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sobre la comunicación por carTa
Sévigné, Quevedo y otros: “Análogo es el interés humano, histórico
y psicológico de los epistolarios o colecciones de cartas particulares.
Sus autores se nos muestran a veces con la llaneza y relativa sinceridad
del trato diario; asistimos a sus afanes e ilusiones y participamos en
sus reacciones personales frente a los acontecimientos externos. De la
antigüedad son famosas las cartas de Cicerón y las de Plinio el Joven.
Francia cuenta con una rica y sugestiva literatura epistolar, como
corresponde al gusto francés, tan reiteradamente manifiesto, por el
análisis psicológico. Sobresalen las cartas de Madame de Sévigné, en
el siglo xvii. En España se distinguen las de Fray Antonio de Guevara
(1481?-1545), el Beato Juan de Ávila (1500-1569), Santa Teresa (1515-
1582), las de Felipe II a sus hijas, Quevedo (1580-1645), Leandro
Fernández de Moratín (1760-1828), Valera (1828-1905), etc” (Lapesa,
1995, 192). Sin olvidar las de Erasmo.
Con el fin de aclarar que no todo lo que se escribe bajo los for-
malismos de las cartas responde exactamente al sentido de las cartas
privadas, que se alejan de la voluntad de literariedad, el siglo i dio
buenas muestras de material de carácter privado. De esa época es la
obra de Cicerón.6 Pero de esa obra hay que distinguir las Epistolae ad
familiares, que son en su mayoría de carácter público, de las 443 cartas
restantes que también se publicaron de Cicerón: “Las más interesantes
por su sinceridad y espontaneidad son las que componen los 16 libros
de epístolas dirigidas a su amigo y banquero Tito Pomponio Ático,
que abarcan el periodo entre el 68 y noviembre o diciembre del 44. [...]
El tercer grupo7 está formado por tres libros que contienen 27 cartas
enviadas a su hermano Quinto entre el invierno del 60 y el otoño del
54. [...]El último grupo de cartas, 26 en total, agrupadas en varios libros
de los cuales sólo nos ha llegado el ix, contiene las escritas durante
unos pocos meses del 42 a Marco Bruto [...]; de estas 26 cartas, 17 tie-
nen como remitente a Cicerón, ocho dirigidas a él por Bruto, y uno de
este último a Ático” (Pérez, 1997a, 320). Prueba del carácter privado de
estas cartas de Cicerón es el uso de un lenguaje cotidiano para dirigirse
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6 Hay otros escritores de los que han llegado epistolarios de carácter privado durante esta época de
la Roma republicana: Quinto Tulio Cicerón –hermano de Marco Tulio– (102-43 a.C.), Marco Junio
Bruto (85-43 a.C.), Julio César (100-44 a.C.), Marco Terencio Varrón (116-27 a.C.) o Augusto (63-14
d.C).
7 El segundo grupo de la descripción que realiza Leonor Pérez Gómez hace referencia a las Epistulae ad
familiares.