Editorial UOC 117 Capítulo I. Trabajar en la modernidad...
5.3.1. Un modelo ecológico
¿Quién no ha oído o dicho alguna vez aquello de que “trabajar es estresan-
te” o de que “ciertos empleos estresan mucho”?, ¿y quién no ha leído infor-
mes científicos sobre “el estrés del ama de casa” o sobre “el carácter estresor
de la jubilación”? Hilando más fino, nuestra generación sabe que estar em-
pleado suele estresar y que caer o permanecer en el desempleo aún estresa
más; y que el estrés del ama de casa y el de la jubilación son peores que los de
la mayoría de empleos.
¿En qué quedamos?, ¿dónde está la raíz del problema y dónde la vía de la so-
lución?, ¿sería razonable rebajar el estrés de un empleo dejando a la persona sin
trabajo?, ¿cabría alguna opción más imaginativa que la solución del estrés de la
jubilación consistente en poner a la persona jubilada en un nuevo puesto de tra-
bajo?, ¿no estaremos utilizando la misma palabra estrés para significar cosas dis-
tintas e incluso contrarias?, ¿cómo nos explicamos que causas de signo contrario
produzcan los mismos efectos?
La Psicología Social del Trabajo ha tratado de descubrir, explicar, prevenir
y paliar el estrés en el empleo. Y la especialización de la psicología social que
investiga e interviene sobre problemas sociales procura hacer lo mismo ante
experiencias como el desempleo. Durante mucho tiempo, no ha resultado fá-
cil integrar sus respectivos hallazgos teóricos. En los años ochenta del pasado
siglo, Peter Warr (1987) ha tratado de ensamblar en un único modelo ele-
mentos que parecían contradictorios y de explicar datos ciertamente descon-
certantes. Veamos algunos aspectos significativos de su aportación.
Se trata de un modelo teórico sobre la influencia general del entorno so-
cial y, más concretamente, de la situación sociolaboral, en la salud mental.
Basándose en el saber acumulado sobre los factores sociales de la salud y so-
bre los efectos del empleo y del desempleo en el funcionamiento psicológico
de las personas, elabora una teoría ecológica inspirada en el papel que des-
empeñan las vitaminas en la salud física de los organismos.
Para él, el entorno sociolaboral funciona como una fuente de vitaminas
psicosociales. La relación de las vitaminas con la salud física, al igual que la
de la experiencia laboral con la salud mental se rige por un modelo no lineal.
En efecto, para un organismo, un déficit vitamínico tiene siempre repercu-
siones negativas. Para todas las categorías de vitaminas existe una dosis de-