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PersPectivas de desarrollo
jóvenes expertos en las nuevas tecnologías–, ya avanzados por Xavier
Berenguer326 y Alejandro Piscitelli327 en sus respectivas obras).
Por último, cabe señalar que, en el terreno del documental interac-
tivo, no se puede hablar de género documental sin referirse al medio
interactivo, y viceversa, ya que al realizar un documental interactivo,
el autor o documentalista debe contar con el sistema, la interfaz y la
tecnología, cosa que no sucede cuando se produce un documental
convencional. Por tanto, la producción óptima del documental interac-
tivo necesita de otra figura conocedora del diseño óptimo para la red,
y la programación necesaria para que el sistema funcione, una figura
cercana al creador técnico, ingeniero o programador: el diseñador de
la interfaz y su equipo. En este nuevo paradigma, tanto la figura más
cercana al audiovisual (realizador, director, guionista, etc.) como la
figura ligada al mundo multimedia e informático (diseñador, programa-
dor, arquitecto de la información, etc.) son igualmente necesarias, sin
que una sea más importante que la otra, ya que la falta de una de estas
figuras imposibilita el hecho de construir un documental interactivo
significativo. Y esto sucede en muchos géneros interactivos, como en
la ficción interactiva (videojuegos, cortometrajes interactivos, cuentos
interactivos, etc.), siempre que queramos crear una historia y que esta
sea consumida de manera interactiva. Del mismo modo, en el caso del
documental transmedia, es esencial contar con la figura del productor
transmedia, que se encargará de dotar de coherencia y sentido nuestro
universo de no ficción interactiva.
3.7. Nos encontramos en un interesante momento de transición entre
dos modelos, el tradicional y el digital, interactivo y conectado
Actualmente estamos experimentando un periodo de transición
donde conviven las formas tradicionales de producir documentales
con las nuevas formas de expresión propias de los “nuevos medios”.
Como se observa en el análisis sobre el estado de desarrollo de esta área
de conocimiento concreta, nos encontramos con un tipo concreto de
326. X. Berenguer, 2004, op. cit.
327. A. Piscitelli (2009). Nativos Digitales. Dieta cognitiva, inteligencia colectiva y arquitecturas de la participación. Buenos
Aires: Santillana Ediciones.