PRONUNCIACIÓN

El alfabeto italiano está formado por veintiuna letras que indicamos a continuación, junto con su correspondiente sonido figurado.

a

b

c

d

e

f

g

[a]

[bi]

[chi]

[di]

[e]

[effe]

[gi]

h

i

l

m

n

o

p

[acca]

[i]

[el-le]

[emme]

[enne]

[o]

[pi]

q

r

s

t

u

v

z

[cu]

[erre]

[esse]

[ti]

[u]

[vi/vu]

[tzeta]

Las letras j (i lunga), y (ipsilon), k (cappa), x (ics) y w (vu doppia) sólo se utilizan en palabras de origen extranjero.

Las vocales

Las vocales son cinco: a, e, i, o, u. La pronunciación de estas es igual que la del español.

Las consonantes

B: tiene su propia pronunciación, que conviene no confundir con la de la v, como sucede en español. La b es consonante bilabial [b], y se pronuncia con los dos labios cerrados, mientras que la v es consonante labiodental [v], y se pronuncia rozando el labio inferior con los dientes superiores (de forma similar a como se pronuncia una f). Por ejemplo:

bello

[bel-lo]

bello

vendere

[vendere]

vender

C: esta consonante tiene, delante de las vocales a, o, u, el mismo sonido que en castellano. Por ejemplo:

cantare

[kantare]

cantar

conte

[konte]

conde

cubo

[kubo]

cubo

Conserva este mismo sonido delante de e, i, cuando entre la consonante y la vocal se interpone una h. Por ejemplo:

pechinese

[pekinese]

pequinés

schermo

[skermo]

pantalla

Si una c doble precede a una vocal fuerte o una h, también se pronuncia con el sonido k. Por ejemplo:

apparecchio

[ap-parek-kio]

aparato

Por el contrario, la c se pronuncia como la ch castellana delante de e, i. Por ejemplo:

cera

[t∫era]

cera

vicino

[vit∫ino]

vecino, cerca

Igualmente, cuando entre la c o la c doble y la vocal fuerte se intercala una i, también se pronuncia como la ch castellana. Por ejemplo:

cucciolo

[kut∫olo]

cachorro

G: tiene, al igual que la c, dos sonidos. Se pronuncia como la del castellano ante a, o, u. Por ejemplo:

gola

[gola]

garganta

Conserva este mismo sonido delante de e, i cuando se interpone una h entre la consonante y la vocal, formando ghe, ghi, que se pronuncian como las formas castellanas gue, gui. Por ejemplo:

ghiotto

[giot-to]

glotón

Sin embargo, tiene sonido palatal sonoro [dj] ante e, i. Por ejemplo:

geloso

[djeloso]

celoso

ginocchio

[djinok-kio]

rodilla

Conserva este mismo sonido delante de a, o, u cuando se interpone una i entre la consonante y la vocal. Por ejemplo:

giovane

[djovane]

joven

Cuando se encuentran juntas dos g (gg), se aplican las reglas anteriores.

Cuando a la g le siguen los diptongos ue, ui, se produce una diéresis y se pronuncian las dos vocales consecutivas, tal como ocurre en español con las palabras vergüenza y agüero. Por ejemplo:

guerra

[guer-ra]

guerra

guida

[guida]

guía

El grupo gl, delante de a, e, o, u, tiene el mismo sonido que en castellano. Por ejemplo:

gladiatore

[gladiatore]

gladiador

Delante de la i tiene dos sonidos: uno como la palabra anglicano en castellano, que se da, por ejemplo, en las palabras negligente (negligente) y glicerina (glicerina); y otro como la ll española [λ], en todas aquellas palabras en que la i forma diptongo con la vocal siguiente. Ejemplos:

famiglia

[famiλa]

familia

consiglio

[konsiλo]

consejo

figlio

[fiλo]

hijo

El grupo gn corresponde a la pronunciación castellana de la ñ [η]. Por ejemplo:

sogno

[soηo]

sueño

ogni

[oηi]

cada

H: propiamente, la h no tiene sonido. Cuando acompaña a c y g ante e, i, hace que estas consonantes se pronuncien sordas. Ejemplo:

chiesa

[kieza]

iglesia

ghiro

[giro]

lirón

Q: va siempre seguida de u y de otra vocal; esta u se pronuncia siempre, y corresponde al sonido de las formas castellanas cua, cue, cui, cuo (cuello, oblicuo). Por ejemplo:

quindici

[kuindit∫i]

quince

quaderno

[kuaderno]

cuaderno

Si le precede una c, refuerza su sonido. Por ejemplo:

acqua

[ak-kua]

agua

R: cuando es doble, se pronuncia con fuerza; cuando es sencilla o está situada al principio de una palabra, se pronuncia como en castellano.

S: tiene dos sonidos: uno sordo y otro sonoro. Es s sorda [s] cuando se halla al principio de palabra, cuando es doble y cuando va seguida de las consonantes c, q, t, p, f. Por ejemplo:

sale

[sale]

sal

orso

[orso]

oso

scala

[skala]

escalera

stato

[stato]

estado

spada

[spada]

espada

sfida

[sfida]

desafío

Su sonido es sonoro [z] cuando se encuentra entre dos vocales o delante de las consonantes sonoras g, d, b, v. Por ejemplo:

rosa

[roza]

rosa

bisogno

[bizo∫o]

necesidad

sguardo

[zguardo]

mirada

sdegno

[zde∫o]

desdén

Se la llama líquida o impura cuando precede a una consonante. En este caso hay que evitar la analogía fonética con la sílaba es del español. Así pues, la palabra studio se pronunciará [studio], y no [estudio], como si tuviese la vocal e.

La s líquida, delante de una c seguida de vocal, suena como la ch francesa [∫] en las voces charité, chasse. Por ejemplo:

sciupare

[∫iupare]

malgastar

sciopero

[∫iopero]

huelga

scena

[∫ena]

escena

scivolare

[∫volare]

resbalar

T: se pronuncia igual que en castellano.

V: tal como ya se ha comentado en el caso de la b, hay que procurar no confundir la pronunciación de estas dos consonantes.

Z: ofrece dos tipos de pronunciación: una sonora [dz] y otra sorda [tz]. Es sonora:

zucchero

[dzuk-kero]

azúcar

zio

[dzio]

tío

Es sorda en el siguiente ejemplo:

grazioso

[gratzioso]

gracioso

También es sorda en otras muchas palabras en las que se halla doblada, como por ejemplo:

pazzo

[pattso]

loco

spazzare

[spattsare]

barrer

pezzo

[pettso]

pedazo

La z italiana no tiene en ningún caso el sonido dental de la castellana.

Consonante doble

Las consonantes dobles, muy comunes en italiano, constituyen otra gran dificultad, porque, a excepción de la h, todas las consonantes pueden duplicarse para producir sonidos reforzados. En castellano sólo se advierte la diferencia entre consonantes dobles y simples en las palabras que tienen doble r. (Hay muy pocas palabras con doble n, y generalmente son compuestas: innegable, innocuo, innovar, perenne, innovación, innovador, innumerable, innominado, innominable, innoble, innato, innatural, innavegable, innecesario).

Acentuación

La falta de acentos ortográficos que indiquen la sílaba tónica de cada palabra crea una primera dificultad para quien se dispone a estudiar el idioma italiano. El único acento que se señala siempre en italiano es el de las palabras agudas, es decir, aquellas en las que el acento recae en la última sílaba. Para llegar a leer correctamente las palabras, se requieren una larga práctica y la ayuda del diccionario. En la lengua escrita, el acento comúnmente empleado es el grave (ì). Hay escritores que usan preferentemente el signo agudo en vez del grave, pero es una simple cuestión de forma. La mayor parte de las palabras italianas son llanas y, salvo escasas excepciones, terminan en vocal en su forma natural.