185
las carTas al direcTor en la Teoría del periodismo
coherentes con los conocimientos y las valoraciones relativas a los obje-
tos actitudinales” (1992: 102). Entre las más evidentes para lo que a este
trabajo respecta: las altas y las bajas en la suscripción de la revista.
La deconstrucción del texto
Un texto es un cuerpo: un ente perfecto cuyo funcionamiento
depende del equilibrio de las partes. Para que una persona trabaje sobre
ese cuerpo con voluntad de análisis, figura a la que Eco denomina
lector de segundo nivel y que se distingue del lector de primer nivel
porque su pretensión no es sólo comprender lo que se ha leído, sino
entender cómo se ha construido (1996: 37), resultan imprescindibles
las herramientas que desmonten lo articulado y que muestren las cos-
turas de la criatura. Las herramientas que he utilizado para el descubri-
miento de los movimientos tácticos que permiten que entendamos el
texto también como una estrategia las ha proporcionado la lingüística
textual. Otros la denominan también ciencia del texto.
Las herramientas que proporciona la lingüística que entiende el
texto como un todo permiten formular hipótesis de construcción
del texto. Estas herramientas permiten trasladar la secuencialidad del
texto, granítica, inexpugnable, a un nuevo marco en el que sea viable
recuperar sus partes constitutivas, las ideas que lo sustentan y sus com-
ponentes más menudos. De esta manera se inicia un trayecto de vuelta
a los orígenes de cualquier texto. Un recorrido que deshace los bloques
de palabras para recuperar las ideas importantes, las que apoyan a esas
ideas de orden jerárquico superior y también la idea que engloba a las
anteriores y que se constituye en tema del texto.
El método de análisis es un método deconstructivo que va del texto
a la idea y que intenta comprender los movimientos que ha usado el
autor para llegar de la mejor manera que ha sabido a trasladar el men-
saje a su público. El método propone la hipótesis sobre el uso que ha
realizado el autor de una carta de los recursos que a su alcance tenía.
Hay que tener en cuenta en este tipo de texto que es la carta, y más
concretamente la carta al director, que los autores no son profesionales
y que no se plantean sus textos desde el oficio, sino desde el ocio. Para
amparar algunas estructuras poco ortodoxas en las que parece que se
185