Según opiniones a menudo difundidas en artículos de periódicos y revistas
especializadas o generalistas por consultores y diferentes líderes de opinión,
hemos asistido a lo largo de los últimos años de una convergencia en diversas
dimensiones del universo de los medios de comunicación. Sin embargo, creo
que para intentar responder a la pregunta hasta qué punto se ha realizado la
convergencia hay que mantener un espíritu abierto y crítico.
A pesar de que la fusión de grandes gigantes de la comunicación como AOL
y Time Warner (Castells 2004) haya originado diferentes procesos de mimetis-
mo en todo el mundo desarrollado, la gestión ha continuado asentándose bási-
camente en la lógica de unidades de negocio diferenciadas (véase Sony Records
y sus procesos contra el intercambio ilegal de música en Internet y simultáne-
amente la promoción del mp3 por la división de hardware de Sony en sus walk-
mans).
También a nivel tecnológico se han sucedido los intentos de incorporación
de diferentes tecnologías de medios de comunicación previa difusión social
(como la televisión y el ordenador) en aparatos únicos que han obtenido dife-
rentes niveles de éxito (la WebTV fue un fracaso, sin embargo los teléfonos
móviles se han transformado en walkmans gracias al mp3).
La argumentación que seguimos es que el actual sistema de medios de
comunicación parece estar organizado no en función de la idea de convergen-
cia, facilitada por lo digital, sino por la articulación en red.
Incluso en casos de éxito, como en los teléfonos móviles, la alimentación
del mp3 continúa estando supeditada al establecimiento de una conexión de
red mediante PC o Mac para descargas, para lo cual, suponiendo que sea legíti-
mo, se accede a la red a través de tiendas online al estilo de iTunes u otras. Otro
ejemplo de esa articulación en red es la que nos ofrecen los llamados media ser-
vers (servidores de medios, como por ejemplo los Sony Vaio), en los que a pesar
de existir una convergencia de señal de red sobre protocolos IP (Taplin 2005),
la difusión en el hogar se realiza de modo inalámbrico (Galperin 2005), tenien-
do como destino el lector de música o móvil para mp3, la televisión para pelí-
© Editorial UOC 31 Los medios de comunicación en la sociedad en red
transmisores, es decir, las redes de distribución que engloban el sector postal, las telecomunicacio-
nes e Internet; el de la difusión basada en publicidad; y el del hardware basado en la producción y
distribución de aparatos destinados a la comunicación (cámaras de vídeo, cadenas estéreo, casetes
y periféricos).
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