Editorial UOC 208 Teoría de las relaciones laborales...
2) Sindicalismo industrial general
El sindicalismo general es en cierta forma una de las implicaciones institu-
cionales y sociales del proceso de racionalización del trabajo que ha marcado
la historia laboral del siglo XX. Dicha racionalización forma parte de un pro-
ceso ineluctable vinculado a la lógica del propio capitalismo (rentabilidad del
capital), y ha supuesto un proceso de destrucción de los oficios tradicionales
mediante la división y fragmentación de las tareas, que ha tomado su expre-
sión más severa y despiadada en la organización taylorista del trabajo. La ra-
cionalización ha comportado el sometimiento del trabajo a la disciplina de
fábrica, y el establecimiento de pautas de control normadas y prescritas de las
tareas. En este sentido, se puede decir que la disciplina de fábrica descansa so-
bre bases racionales: método de cálculo, medición del rendimiento, control de
trabajo y predicción con pretensiones de organización científica del trabajo.
Sin embargo, desde las primeras décadas del siglo XX la racionalización taylo-
rista ha venido propiciando la reducción de costes por unidad de producto, la
economía de tiempos y la producción en masa. También ha comportado la re-
ducción de los tiempos de aprendizaje profesional, la simplificación de las ta-
reas y la rápida incorporación de fuerza de trabajo (de procedencia rural, sin
conocimientos profesionales). Asimismo, la racionalización del trabajo ha con-
tribuido al gigantismo industrial y a la emergencia de la gran empresa como or-
ganización compleja. Esto, a su vez, ha favorecido la concentración de la fuerza
de trabajo en un determinado espacio, la emergencia del obrero-masa, la forma-
ción de intereses colectivos basados en una misma experiencia material y una
misma conciencia colectiva como base del sindicalismo general.
Por otra parte, otro hecho que ha contribuido a reforzar el papel y las funcio-
nes del sindicalismo general ha sido el sistema de fijación del salario vinculado
a la estandarización de la producción taylorista. En efecto, la clasificación y ho-
mogeneización de las categorías profesionales (representada por el obrero-masa
no cualificado) y la similitud de condiciones de trabajo comportarán también
la estandarización y burocratización de los sistemas de fijación del salario. Los
nuevos procedimiento de remuneración comportarán un tratamiento más o
menos homogéneo en la gestión de la fuerza de trabajo en las grandes empresas
industriales, a lo largo del siglo XX. El empresariado necesitará contar con un in-
terlocutor colectivo para gestionar las relaciones laborales, lo cual favorecerá el
reconocimiento de los sindicatos. Después de largas luchas, el sindicalismo verá