Editorial UOC 245 Capítulo II. Teoría sociológica...
las autoridades y la sociedad civil. En la moderna gobernanza, el estado y las
instituciones no estatales, públicas y privadas, así como los actores sociales
participan y cooperan en la formulación e implementación de las políticas
públicas. La gobernanza implica una cierta delegación de funciones a los ac-
tores públicos y privados, tal como también ha sido observado en las defini-
ciones del neocorporatismo. Por consiguiente, la estructura de la moderna
gobernanza no se caracteriza por su jerarquía, sino por la autonomía corpo-
rativa de los actores, así como por la creación de redes entre organizaciones.
La gobernanza es también un modo de gobierno en el marco de la integración
europea para abordar problemas que van más allá del estado-nación, como
son los problemas socio-económicos y los problemas ecológicos, pongamos
por caso. La gobernanza es una respuesta a la complejidad de la gestión polí-
tica en el contexto de la globalización. (Mayntz, 2002).
El concepto de gobernanza trata de explicar el proceso de decisión y regla-
mentación a través de las pautas de generación de normas en la Unión Euro-
pea. La Unión Europea no es un gobierno propiamente dicho (en el sentido
tradicional), sino un espacio institucional de coordinación y articulación de
las políticas, por lo cual el concepto de gobernanza ofrece un marco a partir del
cual se trata de describir cómo se generan las directivas, reglamentos y normas
que tratan de coordinar las actuaciones políticas en distintos ámbitos, desde
el supranacional al estado-nación. Por consiguiente, la gobernanza permite dar
un sentido y una orientación integradora a las políticas europeas para impo-
ner una dirección a la lógica del mercado y evitar los efectos devastadores del
mismo. Desde una perspectiva optimista, el concepto de gobernanza propor-
ciona un nuevo marco para desarrollar iniciativas de reglamentación en el ám-
bito supranacional y pone en evidencia la intedependencia entre el capital
global y el contexto social y político local. Así, alrededor del concepto de go-
bernanza se ha desarrollado un repertorio de nociones como la idea del princi-
pio de subsidiaridad, de las normas no vinculantes, la regulación flexible o incluso
el de directiva. Estas nociones sugieren modos de control suave, más relajados
y orientaciones generales y no la idea de reglamentación y subordinación de
la actividad económica a la dirección política. En el fondo estas nociones re-
flejan el escaso poder, los problemas de legitimidad y la insuficiente autoridad
política de las instituciones europeas, incapaces de reglamentar la economía
de mercado (Bulmer, 1996).