1.4. Las cinco preguntas esenciales que conducen
a la integración
Quien ha entrado así a formar parte de la organización, ha
debido responder previamente de modo favorable a cinco pre-
guntas esenciales:
a) qué se hace y, por tanto, qué tengo que hacer yo, cuál es
mi labor, mi puesto, mi responsabilidad, qué se espera de mí en
concreto por parte de la organización
b) cómo se hace, qué habilidades se requieren, qué procesos
productivos o de comercialización, etc., he de aplicar
c) con quién se hace, quiénes son mis compañeros de trabajo,
cuál es el grupo humano con el que convivo y me relaciono, qué
tipo de relaciones profesionales e interpersonales son ahí posibles
d) por qué se hace esto y, especialmente, por qué soy yo el
que lo tengo que hacer
e) para quién se hace, cuál es el destinatario del bien o servi-
cio que he de producir yo.
Estas cinco preguntas son la base de la Filosofía Empresarial
que yo acepto en teoría y de distinto modo al entrar en la
empresa y con el transcurso de los años. Su contenido lo voy
contrastando con las experiencias de lo que yo vivo día a día al
lado de los demás en la vida real, que es lo que denominamos
Cultura Empresarial. Por ello, la Dirección de una empresa pro-
pone una filosofía a sus miembros y apoya una Cultura que ha
de ser creíble en relación con la Filosofía propuesta si queremos
conseguir resultados económicos, pues son los propios trabaja-
dores los que desarrollarán la con-fianza o des-confianza en base
a sus experiencias personales, que constituyen la base de la mar-
cha de la empresa. Todo ello resulta clarísimo en organizaciones
tan diversas como pueden ser, por ejemplo, un club de fútbol,
una organización modelo y, también, una organización terrorista.
Adviértase que basta que una de estas respuestas se respon-
dan por el sujeto en sentido negativo para que su integración en
la Organización se cuestione seriamente a pesar de estar muy
interesado en realizar esa tarea (= inclusión) pero que preferirá
hacerlo en otro sitio. Por ejemplo: una persona puede estar capa-
citada y llena de ilusión por dirigir un hospital, por ejemplo, en
el Tercer Mundo, pero no precisamente este centro médico de
una ciudad en un país desarrollado: la respuesta al para quién no
Introducción a los recursos humanos en la empresa
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