Continuando en el marco de comparación internacional de desarrollo,
podemos analizar las economías en transición en base a otros dos niveles de
clasificación: la reparación de las economías para un modelo de desarrollo
informacional y su índice de crecimiento y competitividad.
En cuanto a la incorporación tecnológica en la sociedad y la economía, el
informe e-readiness de 2004 realizado por la revista The Economist presenta un
índice que mide la preparación y predisposición de las economías a un mode-
lo de desarrollo informacional basando el ranking en seis dimensiones: conec-
tividad, entorno empresarial, adopción por consumidores y empresas, entorno
jurídico y legislativo, ambiente social y cultural y soporte en servicios electró-
nicos.
Por ejemplo, Portugal presenta buenos resultados en las dimensiones de
“entorno empresarial”, “adopción por consumidores y empresas” y “entorno
jurídico y legislativo”, lo cual permite concluir que a nivel de infraestructura
empresarial y actuación del estado se reúnen las condiciones para desarrollar la
economía nacional dentro de este marco informacional.
Sin embargo, el modelo informacional no vive únicamente de esas condi-
ciones, sino que requiere condiciones tecnológicas de infraestructura, apoyo de
servicios especializados, un número suficiente de usuarios y también una mano
de obra técnicamente cualificada.
Los países y regiones que lideran la primera mitad de la lista e-readiness,
principalmente Escandinavia, el Reino Unido, EE.UU. y Holanda, presentan
© Editorial UOC 97 Sociedades en transición hacia la sociedad en red
27. Conectividad: mide el uso de la red básica de telefonía, telefonía móvil, Internet y el uso de orde-
nadores así como el coste, la calidad y la confianza que los servicios ofrecen. Entorno empresarial:
mide el clima general para las empresas en un país, como la fuerza de la economía, estabilidad polí-
tica, entorno normativo, fiscalidad, política de competencia, mercado laboral, calidad de las
infraestructuras y apertura al comercio e inversión. Adopción por consumidores y empresas: contrasta
el nivel de prácticas de comercio electrónico en cada país, es decir, cómo se usa Internet para auto-
matizar procesos de negocio tradicionales, cómo las empresas reciben apoyo para el desarrollo
logístico y de sistemas de pago online y cuál es el nivel de inversión del sector financiero del esta-
do en tecnologías de la información. Entorno jurídico y legislativo: mide el sistema jurídico de un país
y la legislación específica en la que se enmarcan las actividades en Internet, es decir, facilidad de
creación de empresas, protección de la propiedad privada, si los gobiernos prestan atención a
Internet y a su desarrollo o si se limitan a preocuparse por cuestiones de censura y control del acce-
so. Entorno social y cultural: mide el nivel de alfabetización y educación básica que son precondicio-
nes para poder usar las nuevas tecnologías, la experiencia en el uso de Internet y su receptividad y
las capacidades técnicas de la mano de obra. Soporte en servicios electrónicos, la existencia de servi-
cios de consultoría y técnicos, apoyo de back-office y soporte de la industria para estándares para
plataformas y lenguajes de programación.
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