Editorial UOC 159 Capítulo I. Trabajar en la sociedad...
2) De María a Mar
Lo que Sennet observó en Boston con Enrico y Rico aparece también en otros
muchos lugares del mundo. Nosotros lo hemos constatado en Barcelona con
una madre y su hija, María y Mar.22
María está en sus cuarenta. Hace 30 años, teniendo 15, empieza su carrera laboral
como auxiliar administrativa. Desde ahí ha escalado posiciones, paso a paso, hasta
llegar a ocupar en la actualidad un puesto de alta responsabilidad y remuneración,
dentro de su empresa, del sector de la industria cultural. Como Enrico, María ha de-
sarrollado buena parte de su vida laboral en un mundo estable.
Desde el principio, se encuentra a gusto en la empresa, donde conoce a su marido, el
padre de Mar. Allí, “ambos nos acomodamos a la seguridad del sueldo que teníamos,
que ya nos permitía vivir cómodamente y no pensamos en buscar nada más”. Se con-
sidera “una persona trabajadora y responsable”, y sobre este presupuesto basa su con-
vicción de que “podía ir subiendo de puesto, promocionarme y llegar lejos”. María se
ha visto para siempre en la empresa. Hasta recientemente, no se le había pasado por
la cabeza ni tan sólo “la posibilidad de que me echaran”. Su argumentación tenía la
contundencia y la coherencia del sentido común: “Yo le ofrecía toda mi dedicación
y la empresa me ofrecía estabilidad y tranquilidad. Yo trabajaba y, si cumplía con mi
trabajo, no debía preocuparme por nada”.
Pero los tiempos cambian, y la empresa pasa actualmente por un proceso de fusión.
El anuncio del mismo ha quebrado los cimientos de lógica de la experiencia laboral
de María: “desde que nos enteramos de que nos fusionábamos, vivo momentos de
nervios y angustia, por la incertidumbre de no saber lo que va a pasar conmigo ni con
ninguno de mis compañeros. Los rumores alimentan nuestra desesperación”. La vi-
sión de su vida laboral ha cambiado: “Estoy preocupada, no puedo imaginarme fuera
de la empresa y aunque me doy cuenta de que ningún puesto de trabajo es seguro en
la empresa, yo quiero verme para siempre en esta empresa [...]. Tengo miedo, porque
estas fusiones significan que mucha gente va a ser despedida y no sabes si puedes estar
segura o si tu puesto de trabajo está en el punto de mira [...]. Sé que algunos de mis
compañeros serán despedidos o al menos no seguirán en este departamento [...]. A
pesar de estar muy preocupada, quiero creer que, por mi experiencia y dedicación [...]
mis cualidades como trabajadora pueden hacerme mantener el puesto [...] o quizás
no, quizás influyan otro tipo de cosas...”
Comparando su historia con la de su hija Mar, reconoce que “actualmente, los traba-
jos son más inestables. Hay mucho ‘contrato basura’, y no se valora si una persona
vale más que otra. Sólo interesa cubrir el puesto y que el trabajo salga, sea como sea”.
22. Agradezco a Maria y a Mar (así las llamamos aquí) el que nos hayan hablado de su historia y de
su experiencia laborales y que hayan aceptado hacerlo en público.