INTRODUCCIÓN

Gato común, gato de raza, de pelo largo, de pelo corto... ¿Cuál escoger entre tan gran variedad de posibilidades?

Los criterios no deberían ser solamente físicos. El futuro dueño debe conocer también el comportamiento de las distintas razas, sus particularidades y sus necesidades, así como su forma de vida.

Sólo es posible hacer la elección correcta tras un estudio preciso.

Dicha decisión influirá en la relación que usted mantendrá con su gato.

El hecho de conocer a grandes rasgos el comportamiento, el mantenimiento y la salud de su gato le ayudará a entender sus obligaciones como propietario, pero también a apreciar los placeres que ofrece una vida en común.

ELECCIÓN DEL GATO

En las siguientes páginas, le proponemos que elija entre las diez razas de gatos más corrientes, ¡aunque ello no quiere decir que no pueda escoger otra!

Le recomendamos, eso sí, que se informe bien primero

Siamés

Tal como su nombre indica, el siamés proviene de Siam (antiguo nombre de Tailandia). Se le menciona por primera vez en un manuscrito que data de 1350. El siamés era un regalo real, y el hecho de recibir uno, un raro honor.

El primer estándar lo fijó Harrison Weir en 1889. Eran animales mucho más rechonchos que los siameses que conocemos en la actualidad, con el rostro más redondeado y la cola bastante gruesa, que podía ser acodada o en forma de gancho.

Se toleraban el estrabismo, la cola quebrada y los ojos verdes.

Actualmente, el estándar de 1889 está completamente olvidado. La cabeza es pequeña y triangular; la nariz, larga, y las orejas, separadas. La cola debe ser recta (la cola acodada se considera una tara transmisible); en cuanto al estrabismo, que era uno de los elementos admitidos en el estándar antiguo, ha pasado a ser un defecto que conlleva la descalificación, pero sigue siendo difícil de corregir.

Al nacer, el gatito siamés es blanco y empieza a adquirir color hacia el quinto día.

El pelo corto, de textura sedosa sin apenas subpelo, requiere que se le de unos cuidados mínimos.

El siamés posee carácter, ¡aunque no forzosamente malo! Es muy parlanchín: no maúlla, sino que «habla». Su fidelidad es a toda prueba; es un gato de un solo dueño, pero también puede ser el animal de la familia. Adora a los niños, con quienes se comporta con extraordinaria dulzura.

Cartujo

La primera referencia a los gatos azules franceses surge en 1558, en el poema de Joachim du Bellay «Versos franceses acerca de la muerte de un gatito».

Sin embargo, se debe esperar hasta 1728 para que aparezca oficialmente el nombre de chartreux en el Diccionario universal del comercio de historia natural y de las artes y los oficios de Savary de Bruslon: se le describe como un «tipo de gato con el pelo azulado. Su pelaje es muy valorado por los peleteros».

El cartujo no se convirtió en animal de compañía hasta el siglo XX.

La selección del cartujo comenzó exactamente en el año 1920 a partir de gatos azules que vivían en estado salvaje en Belle-Île-en-Mer, en la región francesa de Morbihan.

Están aceptadas todas las tonalidades del gris-azul, desde el azul ceniza hasta el azul pizarra, pero los primeros son los más numerosos.

El manto espeso del cartujo necesita ser cepillado a diario para eliminar el pelo muerto; con este fin también hay que cepillarlo enérgicamente cuando, en junio, muda el pelo de invierno.

El cartujo es amigo de toda la familia. Es tranquilo, sociable y se siente bien con todo el mundo. Se lleva perfectamente con los niños y muy pocas veces se muestra agresivo.

Maine coon

Según algunos expertos, el maine coon, primer gato de raza americano, es el resultado del cruce entre los gatos salvajes indígenas de pelo corto y aquellos introducidos en el continente americano por los marinos europeos (en la época de la navegación a vela, se embarcaban gatos en los barcos para que dieran caza a las ratas y otros roedores).

El maine coon llegó a Europa, concretamente a Alemania, en el año 1972. Tuvo que pasar casi una década más para que apareciera en Francia; en España, en cambio, los primeros ejemplares fueron importados en 1990.

El maine coon es el gato doméstico de mayores dimensiones. Alcanza la plena madurez a los cuatro años, cuando su peso oscila entre los 6 y los 8 kg. Algunos machos pueden alcanzar entre 12 y 14 kg. Las hembras pesan aproximadamente 3 kg menos que los machos.

Están admitidos todos los colores, excepto los patrones siameses y colourpoint. Se trata de un gato de pelo semilargo que requiere, por lo general, cuidados mínimos.

El gatito es muy juguetón y curioso, y mantiene durante toda su vida este comportamiento. También resulta tranquilo y afectuoso, y se adapta perfectamente a la vida en un piso, aunque le encanta salir al parque.

Abisinio

En Inglaterra, el abisinio fue expuesto por primera vez en el año 1871 en el Palacio de Cristal de Londres. Sin embargo, la raza fue reconocida hasta el año 1882, y su estándar data del año 1889.

El abisinio desembarcó en Estados Unidos en 1909 y está reconocido desde 1917 por la asociación felina más importante de ese país, la Asociación de Aficionados a los Gatos (CFA).

Los dos colores de base del abisinio son:

• el liebre,

• el sorrel.

Al tener el pelo corto, requiere pocos cuidados.

El abisinio es un gato de mucho temperamento y fuerte personalidad, por lo que su dueño debe ser exigente con él. Necesita bastante espacio, aunque puede acostumbrarse a vivir en un piso. Es muy juguetón e inteligente, y casi siempre consigue que sus propietarios hagan lo que él quiera.

Gato común

El gato común puede ser de cualquier color: blanco, negro, pardo, pelirrojo... Claro u oscuro, su pelaje puede ser sólido, atigrado, manchado o tricolor. Puede tener el pelo corto, largo, rizado, ondulado o liso.

Los gatos comunes tienen, cada uno, su temperamento propio. Además, se trata de animales extremadamente resistentes y vigorosas que prácticamente no necesitan cuidados particulares.

Sin duda, es la raza más difundida.

Azul de Rusia

A mediados del siglo XIX, este gato fue presentado con los nombres de gato de Arkhangelsk, Russian shorthair, azul de Malta, gato español y gato americano azul. En los años sesenta del siglo pasado, algunos criadores se unieron para recuperar el tipo original del azul de Rusia, y en 1984 fue reconocido por todas las asociaciones.

El azul de Rusia es un gato tímido, al que le gusta la tranquilidad, y aunque es muy juguetón, tiene una naturaleza tranquila y hogareña. No requiere ningún cuidado en particular.

Oriental

Aparte del color del pelo y de los ojos, son pocas las diferencias entre el oriental de pelo corto y el siamés.

La raza está reconocida en todos los países desde 1976.

El pelaje del oriental necesita pocos cuidados, que se reducen a un cepillado semanal con un cepillo de cerda natural.

Es un gato inteligente, sociable y curioso que no soporta la soledad. Le gusta que lo acaricien y lo mimen. Su amor por la actividad y el juego lo lleva a hacer algún alboroto, pero se tranquiliza rápidamente. Es también un cazador hábil. Aprende sin grandes dificultades a caminar con correa.

Persa

El gato persa es el angora turco. Entre los años 1623 y 1630, el italiano Pietro della Valle se encontró en Turquía un gato blanco de pelo semilargo, muy diferente a los gatos europeos de pelo corto, y lo llevó a Italia. Estos angoras turcos son con toda probabilidad los antepasados del persa actual.

Se admiten todos los colores:

• En color sólido o escama: negro, chocolate, pelirrojo, azul, lila, crema, escama negra, escama chocolate, escama azul-crema, lila y blanco, y blanco con ojos azules, rojos o impares.

• En smoke: colores idénticos a los sólidos y escama, a excepción del blanco.

• En shaded: shaded plateado (ojos verdes), pewter (ojos rojos), red shaded cameo, golden shaded, cameo crema shaded, cameo escama de tortuga, cameo azul crema y todos los demás colores sólidos y escama.

• En tipped (punta del pelo de color): chinchilla, cameo escama roja, cameo escama crema, cameo escama de tortuga, cameo azul-crema y todos los demás colores sólidos y escama.

• En tabby (sólo jaspeados): negro, chocolate, pelirrojo, azul lila, escama, escama chocolate, escama azul, escama lila, crema y otros motivos tabby.

• En bicolor: están autorizados con blanco todos los colores sólidos escama, tabby, smoke, shaded desde las puntas y tabby plateado.

El mantenimiento de un persa constituye una obligación importante. Al ser un gato de pelo largo, su manto requiere una dedicación constante. Todos los días deberá pasarle el cepillo metálico para eliminar el pelo muerto y, sobre todo, para evitar la formación de nudos en su abundante pelaje.

Persa silver y golden

Es un persa con el manto blanco en el silver y dorado en el golden. Una línea negra adorna el margen de los párpados.

Persa smoke

La base plateada del pelaje, que cubre entre un tercio y un cuarto de la longitud del pelo en la base, tiene que estar repartida uniformemente en todo el cuerpo (cabeza, patas y cola incluidas).

Persa tabby

Existen tres variedades de tabby: el motivo blotched, el motivo spotted y el motivo mackerel. El color de base debe contrastar con las marcas tabby.

Persa particolor

El persa se denomina particolor cuando aparece blanco en el manto, independientemente de la base (classic, tabby, silver o colourpoint).

Persa colourpoint

El hecho de introducir el cuerpo de un persa en el pelaje de un siamés no debió de resultar una tarea muy fácil.

Esta raza se reconoció y se fijó definitivamente en Gran Bretaña, en 1955. En 1958, un persa colourpoint ganó el Premio al Mejor Pelo Largo. En buena lógica, el colourpoint se cría en todos los colores del siamés. Es un gato de pelo largo, por lo que requiere un cuidado constante.

El persa colourpoint ha tomado los mejores rasgos de carácter de sus progenitores: del persa tiene la placidez, y el gusto por la comodidad y el calor de un hogar tranquilo; el siamés, por su lado, le ha aportado una curiosidad y una vitalidad que le distingue de otros persas.

Persa chinchilla

Normalmente se le llama chinchilla y no persa chinchilla. Es un persa con todas las características físicas de su raza, pero se distingue claramente por su pelaje incomparable.

Todo parece indicar que la raza se remonta al siglo XIX y es el fruto de la unión entre un persa silver tabby y uno de color sólido o smoke. Es un poco celoso y no soporta la soledad, pero es juguetón, mimoso y tierno. Le gusta la vida en los pisos —es un persa—, aunque no rechaza un paseo por el exterior de vez en cuando.

Sagrado de Birmania

Se cree que, a principios del siglo XX, algunos viajeros llevaron de Birmania a Europa, concretamente a Francia, unos gatos que respondían perfectamente a la descripción de los gatos sagrados.

La raza fue reconocida por la Federación Internacional Felina (FIFe) en el año 1926. En 1950, el birmano pasó a llamarse sagrado de Birmania con el fin de evitar la confusión con el burmés (birman en inglés).

El sagrado de Birmania lleva siempre un motivo himalayo (colourpoint). Su manto es semilargo y requiere cuidados mínimos: basta con pasarle semanalmente un cepillo un poco duro (no el peine de metal, que puede dañar su delicado subpelo).

Por lo general, disfruta con la tranquilidad y no se adapta fácilmente al alboroto. Aprecia el contacto con el ser humano, pero es un gato de una sola persona, con la cual mantiene una estrecha y especial relación.