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Definición y características
del documental interactivo proponiendo algunas consideraciones para
el futuro de su producción. Según estos autores, en los últimos años
la palabra “documental” ha sido utilizada libremente para describir las
“piezas multimedia que incorporan vídeo, sin importar su naturaleza,
la técnica, el lenguaje o el alcance, aprovechando las fronteras difusas
y frágiles de la definición de documental”. Todo esto ha contribuido
a que el término documental se utilice de forma generalizada para
describir trabajos de distinta índole y naturaleza, y es por ello por lo
que hay que realizar una revisión profunda de lo que el término en sí
conlleva179. En este sentido, estamos de acuerdo en que, aprovechando
las fronteras difusas y frágiles de la definición de documental, se tiende
a calificar muchas obras con la categoría de documental interactivo,
por lo que se necesitan esfuerzos para intentar delimitar mejor su defi-
nición y alcance. En lo que discrepamos más es en el hecho de que se
hayan descrito con este término mayoritariamente obras que incorpo-
ran vídeo, y en este punto estaríamos de acuerdo en la propuesta que
defiende Hugues Sweeney, productor senior de los proyectos interac-
tivos franceses en el National Film Board de Canadá, cuando escribe:
“I am not so pleased with the word “webdoc” because the term docu-
mentary has about 70 years of history and we try to put it alongside the
term web that has only 15 years of history. Moreover, we often forget that
documentary can also mean radio or photo whereas the current definition
of webdoc is very limited and it implies working mainly with video and
the web. At the NFB, we call them interactive productions rather than
webdocs because we work with filmmakers but also with photographers,
graffiti artists, graphic novelists, web designers, web developers. We think
in terms of team work. This is very important180”.
En esta línea, puede resultar presuntuoso intentar utilizar el prefijo
web delante de la palabra documental y así intentar caracterizar todo un
nuevo formato. La palabra documental tiene más de un siglo de vida y
todavía no hay consenso con relación a su definición. En esta inves-
tigación solo propondremos nuevas posibles líneas, y en ningún caso
179. A. Almeida; H. Alvelos, 2010, op. cit., pág. 123.
180. H. Sweeney entrevista. Lietaert, M. Webdocs… a survival guide for online filmmakers. Notsocrazy! Idfa Doclab,
2011, pág. 9.