Introducción


Kôan, “Luces del Camino” que nos conducen desde la Meditación a la Contemplación1

Los Kôan se han dividido en ocho etapas que nos guiarán hacia la madurez humana y el crecimiento en el Amor2.

En las ocho etapas está todo el camino para la unión con el Amado, el Camino, que nos llevará a dar la mano a otros, principalmente a los últimos y a los que buscan a alguien que les ayude.

En todas ellas encontramos una persona y el Amado, el Camino. La persona es uno mismo, y el Amado es Jesús, el Camino Verdadero y Vivo, que nos lleva al Todo, o sea, a Dios.

El orden en que aparecen no es estrictamente el que tienes que pasar tú, sino que son una referencia para ti, que quieres llegar a la Unidad con el Camino y dar la mano a otros.

La persona busca porque antes el Camino lo busca a él.

Buscamos porque algo ha ocurrido en nuestras vidas que nos hace buscar. No temas. En la medida que nos acercamos al Camino, somos más nosotros mismos, pero verdaderos, soy más yo en la medida que me uno al Camino.

No me disuelvo, tengo más verdadera sustancia de mí mismo, pero es el Camino el que dirige y guía ya mi vida.

Las ocho etapas han sido posibles gracias a San Juan de la Cruz y a Santa Teresa de Jesús3. Los libros de San Juan de la Cruz Subida del Monte Carmelo, Noche Oscura, Cántico Espiritual y Llama de amor viva nos han servido como estructura básica.

Son también San Juan de la Cruz, en Subida del Monte Carmelo, y Santa Teresa, en Castillo Interior, quienes nos ofrecerán las claves para poder dar el paso definitivo hacia el Camino que nos espera en “la interior bodega”, pues allí “de mi Amado bebí”4.

Varios serán los libros que recomendamos para estudiar los Kôan de San Juan de la Cruz5 y de Santa Teresa6, aunque pueden utilizarse otros.

Aconsejo adquirir el poster del Monte Carmelo7 en tamaño grande, ya que con un golpe de vista podremos darnos cuenta de la gran aventura que nos espera.

Este libro está pensado para el que tiene dudas, para la gente común, entre la que me incluyo. Va dirigido especialmente a las personas que buscan y no han encontrado; a los que están cansados de lo rígido e impositivo, donde el maestro/a se convierte en un “dios”; a los que encuentran extraños los ritos de otras culturas; a los que desean que cicatricen sus heridas con lo religioso y quieren reencontrarse con sus raíces; y, por último, a los que desean probar la miel y están cansados de tantas palabras sobre sus deliciosas propiedades.

También está indicado para los Buscadores de la Verdad, los incansables buscadores del Camino, ellos han nacido para tan alto objetivo. Descansa cuando estés cansado, pero no vuelvas atrás, te espera una relación íntima y profunda con el que hace que busques. Has nacido para ser tú mismo y conseguir la madurez humana.

Pero que tu búsqueda no te lleve ni a manipular a otros ni a que nadie te manipule a ti.

Que tu búsqueda no te haga ser rígido ni intransigente, sino que te ayude a ser permisivo, tolerante, alegre, optimista, y que principalmente, te lleve a “dar la mano a otros”. Yo apuesto en la dirección de una espiritualidad del gozo y la ternura.

Busca al maestro/acompañante que sea un amigo, pues te conducirá a tu Amigo interior, el Amado, el Camino como Verdadero Maestro Interior.

Cuidado con los maestros/dioses, que son impositivos y se irritan a cada acción tuya. Los tiempos de la intransigencia ya han pasado.

El maestro/acompañante es un amigo que aprende contigo desde la igualdad, él se pone a tu servicio, y no al contrario.

Los Kôan, los maestros/acompañantes, los métodos y sus formas son como el dedo que apunta a la luna; no son la luna, no son la Verdad, no son el Verdadero Maestro, no son el Camino, son señales, y su objetivo es iluminar el camino interior que te conducirá hasta el Verdadero Camino.

Busca y encontrarás a ese “Maestro Interior” que es el único Maestro: “El Amado”, “El Amigo”, “El Camino”.

Si estás cansado de buscar, pero aun así sigues, encontrarás al que te busca desde “antes de que nacieran tus padres”. ¿Qué puedes hacer? Solo seguir buscando al “Camino escondido en tu interior”, en su morada más profunda que está en ti mismo.

Este libro, Kôan inspirados en San Juan de la Cruz, forma parte de la colección “Luces del Camino”8, un conjunto de enseñanzas extraídas tanto de Oriente como de Occidente, cuyo principal objetivo es favorecer una correcta y actualizada compresión de los principios Zen y de los místicos cristianos (principalmente San Juan de la Cruz, Santa Teresa de Jesús y San Ignacio de Loyola), para facilitar la práctica de aquellos que buscan experimentar el caminar hacia la madurez humana y Unión con el Camino.

Su principal aplicación reside en el campo de la Meditación y la Contemplación. Con los Kôan de San Juan de la Cruz pretendemos conseguir “sosegar la casa” de la razón y el pensamiento lógico, para pasar de la Meditación a la Contemplación y poder recibir el regalo de experimentar un encuentro con el Maestro Interior.

1. Kôan es un término Zen, que significa “Luz del Camino”. Un gran maestro vive y siente una experiencia muy intensa, y esa experiencia la expresa con un poema o unas palabras. Estas palabras son los Kôan que han sido creados para iluminar nuestros pasos desde nuestro interior. Es necesario fiarse de ese gran maestro, y en este caso de San Juan de la Cruz, como Gran maestro de experiencia. Si nosotros, iluminados por esa luz, perseveramos en la búsqueda del Camino, llegaremos también a saborear la experiencia del Camino.

P. Vidal, Kôan inspirados en Jesús de Nazaret (Zen-Ignaciano), Luces del Camino Verdadero y Vivo. (En preparación).

2. P. Vidal, Etapas Zaike-Zen en el camino de Madurez humana, Inspiradas en el Zen y en los Místicos Cristianos. (En preparación).

3. P. Vidal, Kôan inspirados en Santa Teresa de Jesús, Luces de occidente para iluminar el camino. (En preparación)

4. San Juan de la Cruz, C 26.

5. San Juan de la Cruz, Obras Completas, edic. preparada por Maximiliano Herráiz, Edt. Sígueme.

San Juan de la Cruz, Obras Completas, edic. preparada por Federico Ruíz, Edt. de Espiritualidad.

San Juan de la Cruz, Obras Completas, edic. preparada por Luciano Ruano, Edt. BAC.

6. Santa Teresa, Obras Completas, edic. preparada por Maximiliano Herráiz, Edt. Sígueme, Salamanca. Santa Teresa, Obras Completas, edic. preparada por Tomás Álvarez, Edt. Monte Carmelo.

M. Herráiz, Introducción al Castillo Interior, Edt. Monte Carmelo.

T. Álvarez, Comentarios a Vida, Camino y Moradas de Santa Teresa, Edt. Monte Carmelo.

P. Vidal, Kôan inspirados en Santa Teresa de Jesús, Luces de occidente para iluminar el camino. (En preparación)

7. Poster de la Subida al Monte Carmelo, edit. Casa de Espiritualidad “El Carmen” Onda (Castellón).

8. Colección “Luces del Camino”:

1. P. Vidal, Kôan inspirados en San Juan de la Cruz, Luces de occidente para iluminar el camino.

2. P. Vidal, Automasaje Zaike-Zen (Una ayuda para meditar hoy), Luces de Oriente para sosegar la casa del cuerpo y de la mente.

3. P. Vidal, Seis textos esenciales del Zaike- Zen (Zen para todas las personas), Seis luces de Oriente para iluminar el camino. (En preparación).

4. P. Vidal, Kôan Zaike-Zen, Luces esenciales de Oriente para iluminar el camino. (En preparación).

5. P. Vidal, Metodología Zaike-Zen de Meditación y Contemplación (Sin perderse en la nada). (En preparación).

6. P. Vidal, En busca de la Verdad (Mi experiencia Zen y Místicos Cristianos), Luces y sombras en el camino. (En preparación).

7. P. Vidal, Etapas Zaike-Zen en el camino de Madurez humana, Inspiradas en el Zen y en los Místicos Cristianos. (En preparación).

8. P. Vidal, Psicología espiritual Zaike-Zen y los engaños, Luces para iluminar la mente en el camino. (En preparación).

9. P. Vidal, Acompañamiento espiritual Zaike-Zen en el camino, Luces para iluminar al Acompañante y al Acompañado. (En preparación).

10. P. Vidal, Kôan inspirados en Santa Teresa de Jesús, Luces de occidente para iluminar el camino. (En preparación).

11. P. Vidal, Kôan inspirados en Jesús de Nazaret (Zen-Ignaciano), Luces del Camino Verdadero y Vivo. (En preparación).