Editorial UOC 58 Teoría de las relaciones laborales...
A lo largo de su historia como especie, el ser humano ha ido desarrollando di-
versas formas de actividad laboral que, desde el Paleolítico hasta la Era de la In-
formación, no han dejado de evolucionar. En la actualidad, en el marco de las
sociedades complejas, las modalidades primitivas de división de trabajo han dado
lugar a formas sofisticadas de organización del mismo. No sólo pasamos una parte
importante de nuestra vida trabajando; sino que, además, lo hacemos en el marco
de organizaciones laborales.
Abordaremos la temática de la organización del trabajo definiendo, en pri-
mer lugar, lo que entendemos por organización y valorando la aplicación de esta
noción al campo sociolaboral. Posteriormente, revisaremos esquemáticamente al-
gunos modelos y conceptos que han marcado la evolución de las formas de orga-
nización del trabajo a lo largo del último siglo.
3.1. La metáfora organizacional
Etimológicamente, organización significa la acción y el efecto de organizar;
esto es, de preparar la realización de algo. El término ha sido importado por las
ciencias sociales desde la biología. Un organismo es una entidad biológica inte-
grada por un conjunto de órganos que funciona coordinadamente como un
todo conjuntado, individual, con vida propia, diferenciado del mundo exterior
(con el que interactúa constantemente) y de los otros organismos. Si un indivi-
duo puede ser contemplado como un organismo, ¿por qué no realizar un salto
analógico, considerando un colectivo social como un supraorganismo biológica-
mente integrado, con diferenciación de estructuras y funciones, y regido por los
principios sistémicos de interdependencia, jerarquía y control?
Antes de su incorporación al quehacer científicosocial, la metáfora organísmica
ha sido utilizada desde las más diversas perspectivas (como la consagración por los
Vedanta del sistema de castas sociales, tomando como referencia el modelo del
cuerpo humano en posición vertical, o la imagen paulina de la Iglesia como cuerpo
místico) para significar la realidad de un todo complejo, polifacético, vivo, autorre-
gulado, en interacción permanente con el entorno, manteniendo homeostática-
mente la constancia de su medio interno y adaptándose permanentemente a las
fluctuaciones del ambiente exterior.