¡Hola! Mi nombre es Álvaro Kruse, y si has abierto este libro, imagino que puede ser por varias razones. La primera podría ser el hecho de que quieres emprender y no sabes por dónde empezar, o ya lo has hecho, pero aún sientes que no has arrancado del todo. También puede ser porque me conozcas de YouTube, plataforma en la que empecé esta aventura que ahora se ha convertido en mi día a día. Sea cual sea la razón, quiero que pienses en este libro como una guía para hacer lo que de verdad quieres en la vida y conseguir que eso suceda. Y no quiero sonar como un infocomercial, pero si yo lo he conseguido, ¿por qué no ibas a poder hacerlo tú? Sin embargo, haber llegado hasta aquí no significa ni que mi vida sea perfecta ni que el camino haya sido fácil.
En estas páginas voy a contarte cómo creé una línea de cosméticos que revolucionó la industria de la belleza, una empresa de artículos de lifestyle internacional y una agencia de eventos y relaciones públicas que crea unos eventos bestiales con millones de impactos. Y aunque tan solo tengo veinticuatro años, la edad que tú tengas cuando estés leyendo este libro no importa en absoluto. Reconozco que he hecho muchas cosas en muy poco tiempo, pero eso forma parte de mi personalidad. No soy capaz de estar quieto un segundo y no sé decir que no a nada, aunque más adelante te contaré cómo eso me ha llevado a tener más de un problema. Sin embargo, todos somos igual de válidos para emprender a los diez, a los veinte o a los ochenta años. Si sientes pasión por algo, es razón más que suficiente para comenzar tu viaje.
En todo este camino he tenido momentos de gloria y otros en los que quise a tirar la toalla, pero eso es lo que tiene emprender. Es una montaña rusa de emociones en la que hay días en los que te comes el mundo y otros en los que crees que nada de lo que haces es suficiente. Aun así, como en las montañas rusas, aunque sabes que vas a asustarte y que habrá partes en las que querrás cerrar los ojos, es algo que te quita el aliento y quieres repetir. Es una sensación que no vas a encontrar haciendo otra cosa y merece mucho la pena.
También me gustaría que no tuvieras prejuicios al buscar entre las páginas de este libro, y que no pienses que es un libro de un youtuber más mientras disfrutas de él. No quiero convertirte en un fan después de leer esto ni abrirte la mente si te asusta un chico maquillado. Quiero que mires mucho más allá de todo eso y veas a un chico de veinticuatro años que tenía una meta, y que tras alcanzarla se puso otra, y tras esa, otra más… Hay que dejar atrás esa mentalidad del que solo sabe poner excusas cuando tiene el premio más cerca de lo que piensa. De hecho, mientras escribía este libro le repetía a mi editora que no quería que fuese el típico libro de youtuber. Es decir, no quería dedicárselo solo a mis suscriptores, sino a toda esa gente que sabe lo que quiere, pero que necesita formar el camino que la llevará hacia ello. Cuando terminé me di cuenta de que no me importa si se percibe de esa manera, si con eso he ayudado a que una persona cumpla su sueño, aunque solo sea un poquito.
Tampoco quiero que creas que este es uno de esos libros llenos de frases inspiradoras en los que la vida es de algodón de azúcar y que te recuerdan constantemente que tú puedes. Y aunque no voy a ser yo el que te diga que puedes con todo, porque todos tenemos momentos fuertes y debilidades, también quiero mostrarte cómo he conseguido dar protagonismo a mis fortalezas para así llegar a mi meta. Y sí, todo el mundo tiene derecho a soñar.
Cuando empecé a desarrollar la necesidad de emprender, creé una carpeta en mi ordenador con todas las cosas que deseaba tener. Añadí maquillaje, por mi línea de cosméticos, fotos de oficinas preciosas, con mi equipazo, e incluso fotos de vestidores de ensueño, que era lo que me motivaba en aquella época. No existen motivaciones no válidas porque cada persona es un mundo, y si el simple hecho de tener tal cosa material representa el éxito para ti, adelante. Más tarde me enteré de que esto se llamaba vision board o, lo que viene a ser lo mismo, un tablero en el que puedes visualizar todo lo que quieres para recordarte a ti mismo qué es lo que te espera después de trabajar duro. También es una herramienta muy importante para desarrollar la acción que vas a llevar a cabo y así conseguir cada una de esas cosas. ¿Quieres comprarte un coche? Entonces deberías ahorrar cierta cantidad cada mes, recortar de otros gastos, hacer horas extras… Selecciona acciones específicas y adáptalas todo lo posible a tu vida real.
Una vez más, no existen objetivos tontos, aunque a los demás se lo parezcan. De hecho, gran parte de esa gente no tiene objetivos definidos y quiere que tú tampoco los tengas, para así estar al mismo nivel espiritual. Y aunque no creo que sea necesario que te lo diga, si sabes que no tienes acceso a la compra de un Ferrari en este momento, no te pongas como objetivo un Ferrari. Por supuesto, puedes tenerlo a largo plazo, pero con objetivos inalcanzables solo conseguirás desmotivarte en tu camino hacia el éxito.
Creando poco a poco y visualizando todo lo que quería, creía que estaba perdiendo el tiempo, en vez de lanzarme y hacer algo para conseguir todo eso, pero lo que realmente estaba haciendo era darme a mí mismo el derecho de soñar. Estaba plantando en mi cabeza las semillas de todo lo que quería hacer, y el trabajo que llevé a cabo después sería el agua que haría que esas semillas crecieran. Poco a poco, estaba adaptando mi mente al éxito. Por eso de que, si te lo crees, pasará.
Espero que este libro te aporte todo aquello que necesitas para continuar tu camino, y que lo pintes por encima, subrayes frases y pegues marcapáginas por todas estas hojas. No pretendo ser un maestro o un ejemplo que seguir. Simplemente soy alguien que, como tú, tiene un objetivo y poco a poco, con esfuerzo y dedicación, lo está consiguiendo. ¿Me acompañas en esta aventura de locos que estoy viviendo?