Editorial UOC 276 Teoría de las relaciones laborales...
de empresas afiliadas, pero incluso las asociaciones incorporadas a la CBI son
muy pequeñas. La influencia de los dos es muy difusa.
La cobertura de la afiliación en Gran Bretaña está representada por la CBI,
que agrupa en torno al 80% de las empresas. El punto de origen de esta asocia-
ción empresarial como organización es la empresa industrial, pero en los últi-
mos años se ha extendido a otros sectores, como los servicios. Dicho impulso
ha tenido una singular importancia frente a los intentos de instaurar la demo-
cracia industrial en 1977. Es decir, supone un ejemplo de un proceso de ‘organi-
zación reactiva’, frente a la propuesta del Comité Bullock, que pretendía instaurar
la democracia Industrial. Durante los últimos años, la CBI ha realizado un serio
esfuerzo por integrar la pequeña empresa, aunque no siempre con éxito. Por otra
parte, otro rasgo distintivo es que la CBI tiene afiliadas las empresas públicas, del
Estado, cuestión que no se presenta en el resto de los países. Probablemente, este
fuerte proceso de estructuración organizativa se ha acelerado con ocasión de la
expansión de la ideología neoliberal en los ochenta, y constituya una reacción
frente a la presión sindical en los años anteriores.
Esta reacción empresarial se empezó a hilvanar ya en los años sesenta. En
1965 se produjo una fusión entre la British Employers Confederation (BEC)
y la Federation of British Industries (FBI) y la NABM (National Asociation of
British Manufacturers). Es decir, a medida que toma cuerpo el avance neoli-
beral, de libre mercado, se fortalece la estructura organizativa de la CBI, como
lobby o grupo de interés.
2) Modelo germánico y escandinavo: centralización de la representa-
tividad
En este caso, las asociaciones empresariales son mucho más fuertes y centra-
lizadas. El porcentaje de empresas afiliadas es mucho mayor, por ejemplo, en
Alemania, donde el noventa por ciento de las empresas están asociadas a la po-
derosa BDA (Bundesvereiningung deuscher Arbeitgeberverbände). Sin embargo,
el poder está en las federaciones de industria, como ocurre también con el sin-
dicato alemán DGB. La influencia política de las dos es importante.
En Suecia y Alemania, la SAF y el BDA tienen una cobertura similar. Afilian
las empresas de la agricultura, la industria y el comercio. Es decir, allí donde el
sindicalismo dispone de una estructura organizativa unitaria y cohesionada tie-