipo Nueve), tus dos tipos alas son el Protector (tipo Ocho) y el Perfeccionista (tipo Uno). Según la teoría del Eneagrama, tu tipo de personalidad es influido por uno o por los dos tipos de personalidad que son tus alas.

Tipo seguridad y tipo estrés

Los otros dos tipos conectados se llaman respectivamente tipo seguridad y tipo estrés. Tu tipo estrés es el tipo de personalidad al que pasas cuando te sientes estresado o urgido, o cuando te estás movilizando para la acción. En el Eneagrama, el tipo estrés está indicado por la flecha que sale del tipo. El tipo seguridad es el tipo de personalidad hacia el que pasas cuando te sientes relajado y seguro, o paradójicamente, cuando te sientes abrumado o agotado. En el Eneagrama, el tipo seguridad está indicado por el extremo opuesto de la flecha que llega al tipo. Cada tipo del Eneagrama tiene su tipo seguridad y su tipo estrés. Cuando la persona pasa a su tipo seguridad o a su tipo estrés, puede manifestar las cualidades superiores o las inferiores de ese tipo, según sean las circunstancias.

Si bien la existencia de tipos conectados que influyen en tu tipo de personalidad real tiende a complicar el proceso de identificación del tipo correcto, también hace del Eneagrama un sistema de personalidad rico y dinámico y sirve para explicar el que cada persona sea única y diferente.

Tipos no conectados

Los tipos no conectados son aquellos que tienen entre sí una clara similitud o una característica parecida por motivos distintos a ser tipos alas o de seguridad o estrés. Cuando se eligen los párrafos del test que describen los rasgos más parecidos a los propios se podría elegir sin darse cuenta uno de los tipos no conectados en lugar del verdadero tipo. El procedimiento explicado en las páginas de determinación del tipo sirve para descubrir si un tipo elegido en el test es el correcto o uno parecido al tipo correcto.

Probabilidades de ser otros tipos

El estudio realizado con el Test del Eneagrama Esencial indica la probabilidad de que uno sea de un determinado tipo según qué párrafo del test eligió en primer lugar. En cada página de determinación del tipo viene una lista de estas probabilidades. Por ejemplo, mira la página 42, del tipo Uno. Si 100 personas eligieran el párrafo B en primer lugar cuando hicieron el test, 66 de estas personas tendrían el tipo Uno como su tipo correcto final. Sin embargo, 8 de estas 100 personas descubrirían finalmente que su tipo correcto es el Cuatro, y otras 8 descubrirían que su tipo correcto es el Seis. Además, algunas otras descubrirían que eran uno de los otros tipos probables, su segunda o tercera elección o un tipo parecido.

Mitos acerca del tipo

Acerca de cada uno de los tipos se generan ideas estereotipadas que entrañan falsas creencias. A veces esto lleva a malos entendidos acerca del tipo con la consecuente negativa a que sea el tipo correcto. Cuando elijas un tipo procura tomar en cuenta las falsas creencias o ideas erróneas acerca de ese tipo; así no rechazarás ese tipo por ignorancia.

Calificativos que describen al tipo

Estos calificativos te sirven para determinar tu tipo si la mayoría de ellos te describen, por lo tanto apuntan a una buena elección. Dado que algunos son «negativos», evaluar lo bien que te describen te exige ser sincero y estar dispuesto a no juzgarte; todos tenemos ciertas características negativas.

Comprensión de las páginas de descripción del tipo

Las páginas de descripción del tipo dan una descripción detallada de las propiedades y características de cada uno de los nueve tipos del Eneagrama. Esta información cualitativa te servirá para confirmar que has elegido tu tipo de personalidad correcto. La riqueza de información de estas páginas te ayudará a comprender con más claridad y más totalmente tu tipo. Estas páginas también describen el camino de desarrollo personal para cada tipo.

La figura 2 te muestra el formato de estas páginas y a continuación ofrecemos una explicación detallada de ellas.

Figura 2. Muestra de la disposición de las páginas de descripción del tipo

Tipo del Eneagrama. Cada tipo del Eneagrama tiene un número y un nombre descriptivo.

Descripción del tipo. Estas páginas enfrentadas que dan detalles sobre el tipo de personalidad.

La proposición básica. Descripción de la evolución del tipo de personalidad y sus principales creencias.

Características principales. Descripción de las características fundamentales relacionadas con la estrategia que ha desarrollado la persona de ese tipo.

Estrés, rabia y actitud defensiva. Explicación de la causa y naturaleza del estrés y la rabia que siente la persona de ese tipo.

Desarrollo personal. Información esencial para el desarrollo de la persona de ese tipo.

Explicación detallada de las páginas de descripción del tipo

La explicación siguiente se refiere a la figura 2.

El título da el número y el nombre del tipo.

Descripción del tipo

Las segundas dos páginas enfrentadas para cada tipo se llaman de descripción del tipo porque describen con detalle cada tipo de personalidad. También ofrecen ideas sobre cómo utilizar el conocimiento del propio tipo de personalidad para el desarrollo personal. Cada una de las páginas de descripción del tipo sigue un orden lógico, comenzando por la proposición básica de cada tipo.

La proposición básica

La proposición básica consta de tres partes:

El principio fundamental que perdí de vista:

Una verdad fundamental acerca de la vida que mis primeras experiencias y tendencias naturales me hicieron perder de vista cuando se estaba formando mi personalidad.

Lo que llegué a creer en su lugar:

La creencia fundamental que nació de mis primeras experiencias y tendencias naturales y que reemplazó al principio fundamental original.

Estrategia de adaptación que desarrollé a causa de esta creencia:

La estrategia para adaptarme, arreglármelas y sobrevivir que desarrollé debido a esa creencia fundamental, con el fin de conservar la sensación de seguridad, amor y valía.

Características principales

La segunda sección de las páginas de descripción del tipo describe las características principales relacionadas con la estrategia que desarrolló cada tipo.

Dada esa estrategia mi atención está en:

Todo aquello que necesite para apoyar y sostener la determinada estrategia de adaptación y supervivencia de mi tipo, incluidos mis «puntos ciegos», es decir lo que no veo.

Pongo mi energía en:

Todo aquello que necesite mi hábito de atención, dado que a la atención y a la energía emocional que la acompaña le sigue el comportamiento.

Hago lo posible por evitar:

Todo aquello que amenace a la estrategia de adaptación y supervivencia de mi tipo, entre otras cosas mis preocupaciones y temores más profundos, muchos de los cuales son inconscientes.

Mis puntos fuertes:

Las cualidades positivas que nacen de y están conectadas con la determinada estrategia de adaptación y supervivencia de mi tipo.

Mi estilo de comunicación:

El modo positivo o negativo como se expresa mi tipo.

Estrés, rabia y actitud defensiva

La tercera sección habla del estrés, la rabia y la actitud defensiva que acompañan a cada tipo:

Qué me produce estrés:

Las situaciones y circunstancias que causan estrés, aflicción o molestia a mi tipo de personalidad.

Qué me enfada y me incita a ponerme a la defensiva:

Los factores concretos, normalmente heridas y transgresiones que causan rabia a mi tipo.

La naturaleza de mi rabia y actitud defensiva:

La forma que toman normalmente las reacciones de rabia y actitud defensiva de mi tipo.

Desarrollo personal

La cuarta sección presenta información sobre desarrollo personal para cada tipo:

Objetivo último de mi desarrollo:

Recordar y recuperar el principio fundamental que perdí de vista durante el desarrollo de mi personalidad.

Cómo favorecer mi desarrollo personal:

La percepción, los pasos, las prácticas y la aceptación necesarios para avanzar en mi desarrollo personal, según las características concretas de mi tipo. (Ver también la sección titulada «Qué hacer cuando se ha descubierto el tipo», que comienza en la página 97.)

Qué obstaculiza mi desarrollo personal:

Los factores y resistencias concretos que estorban a mi desarrollo personal, entre otros las creencias que lo obstaculizan.

Qué pueden hacer los demás para apoyar mi desarrollo:

Formas de aliento o estímulo y actos de los demás apropiados para mi tipo.

Segunda parte:
Cómo descubrir el propio tipo y sus rasgos clave

Ahora ve a las páginas de determinación del tipo eneagrámico correspondiente al primer párrafo que elegiste; en esas páginas encontrarás las instrucciones sobre cómo proceder para descubrir tu tipo.

Durante este proceso de descubrimiento mantén abierta la mente; trata de no formarte juicios prematuros, es decir, espera hasta haber leído las páginas de descripción de todos los tipos que tienen probabilidades de ser el tuyo. Si bien el Test del Eneagrama Esencial es muy exacto, no puede garantizar que elijas correctamente tu tipo de personalidad. Ten presente que tu intuición es un instrumento muy útil para ayudarte a descubrir correctamente cuál es tu tipo.

Continúa tu descubrimiento confirmando tu tipo por ti mismo, verificándolo con otras personas que te conocen, y prestando atención a tus pensamientos, sentimientos y sensaciones físicas. Estos procesos se explican en las secciones tituladas «Cómo confirmar y verificar el tipo» (página 78), y «Cómo desarrollar la comprensión de uno mismo» (página 96). También puedes informarte más acerca de tu tipo de personalidad en los libros, audiocasetes y otros recursos cuya lista encontrarás en el Apéndice A (páginas 151-154).

Después emprende el trabajo de desarrollo personal y profesional utilizando el conocimiento de tu tipo eneagrámico. En la segunda sección, «Qué hacer cuando se ha descubierto el tipo», sugerimos un buen número de prácticas o ejercicios que te servirán para tomar más conciencia de cómo funciona tu personalidad, tomar medidas orientadas a cambiar tu comportamiento habitual, prever y revisar tu progreso, poner en práctica los cuatro elementos del Proceso de Crecimiento Universal y reflexionar sobre el objetivo último de tu desarrollo.

Por encima de todo, ten presente que eres algo más que un tipo de personalidad: eres también un ser humano que sencillamente tiene un hábito mental a modo de estrategia de adaptación y supervivencia. El Eneagrama va de descubrir en qué «caja» estás para poder salir de los límites de esa caja y convertirte en un ser humano más entero y sano.