Editorial UOC 60 Teoría de las relaciones laborales...
ordinario, estando todo ello orientado a la eficacia de tal organismo social; esto
es al logro de metas organizacionales, conscientemente perseguidas por el colec-
tivo organizado. Toda organización social tiene, por tanto, su propia lógica, sus
objetivos y estrategias, su escenario, sus actores, su guión y su dirección.
Estas consideraciones nos permiten establecer una precisa diferencia, desde un
punto de vista organizacional, entre dos ejemplos de nuestra actividad cotidiana:
la de tomar el sol en la playa, en medio de mucha gente durante el tiempo libre, y
la de funcionar como profesionales dentro de la empresa que nos paga, con la que
mantenemos un vínculo contractual y en la que nos desarrollamos profesional-
mente, ejerciendo un tipo de conductas acordes con lo que se espera de nosotros.
Las organizaciones son objeto de análisis y de intervención desde una óptica
interdisciplinar. En efecto, la teoría y la práctica organizacionales se enriquecen
de aportaciones y sinergias de las más diversas disciplinas: economía, sociología,
politología, psicología, derecho, historia, antropología, ergonomía, ingeniería y
un largo etcétera.
3.3. La organización
En términos simples, una organización consiste en un colectivo de personas
asociadas para trabajar conjuntamente de cara al logro de objetivos comunes.
Las tipologías organizacionales han sido construidas atendiendo a los más di-
versos criterios: tamaño, complejidad, estructura, funciones, fines, medios, ac-
tividad, protagonistas, beneficiarios, etc. (ver Gil y Alcover, 1997; Munduate,
1997; Peiró, 1990; Quijano, 1993; Rodríguez, 1998; Salgado, 1997). Un ejemplo
de definición matizada del concepto nos lo proporciona Quijano, quien sinte-
tiza algunas de las principales aportaciones al respecto:
Las organizaciones (Quijano, 1993, pág. 181) “son formaciones sociales com-
plejas y plurales, compuestas por individuos y grupos, con límites relativamente
fijos e identificables, que constituyen un sistema de roles, coordinado mediante
un sistema de autoridad y comunicación, y articulado por un sistema de signi-
ficados compartidos (que incluye interpretaciones de la realidad, normas y va-
lores) en orden a la integración del sistema y a la consecución de objetivos y
fines. Estos fines, o el modo de conseguirlos, no siempre son aceptados por to-