para elegir el nombre de un bebé

Lo primero que debes tener claro es que cada persona posee y merece su propia identidad. Y que no necesariamente un nombre de moda o que suena bonito es lo mejor para colocar. Toca aprender y estudiar. Empecemos entonces:

1. No elijas un nombre por el calendario: era una costumbre antigua. Se hacía en Europa tomando en cuenta las festividades de todo tipo. Sin embargo, se necesita elegir vibraciones (ruidos) que sean un elemento importante energético para la personalidad.

2. Coloca siempre dos nombres porque, con ello, el bebé tendrá mayor tendencia a la protección energética: existen vocales y consonantes que al pronunciarse emanan un sonido y vibración especial que contribuyen a la calma, seguridad, valentía, fuerza y determinación en la vida, así como a desarrollar una mayor apertura hacia lo espiritual. Miren la Biblia y vean cómo se designaron nombres específicos para ciertos profetas, tribus y ciudades.

Lo que recomendamos los numerológos es colocar dos nombres al futuro bebé, porque cada letra posee poderosas vibraciones energéticas y bien usadas contribuyen a potenciar talentos y habilidades psicosociales como el intelecto, empatía, persuasión, liderazgo.

Veamos algunos ejemplos de expresidentes de varios países, incluidos los nuestros:

a) Brasil: Dilma Vana Rousseff

b) Perú: Ollanta Moisés Humala

c) Argentina: Cristina Elisabet Fernández

d) Colombia: Juan Manuel Santos

Nombres de expresidentes latinoamericanos que han tenido dos períodos (reelegidos):

a) Perú: Alan Gabriel García Perez

b) Argentina: Carlos Saúl Menen

c) Venezuela: Hugo Rafael Chávez

d) Chile: Verónica Michelle Bachelet

3.- Quienes tienen más de dos nombres (tres o cuatro) caen en el peligro de ser más irritables y tener tendencia a las dudas en sus decisiones: pasar de la alegría a la pena, o de la actividad a la paralización. Si ya los tienes, solo usa dos en tus tarjetas y el resto óbvialos, teniendo claro que lógicamente aparecen en tu cédula de nacimiento y en tu DNI (documento nacional de identidad).

4.- Coloca por lo menos una vocal A en uno de los nombres, de preferencia en el primero para darle solidez en la vida, valor, saber quejarse, luchar, avanzar. La A es empuje, coraje, decisión, liderazgo, introspección. Existe gente que no empieza un nombre con letra A, pero aquí precisamos los beneficios de aplicar la vibración de esta vocal al inicio de un nombre.

Dentro de las personalidades importantes que poseen estas características y fueron líderes en diversas ramas y épocas tenemos a:

a) Alejandro Magno, rey de Macedonia (336 a. C)

b) Augusto, emperador romano (63 a. C)

5.- No excedas las tres vocales A en un nombre o en dos, porque ello traería tendencia a ser autoritario. Mientras que si por ejemplo son tres vocales A, como máximo repartidas en dos nombres, se atrae el intelecto, fuerza, percepción, mover masas, porte firme, vivir sin apegos, independencia, éxito.

6.- Coloca como máximo una vocal I en el nombre del bebé. No juntes estas vocales en un solo nombre o repartidos en dos. Por ejemplo, no coloques Isabel Tatiana, porque esto indica ansiedad, impaciencia, tendencia a criticar, a los miedos, apuros, dependencias, pensar en el qué dirán, resentimientos. Tatiana significa mujer fuerte, líder, pero con tendencia a la impaciencia y capricho; las vibraciones de las vocales A son altas, porque trae tres y si le agregamos el nombre Isabel, la vocal I contribuiría en elevar esa impaciencia. Si ustedes pronuncian la vocal, notarán la vibración del ruido que produce y si tenemos dos vocales I, la persona que lleve este nombre tendrá que aprender a lidiar y trabajar mucho en manejar los niveles altos de ansiedad e impulsividad.

7. Jamás combines las vocales I con la O en un nombre, o en el segundo. Por ejemplo, un nombre complicado sería Rosario Ingrid, porque vemos que existen dos vocales O (ello indica tendencia a mandar sobre los demás). La combinación I con O refleja intolerancia a la frustración, distracción, rebeldía, celotipia, ataques de ira, cambios de humor, impaciencia. Si miramos los dos nombres, tenemos tres vocales I, eso es terrible porque será una dama sin paz, con miedos, siempre alterándose, apurada, posesiva, muy nerviosa, tensa o impulsiva.

Recuerda cómo son las reacciones de tus amigos llamados, por ejemplo, Rocío o Roberto, si es que no tienen otro nombre extra. En un estudio que hice sobre los nombres con pacientes de coach emocional, hallé que setenta y ocho mujeres llamadas Rocío tenían una elevada tendencia a la ansiedad, celos y nervios que les costaba controlar, además de tendencia al apego afectivo. El uso de la doble vocal O las conduce a sentir necesidad de mandar, dominar, criticar. La conjunción de las vocales I-O las lleva a tener problemas para soportar la frustración.

Lo mismo ocurre con personas que se llaman Fiorella, Ignacio, Violeta, Carolina, Fabricio y en toda suerte de combinaciones que hallen esta presencia de conjunciones vocales. Si es tu caso y te reconoces, puedes usar tu segundo nombre cuando te presentes, porque lo que importa es cuando lo pronuncian y vibra en ti todo el tiempo; no se irá de tus documentos, pero haz uso de la guía de este texto y date un tiempo para notar la diferencia de cómo te sientes emocionalmente al respecto.

Y si solo tienes un nombre, puedes apelar a que te digan Rose en lugar de Rocío, o Nacho en lugar de Ignacio. Debes jugar con las vocales hasta emplear las vibraciones más saludables.

8. Coloca como máximo una vocal I en el nombre. Si son dos nombres, que entre los dos solo aparezca una vocal I, porque una sola es sensibilidad, arte, paciencia, ternura, tendencia a la fe y habilidad con el oído, manejo de los ruidos, conexión con lo místico. Por ejemplo, nombres complicados con más de una I tenemos: Patricia, Irina, Ingrid, Cristina, Miriam, Cristian, Cirilo, Cinthya (la I latina o griega suenan igual). Ocurre con estos nombres que existe una fuerte tendencia a los pánicos nocturnos, miedo a dormir solo de niño, miedo escénico, paralización y en la madurez ansiedad, apegos, tendencia a dependencias, aceleración, obstinación.

Si colocas dos nombres, aplica la vocal I en uno solo de los nombres y así podrás atraer la sensibilidad y arte en la persona.

9. No excedas las tres vocales E. Si usas una o dos, la persona que la lleve tendrá tendencia al trabajo siempre, le llegará apoyo económico y recomendaciones. Pero si hay más de tres vocales E, habrá materialismo, mezquindad.

Un claro ejemplo lo han tenido personajes marcados por la ambición desmedida, gusto por los lujos y matrimonios por conveniencia. Veamos algunos casos:

Jacqueline Lee Bouvier, conocida como Jacqueline Kennedy por casarse con el desaparecido expresidente norteamericano John Kennedy. En su nombre de soltera existen cuatro vocales I. Si leen su biografía completa, develarán su tendencia al gasto impulsivo y exigencia en el confort. Al casarse con el expresidente, las cuatro E continúan cuando adopta el apellido de su esposo. Al fallecer este, Jacqueline rápidamente se casa con un multimillonario griego, quien también falleció, Aristóteles Onassis. Miren cómo el caballero griego tenía un nombre que empezaba con la vocal A y lleva dos consonantes S en el nombre. La consonante S en numerología posee un valor de 1, número de los líderes e iniciadores de grandes empresas.

La vocal E usada en un nombre o los dos contribuye a que una persona alcance trabajo e incluso asumir cargos específicos desde joven. Pero debe usarse con tino porque con más de dos vocales E dentro de uno o los dos nombres notarán cómo la persona suma y resta todo el tiempo. Pareciera pensar ¿cuánto tienes?, ¿cuánto vales?

También tenemos ejemplos de empresarios famosos como Warren Buffett, empresario americano que ha permanecido en la lista de los hombres más millonarios del mundo. O Sergey Brin, científico y empresario ruso fundador de Google.

Cabe resaltar que la capacidad de hacer dinero depende mucho también de la hora de nacimiento, porque astrológicamente existen personas que nacieron con planetas como Júpiter, el que rige la abundancia en una excelente casa del zodiaco (la casa 2). Para que lo comprendan es preciso que se hagan una carta natal, libreto de vida energético que les permitirá conocerse y saber en qué aspectos poseen talentos para desarrollar y cómo afrontar debilidades emocionales.

10. No empieces un nombre con las consonantes B, V, C, ni con las vocales I, O, porque las consonantes mencionadas (B y V), sobre todo la B, denotan miedo a decidir, dudas (procastinación, ¿lo hago o no lo hago?, ¿voy o no voy?), miedos ajenos. La V significa tendencia a los apegos afectivos (Valeria, Violeta) o la precocidad, como en el caso del nombre Valeria; me refiero a querer mostrarse como alguien mayor desde pequeña. Si tu nombre empieza con B, V y C, te corresponde usar agenda, entrenar la responsabilidad y aprender a lidiar con la susceptibilidad como en el caso del nombre Begonia, Valery, Virginia.

La vocal C sola implica tendencia al autoritarismo si la combinas con la vocal A, como en el nombre Carla (son damas complicadas, tercas, duras, inclementes a veces) y Cecilia (además, son damas súper ansiosas, nerviosas, pero chistosas y aceleradas). Si ustedes pronuncian solo la mitad del nombre Carla, escuchen cómo suena, cómo vibra; con Cecilia hagan la prueba por partes.

He tenido más de siete pacientes con el nombre Carla con niveles de intolerancia alta, pero con excelente capacidad de gestión empresarial y firmeza en los negocios. Les toca entonces trabajar en su forma de pensar y vencer la impulsividad. En el caso de las damas que se llaman Cecilia, los nervios a flor de piel saltan a la vista en elevados porcentajes; otras parecen intranquilas y eléctricas siempre y, en momentos de tensión, pierden la paciencia y se desesperan hasta gritar o llorar. Revisen su lista de amigos, familiares y anoten. Si tienes este nombre, usa el diminutivo “Ceci” y así bajarás la vibración de las otras vocales cuando te hablen.

11. No combines vocales U o I en el nombre del bebé, porque además de ansiedad atraes alergias y confusión emocional, depresión, camino complejo afectivo (Luis, Luciano, Lucía. Luana). De setenta caballeros con el nombre Luis, sesenta y ocho tienen alergias nasales dentro de mis estudios estadísticos y los dos restantes poseen tendencia a las intoxicaciones.

12. Jamás excedas de una U en el nombre, porque atraes tendencia a la obsesión con ideas específicas, dependencias, miedos notables, hipocondría a veces. Si está combinado con otro nombre poco favorable, la cosa empeora. Por ejemplo, evitar Úrsula (tendencia a la dependencia afectiva, conflictos de apariencia, depresión, alergias).

13. Coloca como máximo una vocal O en el nombre, así sean dos nombres, porque una vocal O es orden y disciplina, pero más de una vocal O significa tendencia a la personalidad dominante, desear controlar la vida de los demás, intolerancia. Como ejemplo tenemos los nombres: Roberto, Marco Aurelio, Rosario, Rodolfo Antonio.