Editorial UOC 25 Capítulo I. Trabajar en la sociedad...
aún conserva ocultas muchas de sus facetas y, también, entre las brumas de la incer-
tidumbre, aprender a dirigir el nuevo mundo y no ser digerida por él.”
A. King y B. Schneider (1991). La primera revolución mundial. Informe al Club de Roma
(pág. 20). Barcelona: Plaza & Janés. 1992
Observado con perspectiva histórica, el mundo del trabajo es una caja de sor-
presas. En efecto, si nos atenemos sólo al pasado siglo, veremos que algunos de
los grandes acontecimientos que lo han marcado con una huella imborrable
han irrumpido súbitamente y han pillado desprevenido al personal científico,
político y experto, que había sido incapaz de prevenirlos la misma noche ante-
rior a su puesta en escena, acaso por estar ocupado en la previsión y prevención
de futuribles de los que la historia se ha desentendido.
“Es un momento muy imprevisible. Hace quince años, nadie predecía la caída de la
Unión Soviética ni la gran expansión de Estados Unidos en los años noventa; la opi-
nión más generalizada en 1985 quedaba resumida en el libro de Paul Kennedy, The Rise
and Fall of Great Powers, en el que el declive creciente de Norteamérica parecía impara-
ble. Hoy, el poder tecnológico, financiero, militar y empresarial de Estados Unidos no
tiene rival, mientras que Japón lleva una década de estancamiento. También eran po-
cos los que adivinaban la revolución tecnológica o el descenso de la inflación.
Nunca ha sido tan difícil predecir qué va a ocurrir de aquí a diez años; es prácticamen-
te seguro que hay ya alguna transformación en marcha cuyo impacto todavía desco-
nocemos.”
A. Giddens (2000) “Luchar para defendernos” (pág. 301). En: A. Giddens; W. Hutton
(eds.) (2000). En el límite. La vida en el capitalismo global. Barcelona: Tusquets.
Un año después de la publicación de este texto, los acontecimientos del 11
de septiembre de 2001 refuerzan, si cabe, la tesis central del autor.1
Entre los acontecimientos supuestamente previsibles en la teoría y preveni-
bles en la práctica (pero que de hecho no fueron en general objeto de previsión
ni de prevención, en el siglo pasado) en el terreno más estrictamente socioeco-
nómico y laboral, destacamos los siguientes:
a) el crash del 29 y su estela de desempleo masivo-estructural;
1. “En Economía, hacer predicciones es muy complicado; sobre todo si éstas se refieren al futuro.”
Pedro Solbes, Comisario Europeo, en entrevista radiofónica por la Cadena SER (9-X-2001).