© Editorial UOC 364 Los medios de comunicación en la sociedad en red
Asimismo es de interés para la comprensión del papel de los medios de
comunicación en el ejercicio de la ciudadanía el análisis de Livingstone y Lunt
(1994) sobre los programas de televisión con participación de público.
Los denominados talkshows televisivos así como los programas de línea
abierta y algunos foros en Internet (sobre todo en los periódicos) pueden con-
siderarse algo más que entretenimiento ya que funcionan también como canal
de expresión de posturas de las personas frente a sus gobernantes y hasta cierto
punto a las elites de expertos mediante el traslado de opiniones, experiencias,
información y crítica a las elites.
Del mismo modo, los medios de comunicación también permiten al público
cuestionar directamente y pedir cuentas a políticos y expertos, proporcionan-
do un espacio para la comunicación entre el público y la legitimación de esas
opiniones (Livingstone et al. 1994).145
Existe, no obstante, otra aportación de importancia en el análisis de
Livingstone y Lunt (1994), aunque menos destacada. Al reconocer nuevos
papeles a los medios de comunicación, introducen la idea de que aunque
podamos tratar con las mismas tecnologías durante largos períodos de tiempo,
como la televisión, éstas pueden siempre ser el objeto de diferentes formas de
domesticación (Silverstone 1995), es decir, nuevas y viejas tecnologías pueden
ser apropiadas para ejercer la ciudadanía de muchas formas diferentes y por
encima de todo pueden tener lugar interacciones en red entre diferentes tec-
nologías, unas veces a través de un interfaz tecnológico común como las redes
creadas entre Internet, SMS y televisión, otras veces emulando géneros de otras
tecnologías como los programas radiofónicos con participación de oyentes y la
recreación de ese género en la televisión.
Al hablar de medios de comunicación y ciudadanía hay también que tener pre-
sente que los primeros no son objetos de alisis libres de polémica (Eco 1991).
Si hay quien ve en los medios de comunicación un propiciador y un ins-
trumento del ejercicio de la ciudadanía, hay también lugar para críticas de su
acción esencialmente reductora o emuladora de la ciudadanía.
145. A pesar de destacar la dimensión positiva asociada a los nuevos géneros de contenidos de los
medios de comunicación, Livingstone y Lundt (1994) no dejan de criticar el modelo de interacción
que los caracteriza.